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HOMENAJE

Montilla celebrará el 150 aniversario de la llegada del agua corriente gracias a José María Sánchez Molero

El ingeniero militar puso al municipio en la vanguardia de los servicios públicos

Retrato del ingeniero militar José María Sánchez Molero ABC

Jesús Prieto

Está a punto de cumplirse el 150 aniversario de la llegada del agua corriente a la ciudad de Montilla . Un ambicioso proyecto que llegó de la mano del militar José María Sánchez Molero que en 1871 vio finalizado un plan de actuación que permitió que el agua saliera por los grifos de muchas casas del centro de la localidad.

Y es que Sánchez Molero había estado previamente en la guerra de África y había participado en la comisión para realizar el itinerario descriptivo que recogía las carreteras nacionales, comarcales y locales que enlazaban unos pueblos con otros. Un poco más tarde, en 1864, también fue miembro de otra comisión que fue solicitada por Napoléon III a la reina Isabel II con el objetivo de determinar en qué punto de la geografía cordobesa tuvo lugar la mítica batalla de Munda .

Esta acumulada experiencia, según apunta el profesor de la UCO, Francisco Montes, le hizo tener acceso a numerosos estudios topográficos y prospecciones arqueológicas de la comarca. Entre ellas del término municipal de Montilla. Por eso el militar propuso al Ayuntamiento montillano en 1870 la traída de aguas hasta el municipio desde el manantial del Cuadrado. En esa época muchos Consistorios estaban cediendo el abastecimiento de agua a empresas ya que se trataba de obras muy costosas. La concesión se hizo por un periodo de 99 años.

Sánchez Molero consiguió terminar el proyecto en poco tiempo y se inauguró coincidiendo con las fiestas patronales en julio de 1871 . Entonces se bendijeron las instalaciones de la empresa Servicio y Abastecimiento de Aguas de Montilla en la conocida hoy como Casa de las Aguas. Incluso tanto el militar como su esposa, María Dolores Moreno, fueron nombrados hijos adoptivos de Montilla . La concesión duró hasta el año 1947 cuando el Ayuntamiento la compró a los herederos por 607.000 pesetas.

Desde el arroyo Cañada Huelma

Para llevar el agua desde el Cuadrado se construyó una tubería que se conducía hasta el arroyo de Cañada Huelma y, desde ahí, por gravedad subía hasta la caseta de bombas que estaba a 1,1 kilómetro del manantial originario. Desde esta caseta se bombeaba hasta la actual Casa de las Aguas desde dónde se distribuía a algunas calles del entramado urbano.

Las tuberías que se usaron eran de fundición con un diamétro de 152 milímetros desde el manantial hasta la Casa de las Aguas. Aunque no está constatado si estas tuberías fueron las originales de 1870 o fueron otras que se colocaron con posterioridad para aumentar la presión.

Hay que tener en cuenta que con el suministro que se aportaba en 1870 sólo habría agua suficiente para 2.750 habitantes cuando en Montilla ya vivían más de 13.000 personas.

Sobre todas estas cuestiones se hablará en unas jornadas el 9 de noviembre en las que intervendrán hablando de Sánchez Molero conocedores de la materia como Francisco Montes, el ingeniero Manuel Llamas o la fiscal Lucía Chacón.

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