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Caso Julen

Antonio Sánchez, el pocero de la finca donde murió Julen, al llegar al juzgado: «No tengo otra historia»

Este martes también declaran como testigos el ayudante del pocero y el maquinista que hizo la zanja

Antonio Sánchez a su entrada en los Juzgados de Málaga J. J. M.

J. J. Madueño

Antonio Sánchez el empresario que hizo el pozo donde murió Julen en Totalán aseguró al entrar al juzgado que va a ratificar lo contado ante la Guardia Civil. «Igual, igual. Yo no tengo otra historia» , aseguró el pocero, al que en un primer momento la defensa del dueño de la finca acusó de ser el responsable de la muerte del niño, pero que la Juez de Instrucción 9 de Málaga decidió no imputar y dejar en condición de testigo de los hechos.

El constructor narró ante la Guardia Civil que dejó el pozo tapado con una piedra de 15 kilos, pero que cuando acudió tras el suceso al lugar de los hechos el escenario se había modificado. «Ha habido movimientos de tierra», aseveró a ABC durante los primeros días de búsqueda. Sánchez explicó a los investigadores que todo estaba cambiando y que el pozo no estaba como lo había dejado su empresa.

Ante la magistrada volvió a ratificar esa declaración. Dijo que hizo el pozo, que estuvo trabajando entre el 10 y el 18 de diciembre. Sánchez contó que hizo dos pozos. Uno lo entubó para recoger agua y tener «como para una casa» . El otro es en el que cayó el niño el pasado 13 de enero.

El pocero aseguró que cuando acabó la prospección quitó el tubo para introducir la roca y cayó parte de la tierra sacada de dentro del pozo. Se formó un pequeño cráter y tapó con una piedra de 15 kilos. En el entorno había unos 6.000 kilos de tierra, que no retiró por falta de medios. « Se dejó preparado para que una máquina lo tapara» , afirmó Javier Rodríguez, abogado del pocero, que no entró en la declaración al ser su representado testigo de los hechos. Sánchez dijo a la juez que lo dejo así porque no podía retirar ese volumen «con palas».

Por su parte, el ayudante del pocero explicó que lo narrado por Antonio Sánchez era la forma habitual de actuar cuando se hacía una prospección y no se encontraba agua. Sin embargo, dijo que no había visto como se tapaba el agujero. La juez también ha llamado este martes al maquinista que hizo la zanja para la construcción de un muro de contención que evitara desprendimientos de la montaña . Este testigo podría dar la clave de si el pozo estaba tapado y si lo vio tapado con los bloques de hormigón que declaró el dueño de la finca.

Por otro lado, la defensa del dueño de la finca presentó recurso este martes contra la desestimación de investigar la presunta culpabilidad de los bomberos en la muerte del niño. Un informe de un arquitecto, que no fue considerado «pericial» por la juez, apuntó a que podría ser una pica lanzada al pozo en las primeras horas de rescate la que mató a Julen. Esa línea fue descartada por la magistrada, pero la defensa ha recurrido la decisión.

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