Campañas contra el agro andaluz
La «esclavitud» en el campo, un rentable ingreso desde Mánchester para el SAT
El sindicato recibe fondos de una ONG británica de «consumidores éticos»

Lo que se temían los agricultores andaluces después de las campañas de inspección promovidas por Trabajo de la ministra podemita Yolanda Díaz, es una realidad. Muchas de las denuncias de supuestas «vallas con alambradas», «magulladuras en las manos» y una esclavitud encubierta en las ... explotaciones agrícolas españolas, debilitan nuestras exportaciones y están financiadas por quienes ven en los productos españoles, en cuanto a calidad y precio, una competencia difícil de igualar.
En Gran Bretaña, con sede en Mánchester, existe una ong, «Ethical Consumers», que se dedica, mediante el sistema de pequeñas colectas individuales, «crowdfunding», a denunciar como «los trabajadores inmigrantes, que proveen de fruta y vegetales a los supermercados del Reino Unido, han sido confinados debido a las recientes leyes de distanciamiento social en estrechos asentamientos del sur de España, a menudo sin acceso a agua corriente, sanidad básica o alimentos».
El dinero recaudado, a la hora de escribir estas líneas llevaba 752 aportaciones por un total de 24.542 libras esterlinas, 27.400 euros, irá destinado al sindicato afín a Podemos, Sindicato de Obreros del Campo-SAT. Su anterior presidente, DiegoCañamero, fue a la vez diputado morado en las Cortes Generales. Un 42,5% irá a la organización de Almería y la misma cantidad a la de Huelva. El 15 por ciento restante se lo queda los de «Ethical Consumers» para gastos de gestión y administración; eso sí, si lo conseguido supera las 6.000 libras esterlinas, ese porcentaje baja al 10 por ciento para destinar el sobrante a más campañas de «crowfunding» para denunciar lo que ponen en boca de Amadeu (nombre supuesto de un inmigrante extranjero que vive en los asentamientos de Lepe): «Hay mucha gente que no tiene nada para comer, ni agua potable».
Geles contra el Covid-19
El Sindicato de Obreros del Campo SAT, se compromete a que una vez recibido el dinero, lo destinará a comprar en esas dos provincias «alimentos, medicinas, pañales y otros productos para el bebé, productos de higiene personal, mascarillas, guantes, gel desinfectante y otros productos de protección personal contra el Covid-19». Desde «Ethical Cosumers», huelga decir que su traducción es consumidores éticos, afirman que con esta acción están contribuyendo a acabar con los poblados chabolistas de Huelva y Almería, los mismos que llevan más de 20 años sin que se solucionen. Desde las organizaciones agrarias están ya «hartos de que nos achaquen las condiciones de las viviendas de los temporeros , un problema de orden público que es de la administración, regional o municipal», explican a este periódico. «En zonas de costa se asientan en chabolas porque el alquiler es caro, enJaén hay albergues y campamentos y en Almería, con cuatro cosechas al año existe más estabilidad y comparten viviendas», señalan.
Lo cierto es que tanto en la crisis económica del 2008 como en esta del coronavirus, el campo español se ha convertido en un refugio salvavidas para miles de nacionales que han necesitado suplir con las recolecciones el paro del sector terciario .
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete