Un sevillano del macrobrote de Covid del Algarve: «Nos juntábamos en un piso a beber todos»
Hay por ahora diez contagiados de coronavirus y 44 chicos identificados por asistir a un viaje organizado por ellos para celebrar el fin de los exámenes
El segundo macro brote de Covid vinculado a un viaje de fin de curso tiene como protagonistas a decenas de estudiantes de Sevilla. De varios colegios de la provincia, organizaron por su cuenta y sin la intervención de sus centros, una escapada al Algarve para celebrar el fin de los exámenes y de la Selectividad.
Sin embargo, la celebración ha acabado con diez contagiados de coronavirus y 44 jóvenes en seguimiento por la Consejería de Salud y Familias. La razón, cuenta uno de los chicos que acudió al viaje, está en el ocio nocturno. «Nos juntábamos en un piso a beber todos» , confiesa este estudiante que reconoce que como los bares cerraban allí a las diez de la noche, se iban a los apartamentos que tenían alquilados para seguir la fiesta.
El resultado es que se juntaban decenas de chicos en espacios cerrados para beber, lo que supone un espacio perfecto para la transmisión del virus: un lugar cerrado y la desinhibición que provoca el alcohol.
Explica este joven, que pide no ser identificado, que a Portugal viajaron varias decenas de jóvenes. «Unos propusieron el plan con sus amigos y uno conocía a otro, que conocía a otro... Ya sabes cómo va esto. Al final nos fuimos bastantes », explica.
De pandilla en pandilla, el plan fue circulando hasta que se apuntaron al menos 44 chicos sevillanos, los que por ahora tiene identificados la Consejería de Salud y Familias . Pero personas que estuvieron en el viaje señalan que ese fin de semana en el Algarve había «muchos españoles, casi todos de Sevilla». «Yo no sé cuántos fuimos, pero muchos. No paré de encontrarme gente por allí», señala uno de los asistentes.
«Alquilamos casas»
La cuestión es que fueron los propios estudiantes los que organizaron el viaje. Sin mediación de los colegios ni de agencias, como es el caso del macro brote de Mallorca. «Alquilamos las casas y nos metimos por grupos de amigos», explica uno de los jóvenes. Pero con la noche y las copas, se juntaron más y más en cada piso, donde de normal dormían un mínimo de diez personas «pero había pisos de 14 para arriba», añade.
Cuando uno de los jóvenes empezó a encontrarse mal, la noticia corrió como la pólvora entre los amigos. Lo mismo con el positivo en Covid-19. Eso ocurrió al filo del pasado fin de semana y provocó que se volvieran todos los jóvenes sevillanos. Algunos, recogidos por sus padres; otros, alquilando un autobús.
Por el momento hay diez positivos de Covid, uno de cada cuatro de los asistentes. Jóvenes que han asistido reconocen que tanto ellos como sus padres «sabían a lo que iban» y son conscientes de la irresponsabilidad: «Está mal hecho», señalan .
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