Un libro recoge la huella arquitectónica que legó Antonio González Cordón

En el acto se han celebrado dos mesas redondas. La primera ha sido moderada por Nuria Canivell, decana del COAS. Esta ha destacado la importancia de esta publicación, siendo un proyecto coordinado por el hijo del arquitecto, Antonio González Liñán. Esta ha añadido que el Colegio de Arquitectos «es capaz de difundir las obras y los pensamientos de los arquitectos. Por eso esta monografía es un gran logro para nuestro colectivo. Podemos avanzar, pero sin perder de vista nuestro orígenes. No podemos perder de vista al lápiz y al papel como referente».

La arquitecta de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Sevilla Carmen Hernández Rey ha tomando la palabra dando la enhorabuena al COAS por implicarse en este libro. «Nos dijeron que el Ayuntamiento tenía que estar presente en esta publicación y por supuesto dijimos que sí». «La obra de Antonio González Cordón sigue teniendo mucha presencia y muchos de nosotros tuvimos la suerte de ser alumnos de esa generación de arquitectos».

También ha intervenido Francisco Montero, director general de Espacio Universitario de la Universidad de Sevilla. El antiguo director de la Escuela de Arquitectura de Sevilla se ha congratulado de tener a González Cordón como «a uno de mis maestros». Asimismo, ha señalado que «mis profesores me enseñaron que los arquitectos siempre repetimos lo mismo y nos enfrentamos a los mismos problemas. Una ciudad que tiene una escuela de arquitectos es un lujo porque cuenta con arquitectos en todos los ámbitos, tanto en lo profesional como en lo docente, ya que los profesores forman a nuevos arquitectos». Asimismo, ha resaltado la «función social» de la arquitectura y el hecho de que «hay que reivindicar la figura docente», a lo que ha añadido que «no fui alumno de Antonio González Cordón, pero lo recuerdo con una gran admiración. Reconocer la figura de un maestro es esencial. Antonio construyó una línea de trabajo en la Escuela y muchos profesores y alumnos se identifican con dicha línea».

El director de la Escuela de Arquitectura de Sevilla, Ramón Picó, ha comentado que conoció a González Cordón «gracias a Víctor Pérez Escolano y a otras personas que trabajaron con él. Fue un arquitecto vocacional y entregado a una profesión única y no comparable con otra. Todos lo asociamos con el área de Proyectos y también estuvo vinculado con el Departamento de Historia, Teoría y Composición Arquitectónicas. Fue un arquitecto transversal en la formación y también muy cercano a la profesión. Su labor docente y profesional fueron de la mano y no entendía la formación académica sin un perfil profesional asociado».

El responsable de la obra del nuevo estadio del Real Betis Balompié (proyectado en 1997) y del hotel y ordenación de la Plaza de Armas de Sevilla, realizado conjuntamente con Víctor Pérez Escolano a partir de un proyecto de 1989 ejecutado entre los años 1990 y 1992, ha sido evocado también por la secretaria general de Vivienda de la Junta de Andalucía, Alicia Martínez. «Es un honor representar a la Junta de Andalucía en esta acto y visibilizar así la función de Antonio González Cordón como arquitecto». También ha subrayado la «pasión» que ha puesto la anterior decana del COAS, Cristina Murillo, en reconocer la figura de distintos arquitectos a través de publicaciones como esta. «En el libro es emocionante ver la huella que marcó González Cordón en sus compañeros y en la profesión».

En la segunda mesa redonda no ha faltado el también arquitecto Víctor Pérez Escolano, amigo íntimo del homenajeado. Este he destacado el trabajo de González Cordón en la Cámara de Comercio, una obra proyectada en 1979 y realizada entre 1981 y 1982. «Fue un trabajo juvenil para un edificio que representaba muy bien esos momentos previos a la constitución de las autonomías, donde Andalucía tuvo un papel importante». También ha subrayado que para la publicación de esta monografía ha sido importante la colaboración entre la Escuela de Arquitectura y el COAS, siendo la «clave esencial el papel que ha desempeñado la familia para que este libro esté entre nosotros ahora». Igualmente ha alabado la toma de decisión de que el archivo de González Cordón fuera acogido por la Fundación Fidas y por el COAS para su digitalización. «El libro reúne lo principal de su magnífica arquitectura, y además de contar con doce aportaciones y quince autores, se incluye el texto de Antonio 'La estrategia del caracol', fundamental para que lograra la cátedra de Arquitectura en 1999». Asimismo ha recordado el «sentimiento profundo de la amistad y la fraternidad que tuve con Antonio González Cordón».