Marlon y Dvicio ofrecen una noche vibrante de pop-rock en el Tío Pepe Festival de Jerez

Marlon y Dvicio aterrizaron en el Tío Pepe Festival para deleitar al público con algunas de las canciones más exitosas del pop-rock español del momento. Abrió la noche Marlon, que desde el primer momento demostraron tener unas ganas incontrolables de contagiar energía, buen rollo y alegría a sus incondicionales.

La voz en off realizaba la cuenta atrás y comenzaba a sonar «Locos de remate». Aparecieron Juan, Jorge y Adrián Roma, vocalista y líder de la banda, sobre el escenario de la Bodega Las Copas de González Byass.

Con la segunda canción, «Cosas que no se pagan con dinero», hubo un fallo de sonido. Una vez que el público le alertó, Adrián ordenó ir «al principio del bolo» y volvieron a interpretar los temas.

Continuaron con «Me supo a poco», lanzando el vocalista el deseo de que la noche no le supiera a poco a sus fans. Y tanto que no, pues los de Marlon se dieron por completo y se desfondaron.

Al término del siguiente tema, «Rubio loco», hubo un nuevo fallo de sonido, que a partir de entonces no se repetiría más. No obstante, Adrián Roma supo darle la vuelta a esta coyuntura, que puede ser frustrante para un artista. Cantó a capela «24/7», a lo que se sumó el público, en uno de los momentos más pausados de la noche. Fue el único resquicio de calma dentro del torbellino de música que propuso Marlon.

Una vez recuperado el sonido, retomaron la canción, que Roma dedicó a su padre, señalando la palabra «papá» de su guitarra, uno de sus grandes referentes, tal y como explicó en una entrevista a este medio.

«De L.A. a Nueva York» pasando por Jerez para hacer disfrutar a sus fans de una noche espléndida. «De L.A. hasta Jerez», remató Roma el tema. El de Salinas y su banda demostraron que tienen un dominio prodigioso del escenario para conectar con el público con sus canciones, pero también con su actitud, predisposición y entusiasmo.

Tras «Malas hierbas», llegó uno de sus temas más reconocidos. «¿Queréis cantar a saco?», preguntaba el vocalista antes de comenzar con «Tequila y candela». Durante la interpretación del tema, Roma dio varios pases taurinos con la mano, correspondidos con sus respectivos «olés» por parte del público. El concierto estaba siendo de puerta grande.

«Marzo en febrero» antecedió a uno de los éxitos más recientes del momento, «De perreo», con el que Marlon ha conseguido el disco de oro. Al término de la misma, sus fans cantaron el estribillo, gesto que la banda agradeció. Siguieron con canciones igualmente exitosas y reconocidas como «96», «Mi Macarena» y «Volveré».

«Recibir este cariño lejos de tu casa es alucinante», afirmaba Adrián Roma, mientras recordaba giras en años anteriores donde no contaban con mucho seguimiento. Pero, a base de luchar y perseguir sus sueños, las tornas han cambiado hasta alcanzar el éxito, tal y como explicaba el propio vocalista. Con el tema «Con uñas y dientes», invitaron a sus fieles a que luchen por sus sueños y cerraban la primera parte de la noche.

Tras el cambio de equipos, con su oportuno descanso, comenzaba la segunda parte de una nueva noche memorable del Tío Pepe Festival, del que ABC es patrocinador. Era el turno de Dvicio, una banda consagrada en nuestro país y en Latinoamérica, sobre todo, en México.

El vocalista Adrián Ceballos apareció sobre el escenario mientras sus compañeros Martín Ceballos, Nacho Gotor, Alberto González y Luis Gonzalvo interpretaban los primeros sones de «Aire» y entre la ovación del público, que los recibía en pie.

Esta canción pertenece a su nuevo disco, «El Laberinto», que tal y como comentó Adrián Ceballos es el trabajo discográfico más complicado al que se han enfrentado porque ha supuesto «la búsqueda de quiénes somos y a dónde vamos». De esto mismo habla Luis Gonzalvo, batería del grupo, en una entrevista a este medio de comunicación.

Los temas que componen este nuevo disco se caracterizan por estar pensados para el directo, un hecho del que quedó constancia en su presentación en Jerez con canciones como «Te quiero a morir», «Mi mente», «Mil veces», «Te pienso a cada hora» y «Arte». La conexión con sus fans era la esperada cuando se concibieron estas composiciones en el estudio.

Quizás, esa conexión fue aún más intensa con «Arte», pues Adrián Ceballos pidió a sus fieles que cerraran los ojos para sentir de forma más certera la magia de la música en directo. «Tu recuerdo no se irá», cantaba el grupo con el tema «Te pienso a cada hora», el penúltimo que sonó en la bodega. Desde luego que el recuerdo de esta noche no se irá de la memoria de todos aquellos que lo vivieron.

Dvicio intercaló temas de su nuevo disco «El Laberinto» con otros de sus grandes éxitos: «Enamórate», «Valeria», «Soy de volar», «Cinco sentidos» y «Paraíso». En esta última, el vocalista invitó al escenario a Jairo, un fan muy joven que encandiló al grupo y al público.

Incluso hubo tiempo para tocar un tema mítico de «El Canto del Loco». «Me desperté soñando», cantaba Ceballos, verso perteneciente al tema «Una foto en blanco y negro». Al igual que todos sus incondicionales, que se entregaron a la banda mientras soñaban despiertos.

«Para los que es la primera vez que nos escuchan en directo, bienvenidos a la familia». Una familia, la de Dvicio, que no para de crecer. Ante la petición de sus fans, el grupo se despidió con «Casi humanos», siendo un cierre grandioso para una noche de pop-rock espectacular.