¿Quién es el nuevo socio de Abengoa, la primera empresa andaluza?

El nuevo socio de referencia de Abengoa es una de las grandes corporaciones industriales de España, gracias a su actividad como proveedor de piezas metálicas de los principales grupos de automoción (a través de Gestamp), así como a la actividad siderúrgica de Gonvarri Steel Industries y su presencia en el sector de las energías renovables (suministra equipos para grandes parques eólicos con Gonvarri Renewable Industries y ha desarrollado numerosos proyectos de energía fotovoltaica). ¿Quién está detrás de este imperio con unos ingresos anuales que superan los 6.300 millones de euros y más de 32.000 empleados en 93 plantas de 20 países?

La compañía está controlada por la familia Riberas , que comparte algunos aspectos comunes con los Benjumea: gestionan una empresa que está en manos de la segunda generación y son extremadamente discretos. Aunque con frecuencia se dice que Gestamp es una empresa vasca, su fundador Francisco Riberas Pampliega nació en Burgos en 1932 y pasó sus primeros años de vida en el humilde barrio madrileño de Usera. En julio de 1936 su familia huyó de la capital de España y vivió en Valencia, Barcelona y Lleida. Como relata su biógrafo, Juan de Lillo, «1958 y 1959 fueron los años cruciales en la vida de Riberas, porque a partir de entonces, iniciado ya en el negocio de la chapa, con tesón, esfuerzo y trabajo, sin horario y rodeado de un grupo de fieles esforzados, fundó una empresa que pasó de almacén en almacén hasta que construyó su primera gran factoría en Burgos, porque pensó que se lo debía a su tierra».

Este fue el origen de Gestamp , que se convirtió en las siguientes cuatro décadas en líder nacional y uno de los primeros en Europa «en la industria transformadora del acero y de la estampación para componentes de automóvil». Un tercio del capital está controlado por Arcelor Mittal y la mayoría sigue en manos de la familia Riberas.

En 2010 falleció el fundador, pero para entonces ya se había producido un relevo generacional modélico, pues desde hacía diez años eran sus dos hijos varones (Francisco y Jon Riberas Mera) los que desempeñaban el poder ejecutivo en la firma. De hecho, a ellos se le deben dos decisiones que han marcado el devenir de la compañía. Ambos articularon la actual gestión financiera y societaria de la empresa (su padre tenía una gran vocación comercial mientras que ellos, que habían estudiado Icade, profesionalizaron la gestión diaria del grupo). A su vez, el actual consejero delegado, Francisco Riberas Mera , fue el que decidió apostar por el sector de la automoción, que hoy genera más del 50% de los ingresos de la firma y antes de su llegada tenía un porcentaje poco relevante. La actual deuda de la firma apenas llega a dos veces el ebitda (su pasivo total ronda los 1.300 millones).

La operación de Abengoa supone para Gestamp una vuelta al desarrollo de proyectos renovables. Jon Riberas Mera pilotó en 2005 el nacimiento de Gestamp Solar, que en tiempo récord se convirtió en uno de los principales impulsores de iniciativas en el campo de la energía solar fotovoltaica. El pasado julio Gestamp Solar tenía 300 MW en proyectos fotovoltaicos operativos y en construcción, con una cartera adicional de 2,2 GW en desarrollo. En ese momento el fondo de inversión KKR adquirió el 80% de la sociedad por unos 700 millones de euros. Por una cantidad inferior, Gestamp se convierte en el primer accionista del líder mundial en la energía termosolar. Será así un socio con capacidad tecnológica y financiera para encauzar la situación de Abengoa.