Cinco errores al usar la vitamina C en la piel (y un mito muy extendido)

Si los estás cometiendo, significa que no estás aprovechando los beneficios de la vitamina C en la piel

La vitamina C es uno de los ingredientes de moda en cosmética, aunque no todas saben cómo usarlo. Como poco, te tiene que sonar por sus poderes antioxidantes. ¿Qué significa eso? Que la vitamina C en la piel previene los signos del envejecimiento al neutralizar los radicales libres y protegerla del estrés oxidativo. Eso hace que todos los dermatólogos recomienden incorporar este ingrediente en la rutina de belleza, ya sea a través de cremas, ampollas o del cosmético de moda, el sérum.

Además, la vitamina C aporta a la piel otros beneficios como el de prevenir y tratar finas arrugas al intervenir en la síntesis de colágeno y elastina. O, uno de los más conocidos: su poder despigmentante. Y es que el ácido ascórbico (su nombre técnico) interfiere en la síntesis de melanina impidiendo que se formen manchas y aclarando las existentes. Por eso la mayoría de fórmulas que prometen iluminar la piel contienen este activo en su listado de ingredientes.

Errores al usar la vitamina C en la piel

Ahora bien, al ser un activo tan famoso y con un uso tan extendido en la cosmética, es fácil caer en errores que impiden que tenga eficacia en la piel. ¿Cometes tú alguno de ellos? ¡Compruébalo!

No aplicar protector solar

La vitamina C ha de combinarse con protector solar durante el día, sí o sí. No porque vayan a salirte manchas en la cara, una creencia popular muy extendida, sino porque el activo perdería toda su eficacia. Y es que es un ingrediente fotosensible que se inactiva con el sol. Así que si no quieres desperdiciar esa inversión de tiempo y dinero que realizas cada mañana, lo mejor será que uses después de tu sérum una hidratante con filtro solar o simplemente añadas un protector a la rutina. ¡Ahora hay fórmulas muy cosméticas que no resultan pesadas e incluso aportan un toque de color!

Usarla solo una vez al día

Al margen de quienes siguen creyendo que la vitamina C no se puede usar por el día porque hace que salgan manchas en el cutis, hay quienes no saben que conviene aplicarla tanto de día como de noche. Durante el día, el ácido ascórbico protege del estrés oxidativo (radiación, contaminación y estrés, sobre todo). Durante la noche, neutraliza los radicales libres y repara la piel en su proceso de renovación celular.

No exfoliar

Si usas vitamina C a diario es posible que hayas notado que tus poros se ensucian más de lo habitual. La razón es que el activo cambia de color sobre la piel con la oxidación (incluso es posible que hayas observado que amarillea en restos que hayan quedado en superficies o por fuera del propio envase). Por eso es recomendable exfoliar la piel al menos una vez por semana para evitar que los poros se ensucien.

No combinarla con otros activos

La vitamina C funciona mejor con otros antioxidantes como la vitamina E o el ácido ferúlico. ¡Se aprovecha mejor su eficacia! Pero además trabaja muy bien en combinación con el retinol aplicado en la rutina de noche ya que potencia la eficacia de los retinoides al protegerlos de la oxidación. Así que recuerda: retinoides de noche + vitamina C de día= ¡combinación ganadora!

No preservar el producto

La vitamina C es muy inestable y se oxida fácilmente con la luz o el oxígeno. Por eso normalmente los sérums que la contienen vienen presentados en envases opacos y de pequeño tamaño. Aún así, es importante no contaminar el dosificador poniéndolo en contacto directo con la piel (sí, como en la típica imagen que publicita estos productos) y cerrarlo inmediatamente una vez obtenida la cantidad necesaria.

Respecto a esto debes saber que algunas fórmulas utilizan vitamina C estabilizada, lo que permite que el activo no reaccione ni con la luz ni el oxígeno, o incluso encapsulada, lo que hace posibleque el activo se preserve hasta el momento preciso de su aplicación en la piel para una mayor eficacia.

El mito de las manchas en la piel

El mito más extendido sobre la vitamina C es que produce manchas en el cutis. ¿Lo has oído alguna vez? Por eso muchas mujeres evitan usarla durante el día o en los meses de verano. Pero ¡nada más lejos! El ácido ascórbico ayuda a reducir las manchas y blanquear la piel. Además, inhibe una enzima necesaria para producir melanina, evitando la aparición de nuevas manchas.

El error probablemente viene de que se trata de un activo fotosensible (que pierde efectividad con la luz del sol), aunque no fotosensibilizante, lo que significaría que causa reacciones en la piel en combinación con la radiación solar (algo que sí ocurre con el retinol).

Y tú, ¿estabas usando bien la vitamina C en la piel en tus rituales de belleza diarios?