Asistimos a la primera edición de la Escuela de Maquillaje de NARS en Sevilla para aprender cómo obtener el cutis radiante que todas queremos
Ni apagada ni con brillos descontrolados. Ya sabes que la piel de tendencia es mate pero radiante, con un cutis jugoso, pero aterciopelado, que irradia luminosidad. Pero, aunque tengamos claro el concepto, ponerlo en práctica no resulta nada fácil sin caer en los clásicos errores con la base de maquillaje. A saber: efecto máscara, acabado acartonado, cobertura poco duradera, tono apagado o poco natural, etc. Nada mejor que tomar nota de los consejos de una «make up artist» para redescubrir la manera ideal de obtener una piel «glowy» con nuestra base de maquillaje.
Por eso, este martes asistimos a la primera edición de la Escuela de Maquillaje de NARS en Sevilla, que se celebró en el Hotel Fontecruz Seises. Una exclusiva «masterclass» de maquillaje en la que, de la mano de Myriam Artiles, maquilladora y formadora nacional de la firma, pudimos aprender las claves para conseguir una piel «glowy» de tendencia.
Ni pinceles ni brochas de maquillaje hicieron falta apenas para conseguir un cutis radiante con una cobertura duradera. Así, tras obtener el diagnóstico de los maquilladores de la marca, cada una de las veinte invitadas a esta exclusiva cita dieron con el tono de fondo de maquillaje y corrector más apropiado para su tono de piel.
«Puedes probarlo sobre el hueso de la mandíbula porque así puedes dar con un tono equilibrado entre el del rostro o el del cuello», señalaba Artiles. Si bien recomendaba ponernos en manos de maquilladores y asesores de cada firma para dar con el tono con el que más nos identificamos de entre la amplia variedad que suelen lanzar las marcas de maquillaje.
Para las variaciones de tono a lo largo del año, la maquilladora de NARS recomienda contar al menos con dos tonos diferentes de base maquillaje: uno para primavera-verano y otro para otoño-invierno. Aunque también nos revela un truco para ir adaptando el tono de la maquillaje al grado de bronceado de nuestra piel a lo largo del año: «Puedes mezclar unas gotas bronceador fluido con tu base para oscurecer el tono cuando estés más bronceada sin necesidad de cambiar de maquillaje».
Piel «glowy», paso a paso
- Según Fançois Nars, fundador y director creativo de la firma, el 50% del éxito de un look de maquillaje reside en preparar bien la piel. Solo así conseguiremos que permanezca hidratada y el maquillaje no se absorba ni se cuartee. Así, el primer paso de la masterclass para conseguir una piel radiante fue aplicar Aqua Gel Luminous Mask de NARS, un tratamiento hidratante que proporciona una inmediata sensación de frescor en la piel.
Además de la hidratación general del rostro debemos preparar el contorno del ojos aplicando un producto específico con un ligero masaje que recorra la órbita ósea del ojo.
Según Artiles, una de las claves a la hora de aplicar tanto la base hidratante como el contorno de ojos es calentar el productos con las yemas de los dedos previamente.
2. Aplicar la base de maquillaje con una técnica precisa a través de la cual conseguiremos usar la cantidad de producto suficiente para conseguir una tez «glowy» natural sin crear el temido efecto máscara. «Hay que comenzar calentando la base con las manos para aplicarla después desde el centro del rostro hacia afuera. Nada de repartir el producto por distintos puntos de la cara. Hay que ir extendiendo del centro hacia afuera para utilizar la cantidad justa e ir añadiendo según vayamos necesitando», explicaba la maquilladora de NARS.
En este caso, la firma presentaba el fondo de maquillaje Sheer Glow Foundation con sus múltiples tonos y acabados. Una base con textura fluida e hidratante, cobertura totalmente modulable y acabado luminoso.
3. Aplicar el corrector con las yemas de los dedos. Al igual que ocurre con la base, el producto se calienta frotando las yemas de los dedos y se aplica con estas directamente sobre la zona más oscura de la ojera. Después se asienta en esa zona mediante ligeros toques para finalmente extender el resto del producto bajo la línea de las pestañas. «Con este método conseguimos corregir la zona bajo el ojo que realmente lo necesita y evitamos esparcir el corrector demasiado y dejarla a la vista», dice Artiles. Porque cuando eso ocurre, tendemos a volver a aplicar el corrector, obteniendo una capa excesiva y artificial de producto.
Después podemos repasar las pequeñas imperfecciones del rostro (granitos, manchas, cicatrices, etc.) con ligeros toque de corrector, también aplicados con la yema de los dedos. «Muchas veces sacrificamos la naturalidad del rostro al elegir una cobertura mayor de la que necesitamos solo para cubrir unas pocas imperfecciones», advierte Myriam Artiles. Y recuerda que tan solo hay que reforzar la cobertura en esas áreas, sin necesidad de recargar toda la tez.
Durante la «masterclass» las alumnas aplicaron Radiant Creamy Concealer de NARS, un corrector con acabado luminoso que además de disimular imperfecciones incorpora tratamiento hidratante y una tecnología para la difusión de la luz. Esta origina «un componente óptico que atenúa las líneas de expresión». Lo interesante de este corrector es que, además de proporcionar un acabado luminoso (no mate) es de larga duración y resistente al agua.
4. Polvos traslúcidos para sellar: la clave de este paso que sirve para fijar el maquillaje sobre la piel está en lograr mantener la luminosidad obtenida con la base. ¿Cómo? El truco de Myriam Artiles es pulir el rostro con una brocha kabuki a base de ligeras pasadas que permitan asentar el polvo sobre la tez y retirar el exceso.
Los siguientes talleres de la Escuela de Maquillaje de NARS tendrán lugar los días 9 de abril (Las
Palmas), 14 de mayo (Barcelona) y 11 de junio (Madrid).
Y tú, ahora que ya sabes cómo aplicar la base de maquillaje para obtener un cutis jugoso y radiante por muchas horas, ¡A qué esperas a poner en marcha esas manos!
