Lucir unas uñas perfectas con esmaltado de gel es una maravilla. La durabilidad, el brillo y la resistencia nos conquistan al instante. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cuántas veces es recomendable repetir la aplicación y qué pasa si no las retiras a tiempo? Es muy importante conocer este tipo de información ya que, en muchas ocasiones, profesionales de este sector se han topado con clientas que no han cuidado como deberían sus uñas y se han estropeado su esmalte natural sin saberlo.
“Hay que hacerlo cada tres semanas”
Si eres fan de las extensiones de uñas de gel, deberías saber que estas estructuras tienen una vida útil de aproximadamente tres semanas. ¿Por qué esta limitación? Con el tiempo, la uña natural crece, creando un espacio entre la extensión y la cutícula. Este hueco no es solo antiestético, sino que se convierte en una vía de entrada perfecta para la humedad y la suciedad.
Y aquí es donde la cosa se pone seria. La acumulación de agua bajo la extensión crea un ambiente ideal para la proliferación de hongos. Según Blanca Castillo, del salón de manicura y pedicura Surreal Beauty Nail and Bar, “es importante retirar las extensiones cada tres semanas y realizar un mantenimiento completo, que implica retirar la antigua estructura y volver a aplicar una nueva.”
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De hecho, sino, como hemos comentado, podrían salirle hongos a las uñas e incluso también puede aparecer la temida pseudomona, una bacteria que puede causar una antiestética coloración verdosa en la uña.
¿Y qué pasa con las uñas de gel semi permanentes?
Por otro lado, también existe el esmalte semi permanente de gel y, aunque creas que es totalmente diferente y no tiene ningún efecto malo en las uñas, nada más lejos de la realidad, porque según nos informa Blanca, es prácticamente lo mismo “si no se retira correctamente por profesionales”.
“Después de tres semanas el esmalte empieza a levantarse y eso también daña la uña”, revelaba. Castillo insiste en la importancia de retirar el esmalte semipermanente cada tres semanas. Si deseas seguir disfrutando de unas uñas perfectas, lo ideal es retirar el antiguo esmalte y aplicar una nueva capa. Ignorar este consejo puede traducirse en uñas débiles, quebradizas y, en el peor de los casos, con problemas de salud.
Es fácil caer en la tentación de alargar la vida de nuestras uñas de gel, ya sea por pereza o por ahorrar tiempo y dinero. En definitiva, te puedes hacer las uñas de gel todas las veces que quieras durante el mismo año, solo que tienes que retirarlas y mantenerlas cada tres semanas.