
La cantante confesó uno de sus momentos profesionales más avergonzantes en el programa 'Martínez y Hermanos'
Todos los artistas tienen momentos difíciles en sus inicios, y Rosario Flores no es la excepción. La cantante recordó en Martínez y Hermanos uno de los episodios más vergonzosos de su carrera: un concierto desastroso como telonera de Ketama, donde el pánico y la confusión casi la hacen abandonar el escenario.
Un error de coordinación que lo arruinó todo
Rosario confesó que, en aquel concierto, su nerviosismo era extremo. No solo estaba abriendo para Ketama, un grupo al que admiraba profundamente, sino que además su madre estaba entre el público, algo que aumentó aún más su tensión.
El desastre ocurrió cuando, por un error en la lista de canciones, la banda comenzó a tocar dos temas distintos al mismo tiempo. Sin experiencia suficiente para manejar la situación, Rosario intentó seguir adelante cantando una canción con el tono de otra, lo que generó una actuación caótica y desconcertante.
Quiso desaparecer después del concierto
A pesar de sus esfuerzos por salvar el show, la artista reconoció que sintió cómo la energía del público se desplomaba: “Yo quería quedar mejor que nadie porque estaba Ketama y todo el mundo allí, pero quedé fatal“, confesó. Aunque logró terminar su actuación, el sentimiento de vergüenza fue tan grande que solo quería irse a su casa y no ver a nadie.
Con el tiempo, Rosario aprendió de aquella experiencia y supo tomárselo con humor. “Después de eso, pensé: ‘Peor que esto no me va a pasar nada’“. Sin embargo, aún hoy le cuesta recordar aquel momento sin ponerse nerviosa.