
Nos adentramos en Aire Ancient Baths para vivir esta increíble experiencia. Lujosos rituales, baños termales y masajes relajantes conseguirán que cuerpo y mente viajen a todo un mundo de sensaciones. Bulevar Sur ha sido testigo de ello.
La aventura comienza en el primer momento en el que desde la calle Aire, que inspira su nombre, se percibe ese aroma tan especial que respira lujoso silencioso. Un olor, inspirado en los patios sevillanos, que nos va guiando hasta adentrarnos en una antigua casa-palacio de estilo mudéjar con casi cinco siglos de historia.
Un viaje sensorial
Si algo caracteriza la experiencia Aire Ancient Baths es su exhaustivo cuidado de los sentidos. A nivel sensorial todo es una agradable sensación de principio a fin. El olor tan especial y relajante se mezcla con una suave música de componente otomano y guitarra española. Una combinación perfecta que consigue que comiences a desconectar de toda esa rapidez que has dejado en la puerta. El viaje comienza en un pequeño patio típico andaluz en el que puedes servirte un té y tomarte unos minutos para disfrutar del momento presente.
Baños termales, velas y paz
Los baños termales son un común denominador en todas las experiencias que Aire Ancient Baths tiene repartidas ya por Europa y Estados Unidos, siendo Sevilla la casa que vio nacer este proyecto. Inspirado en los baños árabes, romanos y griegos el recorrido por los baños termales se acompaña por decenas de velas que crean un ambiente único y relajante. Las distintas salas de agua a diferentes temperaturas se distribuyen por toda la casa palacio. El agua es así el elemento protagonista de esta experiencia que crea una atmósfera llena de magia y glamour.
Masajes y rituales exclusivos
Entre sus rituales encontramos un baño de vino en un antiguo pozo de mármol del S.XVII de origen veneciano. Podrás sumergirte para disfrutar de las propiedades antioxidantes de la uva tinta de la Ribera del Duero española. El masaje corporal es sin duda un momento mágico en el que cuerpo y mente se rinden a la máxima relajación con una experiencia de confort y tranquilidad.
La sorpresa final
Tras el recorrido por estos espacios tan singulares, la guinda del pastel se encuentra situada en el exterior, subiendo a la parte alta de esta casa palacio. Unas increíbles vistas a la Giralda y a la Catedral de Sevilla ponen fin a este viaje. Sin duda el broche de oro para una vivencia sin igual.