
Descubre qué colores son los recomendados y cuáles debes de evitar
Ahora que ha llegado el otoño, muchos están haciéndose un cambio de look, otras comprando nuevas prendas para el fondo de armario, y otros, pensando en hacerle un cambio de imagen a su casa. En este caso, no todos los colores van bien para nuestro dormitorio, cada color puede transmitirnos un tipo de ambiente diferente y quizá no los que creas mejores, sean los más acertados. Por eso, una psicóloga revela qué colores son los recomendados para pintar las paredes de tu dormitorio y cuáles evitar.
“Cada color está asociado a un significado”
“Si preguntásemos a un grupo de personas cuál es su color favorito, seguramente tendríamos una mayoría de azul. Esto es porque es el color de la simpatía, la armonía, la confianza…”, comienza diciendo Marta Sarmiento, psicóloga sanitaria especializada en los trastornos de ansiedad.
“Pero si trasladamos esta pregunta a cuál es el color favorito para vestirte o para pintar las paredes de tu casa, seguramente la respuesta cambie, y esto se debe a que cada color está asociado a un significado.
Y aunque el color que más nos gusta sea el azul por lo que nos transmite, puede que nosotros no queramos transmitir eso mismo en nuestra ropa o que no queramos que el ambiente nos transmita este aspecto al pintar las paredes de este color”.

Y es que, como bien dice esta psicóloga, el color siempre ha formado parte del ser humano y con los años se le ha ido atribuyendo un valor y una serie de características que probablemente simbolicen o influyan en la psique y el comportamiento humano, “y a este campo de estudio se le llama la ‘Psicología del color’”.
Los mejores colores y los peores para el dormitorio
Como sabrás, el hogar suele ser el “refugio” que tenemos las personas en nuestro día a día. “Son como cuatro paredes que nos permiten desconectar del ritmo frenético del exterior y está ligado a una sensación de bienestar”, comenta Marta Sarmiento.
“Entonces cada estancia, además, demuestra rasgos de personalidad de las personas que incluso va evolucionando y va variando a lo largo de nuestra vida. Por ejemplo, el color de tu habitación cuando eras niño, seguramente no sea el mismo que ahora cuando eres adulto. Y eso es porque la habitación es la estancia del hogar que sentimos más nuestro”.
Una vez entendida la psicología del color, si estás pensando en pintar las paredes del dormitorio, debes saber que los psicólogos recomiendan evitar los colores intensos como el rojo, el naranja y los colores muy vibrantes “porque pueden aumentar la energía y dificultar la relajación”.

Sarmiento afirma que los colores beige, colores neutros, colores crema y arena, son los mejores para este ambiente “porque invitan a la calidez y a la tranquilidad, a la vez que también aportan luz.”
Por otro lado, si quieres algo con un poquito más de color, esta psicóloga comenta que los tonos lavanda, lilas, verdes y azules “mientras sean suaves, están bien, porque invitan a la relajación”. Así que ya sabes, este otoño, si quieres pintar las paredes de tu dormitorio, evita los colores vibrantes y tira más por tonos beige.