Son uno de los muebles más prácticos, los zapateros se han convertido en imprescindible para poder organizar el calzado en casa
¿Quién no ha pensando en algún momento que tiene demasiados zapatos? Otro de los problemas habituales es la falta de espacio en los armarios, cada vez más pequeños en los pisos. Pero hay una solución que puedes aplicar en tu hogar para conseguir ese espacio de almacenaje de zapatos que necesitas: comprar zapateros.
Hay muchos tipos de zapateros que seguro que pueden adaptarse a las necesidades de tu hogar. Quizá necesites organizarlos dentro del armario, detrás de la puerta o puedas utilizar un rincón muerto del dormitorio o pasillo para colocar un mueble en el que quepan muchos de tus zapatos.
Tipos de zapatero: ¿cuál me conviene?
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Si tenemos la suerte de contar con un buen número de armarios amplios en casa y los podemos vestir a nuestro gusto, lo mejor será contar con espacios dedicados expresamente a los zapatos. Las fórmulas más cómodas suelen ser las extraíbles, que funcionan a modo de cajones con los que podemos seleccionar el calzado cómodamente. Otra alternativa cuando hay espacio suficiente son los armarios de zapatos, que pueden quedar a la vista (como en los vestidores) u ocultos tras una puerta.
Pero, si no es el caso y no tenemos un espacio concreto en el que almacenar el calzado, hay múltiples soluciones para almacenarlo con orden y practicidad en casa.
Muebles zapateros
Son esos muebles que pueden tener tamaños y diseños muy variados que se pueden colocar en cualquier estancia de la casa. Normalmente cuentan con baldas o puertas abatibles para colocar los pares de zapatos de manera ordenada. Las puertas pueden ser correderas en algunos casos, pensadas para ocupar el mínimo espacio al abrir el mueble.
Los modelos altos aprovechan el espacio en vertical (pueden llegar a ser muy estrechos, para aprovechar rincones) aunque también los hay bajos o que hacen las veces de falsa cómoda.
Zapateros abiertos
Para los espacios con decoraciones más funcionales, los zapateros abiertos a modo de estantería pueden ser una buena opción. También son apropiados para colocar en la entrada de casa y evitar así usar el calzado de la calle en el interior.
Son ideales para tener todo el calzado a la vista y no perder tiempo buscando ese par que necesitas. Como contrapartida, al estar a la vista, pueden acumular polvo y suciedad como cualquier objeto decorativo de la casa. Por tanto, será necesario limpiar el mueble y los zapatos de vez en cuando.
Escaleras
Dentro de los zapateros abiertos, hay modelos diseñados a modo de escalera que ocupan poco espacio y permiten tener también el calzado muy a mano y a la vista. Incluso podemos aprovechar algunas baldas para almacenar otros objetos decorativos o funcionales.
Lo más escuetos, son como auténticas escaleras, por lo que pueden servir también para colocar toallas, bufandas o pañuelos si lo deseamos.
Zapateros multifunción
Hay otras soluciones que se integran dentro de muebles que cumplen varias funciones. Como los bancos que incluyen estantes para zapatos (ya sean abiertos o con puertas). Son perfectos para colocar en la entrada de casa y así calzarnos y descalzarnos cada vez que vayamos a entrar o salir.
También podemos hacer uso de un espejo que oculte un armario zapatero en su interior. De esta forma, aprovechamos el espacio para un doble uso.
Árboles de zapatos
Para ocupar el mínimo espacio almacenando el máximo número posible de pares los árboles de zapatos son una buena opción. Sirven tanto para ser colocados dentro de armarios como fuera, aunque esta segunda opción es mucho menos estética y limpia. Todo dependerá del espacio con el que contemos.
Algunos como los que se instalan en el interior de los armarios son giratorios para facilitar el manejo del calzado y que esté siempre a mano cuando lo necesitemos.
Baldas
No siempre es necesario que contemos con un mueble zapatero para almacenar el calzado. Basta con que coloquemos cuantas baldas necesitemos en la pared para mantener ordenado y a la vista nuestro calzado. Es una solución ideal para habitaciones que no cuentan con armarios ni espacio de almacenaje.
Soportes instalables
Este tipo de soportes sirven para almacenar zapatos tanto en paredes como en puertas, donde se pueden instalar. Son ideales para colocar en las habitaciones de hogares con poco espacio y permiten tener el calzado a mano, aunque no a salvo de la suciedad y el polvo.
Organizadores para colgar
Otra solución para almacenar zapatos en espacios reducidos y con poco presupuesto son los organizadores de zapatos. Se pueden colocar tanto en armarios como detrás de las puertas porque ocupan muy poco al aprovechar el espacio vertical.
(Foto principal: @leroymerlines)
