Ana Herreros de Tejada es uno de los jóvenes talentos del diseño en Sevilla. A sus 30 años ha encontrado por fin esa verdadera pasión en la que trabajar. Bulevar Sur encontró muy interesante su última colección presentada en la pasarela Code 41 y tras ver sus redes sociales llenas de invitadas elegantes y sofisticadas, además de alguna novia, no hemos podido evitar colarnos en su estudio-taller (Federico Sánchez Bedoya, 20 3º izq) para saber y conocer más.
¿Por qué dedicarte y apostar por vivir del diseño de moda?
«Empecé tarde, a los 25 años. Antes estudié Turismo y estuve 3 años trabajando en el sector. Después de un verano de trabajo decidí que no quería volver a eso y lo cierto es que siempre había querido hacer moda. Pero cuando sales del instituto y lo dices no recibes tampoco mucho apoyo, no sabes muy bien qué hacer… Cuando me decidí estudié moda en CEADE y después empecé en segundo a hacer prácticas con Roberto Diz, en tercero comencé a trabajar para él.
¿Qué aprendiste con Roberto Diz?
Primero con las prácticas iba por las mañanas a clase y por las tardes al taller donde hacía patronaje, muchas cosas a mano, asistía a las pruebas con él… Aprendí mucho de él y del taller y de cómo funciona la empresa en su día a día, etc. Me gusta mucho Roberto y hace cosas que solo se le permiten a él y mucha gente me dice que se me nota su influencia aunque él sea más extremo.
¿Cuándo decidiste dar el paso de probar con tu propia firma de moda?
Hace dos años y medio. Sentía que tenía que dar el salto aunque allí con Roberto Diz estaba muy bien. Por las tardes trabajaba con ellos y por las mañanas iba haciendo mis cositas y primeros encargos. Pero llegó ese momento y me independicé en un local pequeñito en Torneo, después compartí local en una tienda en Los Remedios que tiene mi madre y a este nuevo espacio nos mudamos en enero y desde que estamos aquí el cambio ha sido radical.
¿Qué factor ha sido imprescindible para que puedas vivir de la moda actualmente?
«Ha sido súper importante el boca a boca, sigue siendo clave, es increíble porque no he hecho campañas de publicidad fuertes. Creo que me sirven más el boca a boca y las redes sociales. Si una clienta se va contenta sé que se lo dirá al resto y eso es lo que me ayuda».
¿Cómo llegaron esas primeras clientas?
«Lo típico es empezar con familia, amigas, conocidas y ellas a su vez lo van comentando. Me ayudó mucho pasar por la tienda de mi madre en Los Remedios primero porque muchas clientas venían buscando ropa de vestir y les daba mi tarjeta, hubo gente que confió en mi y así me han ido saliendo más…
¿Actualmente qué tipo de clientela tienes?
«Son clientas fieles, la mayoría jóvenes (de 25 a 30 años), de un nivel social muy bueno…Aunque también hago madrinas, que son diseños más especiales, novias, etc».
¿Cómo ha ido perfilándose tu estilo y adaptándose al de esas mujeres que confían en ti?
«Creo que no he tenido que desviarme mucho de mi estilo, todas las que han venido lo han hecho porque les gusta lo que hago. A alguna novia le he tenido que decir que no porque tenía una idea muy clara y que no tenía nada que ver conmigo. Yo siempre pienso en si me lo pondría yo, en hacer algo que me guste y con lo que me sienta cómoda. Soy bastante sencilla, apenas uso encajes, soy elegante, sobria e intento jugar con colores diferentes, detalle especiales más que recargar. Juvenil y, sobre todo, clásico sin llegar a ser ñoño. Un vestido que pueda durar muchas temporadas».
¿Cuáles son las principales tendencias que propones y te piden las invitadas de 2016?
«Mi colección ha servido de guía. El rosa cuarzo que tanto se lleva cuando se lo prueban suele gustarles y apuestan por él. Hemos aplicado tul como transparencias en mangas y espalda, el largo midi, estoy haciendo muchos hombros al aire con escote bañera, aplicaciones en oro o de flecos y sobre todo escotes en la espalda. El conjunto de falda con drapeado en los dos lados con el top de hombros al aire se lo llevan todo en el mismo color -parece un vestido-, tanto largo como corto, y después tiene mucha utilidad también por separado».
¿Cómo has integrado también el diseño nupcial?
«Hice la primera novia el año pasado y este año ya son seis. El vestido de novia es un trabajo más exigente, pero me gusta y lo disfruto mucho. No haría una colección porque creo que todas buscan algo exclusivo y para las que quieran un diseño de colección ya están Pronovias o Rosa Clará que lo hacen muy bien».
¿En qué sentido va a ir creciendo tu firma AHT by Ana Herreros de Tejada?
«Estamos empezando a trabajar para hacer una colección de prêt à porter por tallas para el verano que viene, una producción limitada con tallas, diferentes modelos y colores. La clientela me lo ha ido pidiendo, a veces me llamaban para comprar un vestido de inmediato y claro, trabando a medida y bajo pedido es imposible responder con rapidez… La idea es que haya tienda online con la que poder llegar a sitios fuera de Sevilla y además en mi estudio y un punto de venta en la tienda Valle 7. Y también seguir con el trabajo a medida, es verdad que la mujer en Sevilla cuando se viste para bodas quiere ir un poco más exclusiva. No quieres encontrarte con otra que vaya igual».
¿Sientes como otros compañeros de profesión que para triunfar has de salir de Andalucía?
«Mi idea es quedarme en Sevilla y creo que por cómo nos arreglamos y nuestro estilo aquí hay mercado para la medida y la fiesta».