Eva Castilla Shoes, la firma de zapatería artesana de la Sierra Sur de Sevilla

Eva Castilla nació en Herrera, un pequeño pueblo de la Sierra Sur de Sevilla. Era una niña inquieta y extrovertida que con tan solo seis años ya soñaba con diseñar zapatos. Algo que unido a su gran imaginación y al interés que este mundo le despertaba, la llevaron a crear sus primeros salones customizando unas merceditas. La diseñadora se crió en una familia humilde en la que le ensañaron que el esfuerzo y el sacrificio eran las principales claves para conseguir el éxito. Por ello, Eva decidió enfocar su vida al mundo de la belleza hasta el punto de llegar a abrir dos negocios que le dieron la posibilidad económica de poder formarse en el mundo del calzado. Viajó a Elda, cuna del calzado, para estudiar diseño y confección, pero a pesar de los numerosos conocimientos adquiridos la diseñadora pensaba que aún no había completado su formación y decidió contar con la ayuda de un maestro zapatero, quien le enseñó todo acerca de la fabricación del calzado. En 2016 decidió emprender con la creación de un taller propio en el que diseña y fabrica zapatos a medida, con ellos busca el equilibrio entre la comodidad y la elegancia, algo que según ella hoy en día se está perdiendo. Poco a poco, Eva Castilla se ha ido haciendo con un taller lleno de tejidos de todo tipo de colores y texturas propiciando una atmósfera ideal para la creación, que le ayuda a fabricar los nuevos diseños en los que está inmersa. Sus zapatos están hechos exclusivamente a mano y muchos de ellos llevan nombre de mujer. A día de hoy, sigue con el mismo entusiasmo que el primer día y recoge los frutos que ha ido sembrando, ya que celebrities como Nieves Álvarez, Anna Simón, Chenoa y Ainhoa Cantalapiedra ya han calzado unos Eva Castilla. ¿Por qué decidiste dedicar tu vida al mundo del calzado? En primer lugar, porque los zapatos son mi pasión desde siempre, mi complemento favorito en cualquier look. Sin embargo, nunca conseguía encontrar un curso para formarme, supongo que sería por la falta de comunicación que hoy en día han cubierto las redes sociales. A pesar de ello, un día después de buscar y buscar encontré un curso en Madrid que impartía Patricia Rosales y me lancé, significó un punto de inflexión en mi vida porque desde entonces no he podido dejar de aprender. ¿Cómo ha sido ese proceso de formación en el diseño del calzado? El primer curso que realicé me ayudó a conocer a gente que me animó a viajar al Museo del Calzado en Elda para seguir formándome. Viajaba con bastante frecuencia y durante temporadas de entre 15 y 25 días, algo que supuso un gran esfuerzo para mí ya que tuve que dejar a mi hija siendo muy pequeña. Más tarde me ayudé de un maestro zapatero que me ha enseñado cómo perfeccionar el patronaje y el aparado del zapato. ¿Cómo fueron los inicios de inicios de Eva Castilla Shoes? Se puede decir que el amor al calzado hizo que no tardara mucho en decidirme a emprender. Todo fue en una de las veces que subí a Elda, ya que a la vuelta me bajé toda la maquinaria necesaria para montar mi propio taller, esto se unió a la suerte del libre uso de una de las naves que cedía La Conferencia Anual de Ejecutivos (CADE) en mi pueblo, Herrera. Por lo que no dudé en elaborar un proyecto y exponerlo frente a las entidades del Ayuntamiento, gracias a eso me permitieron el total uso de la nave durante tres años. ¿Has pensado en montar una tienda propia de Eva Castilla Shoes? Hace unas semanas he montado mi primera tienda online, unida al taller en el que ofrezco a mis clientas cita previa para poder mostrarles en primera persona los zapatos que he realizado, de esta forma, diseño su propio modelo en función de sus gustos y necesidades. ¿Para quién diseñaste sus primeros zapatos? Los primeros zapatos los hacía para mí, de hecho a día de hoy la que prueba todos los zapatos antes de salir a la venta soy yo. Normalmente el zapato modelo se hace en un 37, pero mi número de pie es el 36 y siempre hago los primeros en esa talla. No obstante, la primera clienta oficial fue una chica sevillana que iba a celebrar su enlace matrimonial en un par de meses y al conocerme decidió confiar en mí, eso me causó un sentimiento entre alegría y satisfacción, ya que el día después de la celebración me dijo que estuvo más de doce horas con ellos puestos. Los zapatos son un elemento muy importante en el día de una novia y su principal preocupación es ir guapa y cómoda. ¿En qué aspectos ha cambiado tu vida montar tu propia firma de calzado? El hecho de dejar el mundo de la belleza y dedicarme de lleno a este mundo me ha hecho crecer porque he encontrado mi camino, el que me hace feliz y me llena completamente. Para mí diseñar es primordial, me pica la curiosidad y las ganas de hacer cada día más y más. Por otro lado, pienso que el mundo de la moda va muy deprisa y alguien que quiera triunfar en él tiene que dejarlo todo y centrarse al 100%. ¿Qué ha significado para Eva Castilla Shoes que un icono de la moda como Nieves Álvarez lleve unos de tus zapatos? Ha sido la última celebrity que ha llevado unos Eva Castilla Shoes y me hizo especial ilusión. El pasado mes de julio asistí al Certamen de Mejor Calzada en el que ella fue galardonada con el premio a la mujer mejor calzada en 2017 y quise regalarle el diseño Lola. Luego lo escogió para presentar su programa "Flash Moda" en TVE un domingo de noviembre. ¿Cuál es tu fuente de inspiración principal? Mis referentes son Roger Vivier y Ferragamo, dos maestros zapateros italianos que de un taller han creado un imperio en el mundo del calzado. Y hablando de mi fuente de inspiración, pues no sé si voy en contra o a favor de la moda, porque diseño lo que me apetece y me gusta en el momento. Nunca paro de pensar, de hecho llevo un blog de dibujo y un bolígrafo en el bolso que utilizo en cualquier parte y momento en el que llega a mi cabeza alguna idea. ¿Crees que hoy en día el sector del calzado tiene la importancia que le corresponde? Pienso que hay un poco de todo, pero mi función principal es ofrecer calidad y diseño. Un par de zapatos que tengan estas cualidades merece ser recompensado, porque hay un gran trabajo y elaboración detrás. ¿Has tenido alguna mala experiencia? Malas experiencias he tenido muchas, pero a día de hoy pienso que todas son necesarias y útiles para seguir aprendiendo.