Scotta, la moda masculina hecha por sevillanos que comienza a recorrer España y el mundo

La moda masculina cada vez es más variada e interesante. El hombre comienza a encontrar en el mercado más opciones, más estilo y más posibilidades para vestir. Scotta es una de ellas y cada vez va a sonarte más. La pasada semana dieron un paso más abriendo su primera tienda de Scotta en Sevilla en pleno centro (c/ Rosario, 12), donde reunieron a amigos e influencers para celebrar el buen ritmo de crecimiento del proyecto de Carlos Serra y Felipe Roca de Togores. Su prenda más vendida es la camisa, pero ojo con el resto de propuestas y con la moda para niños, que también pega fuerte. Para el 2018 duplicarán la facturación del 2017 llegando a los 2,5 millones de euros. Actualmente cuentan con 110 puntos de venta multimarca, tres tiendas propias en Madrid, Sotogrande y Sevilla, y dos franquicias en Valencia y en Portugal. Además de tres corners en El Corte Inglés y dos más que se abrirán en febrero de 2019. En cuanto a la expansión internacional van a centrar los mayores esfuerzos en una primera fase con posibles aperturas de tiendas en Holanda e Inglaterra. Bulevar Sur ha entrevistado a Carlos Serra, uno de sus socios, para conocer la historia, el presente y el estilo de esta firma sevillana que busca su hueco en el sector con pasos firmes y seguros. ¿Cuándo y cómo nace Scotta? Uno de los ex socios, Nacho Ruiz de Terry, estando un día en la universidad dibujó el logo y le gustó, lo registró y de 2003 a 2006 se dedicó a crear prendas de marca blanca como camisetas, polos y sudaderas y los seriagrafiaba con ese logo de la moto. Desde su casa y vendiendo a amigos, amigos de amigos… y en una pequeña tienda de su madre en Heliopolis. Fue creciendo y en 2006 nos asociamos Felipe Roca, Nacho y yo y otros minoritarios para crear la marca más en serio y distribuir ropa por toda España. Entonces tenía otro nombre la marca y llegamos a más de 90 puntos de venta. Ibamos aprendiendo cada día, no sabíamos del sector, de hecho, utilizábamos el garaje de la casa de Nacho como almacén y teníamos que sacar el coche cuando llegaban los pedidos para enviar a los clientes. En 2012 hicimos un parón y reestructuramos la empresa, empezamos a ver nuevos proyectos como crear una línea propia y en 2014 arrancamos de nuevo. Entonces, nos quedamos como socios Felipe y yo y le pusimos el nombre de Scotta, abrimos la tienda online y la tienda propia de Madrid además de seguir en algunas multimarca. ¿De dónde surge el término Scotta? Scotta viene del slang americano de Scooter. ¿Cómo habéis ido creciendo desde entonces? Empezamos en 2014, 2015 y 2016 retomando clientes, dándonos a conocer en Madrid, conociendo el textil porque vender en tienda propia es muy diferente de hacerlo en multimarca. En 2017 decidimos empezar a crecer y tras seis meses de plan de negocio nos sentamos con el primer franquiciado de Lisboa y con El Corte Ingles (Palma de Mallorca y Pozuelo de Alarcón). Y en septiembre 2018 hemos abierto franquicia en Valencia, El Corte Inglés en Castellana (Madrid) y la tienda de Sevilla que es propia con socios locales. ¿Es tan importante como parece tener presencia en El Corte Inglés? Dice mucho de una marca, es una carta de presentación indiscutible. Si te vas fuera de España en determinados sitios si no vendes en El Corte Inglés casi ni te miran a la cara… No significa que no pueda hacerse, pero es muy importante. En nuestro caso, además, lo bueno es que nos llamaron ellos porque nos habían estado siguiendo. Si El Corte Inglés tiene algo bueno es su localización, siempre en los mejores sitios y funciona, es un punto muy importante para cualquier gran marca. ¿Cómo planteáis el diseño de las colecciones? Tenemos dos diseñadores internos, pero todo diseño pasa siempre por los socios. Creemos que gran parte del éxito y de la base de la empresa es ese ADN. Nuestra ropa es muy sincera porque hacemos algo en lo que nosotros creemos. Nos diseñan y hacen propuestas actuales, pero si no nos gusta no lo sacamos por mucho que esté de moda y al revés. En lugar de hacer una marca para lo que pide el publico, hacemos algo en lo que creemos y esperamos que ese publico de gusto similar venga a comprarnos. Por eso tenemos colecciones muy lineales en el sentido de que el cliente sabe qué va a encontrarse. Otras marcas que hacen moda tienen años con colecciones más acertadas que otras y no te puedes fiar de que siempre te vaya a gustar... ¿Cómo definirías vuestro estilo? Tenemos un estilo sport casual. Yo no visto a un tipo de gente, visto más bien una franja horaria de cada día. Puede ir a trabajar de traje, salir de trabajar y ponerse otra ropa y salir de fiesta y llevar otra. También tenéis prendas para niños Fue curioso, lo hacemos casi desde el principio porque una de nuestras tiendas multimarca de Sevilla nos pidió esos mismos polos y camisas para niños. Lo hicimos para ella y muchas otras también los querían. En estos dos últimos años hemos metido mucho esfuerzo en esta línea, esta misma mañana hemos sabido que las ventas se han multiplicado por tres para la colección del año que viene. Otra vez está resurgiendo porque los padres se han cansado de vestir a los hijos de marcas low cost y quieren calidad y estilo como el que llevan ellos. ¿Dónde fabricáis? Fabricamos casi todo el algodón en Portugal y las lanas en España, los complementos de piel en Ubrique y calzado en el Levante… Lo que sí cuidamos por encima de todo son las calidades, hoy por hoy, las mejores calidades para nuestros productos son esas. Una de nuestras prioridades fue siempre trabajar siempre con calidad top y por eso nuestros clientes repiten. Un gran porcentaje llega por el logo que es divertido, el colorido... pero tenemos un altísimo porcentaje de cliente recurrente. ¿Cómo valoras el momento actual del sector de la moda masculina y la competencia? Está fuerte, cada uno tiene debilidades y fortalezas. Cada día descubrimos cuatro marcas intentando hacerse hueco en el mercado… Uno de los secretos por los que seguimos ahí es porque creamos una base solida y pensando las colecciones. Las marcas que crecen rápido se dedican sobre todo a la moda pura y dura, apostando por tendencias y como se descuiden desaparecen en cuatro días. Hay marcas que salen y son competencia dura y lo hacen bien, pero hoy por hoy no tenemos miedo a ninguna. De hecho, es bueno que haya marcas para que el hombre busque mas y se fije más en como vestirse porque antiguamente todo era 'sota caballo y rey'. ¿Por qué conecta Scotta con el hombre sevillano? Creemos que porque está hecha por sevillanos, entendemos al cliente. El pasado vendiendo en multimarca nos lo confirma y Sevilla era uno de nuestros puntos mas fuertes. Con Sevilla tenemos una relación especial y teníamos que abrir tienda sí o sí y romper el mito de que nadie es profeta en su tierra. Es un punto importante a nivel emocional y estratégico. Creemos que funcionarán muy bien las americanas en Sevilla, es uno de nuestros productos más nuevos. Es complicado decidirse por una prenda porque todas las hacemos porque creemos en ellas. Dentro de la colección tenemos minicolecciones con productos enfocados a cada cliente. En Sevilla es cierto que hay un público clásico y para ellos tenemos mucha variedad en ese estilo y en fondo de armario, pero también tenemos prendas más actuales y de moda porque se demanda y se viste así…