Viejo Tito, enclavado en la calle Virgen de la Victoria, mantiene el mismo ambiente familiar, aspecto y atención casi medio siglo después de su apertura.
La carta también mantiene esa línea clásica, con especialidades como el paté de hígado de ave, el camembert frito con frambuesa o los revueltos. No hay que perderse tampoco las pechuguitas villaroy, elrollito de pechuguita con salsa de almendras, los raviolis de ternera en salsa de foie ni el solomillo de ternera a la parrilla.