Flores de otro mundoFlores de otro mundo

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Pues qué quieren que les diga, a mí el camarero del anuncio de la lotería me parece uno de esos simpatías que -como relata el maestro Burgos- te reciben con un, “¿Qué hay familia?”. Vamos que a servidor recién levantado, le llega el gordito simpático del anuncio con esa sudorosa camisa de franela a cuadros, dándome una cachetada en la cara y un abrazo y me voy sin coger el décimo y echándole la cruz al bar para los restos. Y es que me duele la boca de escribirlo: el camarero siempre malaje, seco y distante. Por favor…

O por lo menos con la dulce y discreta elegancia del equipo de sala de Nazca. Este bar peruano lleva meses triunfando con su cocina Nikkei, que no es el índice de jurdores de la bolsa nipona, sino la fisión en frío de la gastronomía japonesa y peruana.

Porque, como pasó en Coria del Rio, en el Perú se estableció en su día una colonia japonesa que terminó mezclando lo uno con lo otro a mayor gloria del buen yantar.

Danny Cárdenas se llama el chef andino que anima la carta de tapas hispalense con pequeñas joyas ultramarinas como los Nigiris, (de salmón curado, de boletus confitado con rocoto andino, de pulpito baby con rocoto glaseado, huacatay, confitura de chile y pimentón o el de lomo “saltado”; loncha de lomo bajo con tomate, lima, soja y gengibre), y los sushis Maki tal que el de Causa limeño (pollo rebozado de panco, aguacate y mayonesa nikkei).

Las presentaciones también son osadas como es el caso del ceviche onthebeach, una ensalada de corvina o lubina cruda con base de cebolla morada, maíz seco y leche de tigre formando el ceviche de lima y vinagre de arroz sobre una concha de molusco, acompañada dehuevas de tobico y tiras de calamar frito rebozado en crujiente panco limeño.

No se pierdan el Bacalao en tempura con aceitunas botija y crema de ocopa a base de huacatay y ají mirasolparecida a la salsa huancaína; o el soberbio tartar de atún, lucido en medio de una ronda de 5 sabores para aderezarlo: polvo de ají, jengibre, mayonesa nikkei (hecha con lima, vinagre de arroz y azúcar), helado de wasabi y polvo de aceitunas negras. Comidas raras y de un mundo lejano, para acompañar de un blanco joven de Rueda como El Perro Verde o con larubia importada Cristal o la negra Cuzqueña, que son un abanico perico de matices.

Y todo lo anterior servido en un amable local donde predominan las maderas y la dulce y cadenciosa melodía en la dicción criolla y culta de las lindas camareritas de sala.

Qué quiere que le cuente, limeña. Pasee despacio por esta alameda de sabores del nuevo mundo, que no solo de adobo vive el hombre y el Perú no está perdido del todo.

Ver los comentarios