Croquetas de gambas y espinacas

Las croquetas que hoy os presentamos las hemos elaborado con gambas y espinacas, dos ingredientes que combinan a la perfección. Además, estas croquetas suponen una estupenda manera de hacer que los más pequeños de la casa consuman verduras y pescado.

Así lo cocinamos

Pica la cebolla y sofríela en una cazuela con la mantequilla fundida. Cunado se encuentre bien pochada, agrega la harina y rehoga el conjunto. Una vez la harina quede bien disuelta en la mantequilla, incorpora la leche caliente y remueve sin cesar con el fuego a temperatura suave.Pon la bechamel a punto de sal y, cuando la tengamos con el espesor deseado, le añadiremos las gambas peladas y troceadas junto con los brotes de espinacas.Cocina durante un par de minutos y vierte el resultado en una bandeja previamente engrasada.

Deja reposar en frío.Cuando la masa se haya enfriado, forma las croquetas con las manos, pásalas por harina, huevo batido y pan rallado (en ese mismo orden).Ya sólo nos queda freír las croquetas en abundante aceite caliente. Una vez doradas, escúrrelas y deposítalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

Trucos y Consejos

Puedes emplear las cabezas de las gambas para elaborar un caldo que podrás mezclarlo con la leche para así obtener unas croquetas aún más sabrosas.

Información Nutricional

La mantequilla y la leche de la bechamel aportan calcio y grasas saturadas, que van a elevar el contenido calórico de la receta. Por ello, conviene acompañar estas croquetas con verduras o ensalada.En esta ocasión hemos preparado unas croquetas de gambas y espinacas. Las primeras son ricas en proteínas de alto valor biológico, pero también en purinas, por lo que aquellas personas que padezcan de gota no deberán abusar de su consumo. En cuanto a las espinacas, enriquecen el plato con multitud de vitaminas, minerales y sustancias de acción antioxidante.