Apertura: Pisco Tapas, la cocina nikkei a la conquista de Sevilla

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¿Qué sitio es?

Fotos: J.M.Serrano

Se trata de un nuevo establecimiento cercano a la Alameda de Hércules que busca acercar al público sevillano la cocina nikkei, que fusiona las recetas japonesas con las peruanas, pero dándole, además, una vuelta de tuerca con la utilización de productos andaluces y potenciando los sabores para conseguir ir a la verdadera esencia de los platos.

¿Quién está detrás?

El chef de Pisco Tapas, John Ríos

Gustavo y Daniel González junto con el chef John Ríos. Los tres hosteleros de largo bagaje profesional han estado en varios de los restaurantes sevillanos que pusieron en la palestra este tipo de sabores.

Gustavo se encarga de la sala cuidando los tiempos entre platos y haciendo que los comensales tengan una velada apacible.

Daniel es el «barman», se encarga de que la barra funcione correctamente y de realizar todo tipo de cócteles. Por último, John Ríos es el creador de la carta y la persona que elabora los platos, porque según el propio chef en este establecimiento «no se compra nada que venga previamente realizado o tratado».

¿Qué tienen para comer?

La lista de platos para escoger es bastante amplia. Las recetas que aparecen en la carta son originarias de cocinas internacionales como las gyosas, el sushi o los woks, aunque se intercalan con otras procedentes de la tierra como la carrillada, la lubina a la plancha o las costillas de cerdo. Apuestan por productores locales y de mercado lo que le confiere un plus de autenticidad en las elaboraciones. Así mismo, apuestan por platos veganos, vegetarianos y sin gluten.

Entre sus elaboraciones destacan el ceviche amazónico andino con pulpo y leche de tigre de mango y maracuyá, el wok de pato y tirabeques y arroz en mixtura de hortalizas de temporada o el niguiri de setas mixtas a la crema de rocoto andino.

¿Y para beber?

En la barra de Pisco Tapas confluyen desde cervezas internacionales hasta vinos de la tierra y diferentes cócteles realizados al momento de pedirlos, como el Chilcanito, el Machupichu o la estrella de la casa el combinado Pisco Sour, que además le da nombre al establecimiento. En un futuro esperan tener vinos latinoamericanos.

¿Utilizan el fuera de carta?

Sí, es una de las premisas del chef John Ríos, aunque admite que en estos momentos no está sacando demasiadas sugerencias para que los clientes puedan familiarizarse con la carta y sus sabores. En este sentido explica que los platos que no están incluidos en carta son una manera de escuchar a los clientes y ver qué les gusta, por lo que hay algunas elaboraciones que acaban incluyéndose en carta.

¿Cómo es su espacio?

Se trata de un edificio antiguo propio de la zona y al que le han mantenido muchos de los detalles que encontraron al instalarse allí, como el suelo. Es bastante amplio y cuenta con mesas bajas separadas una de otras para dar intimidad a los comensales. Además tiene una barra de buen tamaño donde se puede picar de manera informal y mientras ver cómo se elaboran los platos, ya que la cocina está totalmente abierta.

¿Y la decoración?

Manteniendo la idea de dar al cliente un espacio tranquilo, han utilizado tonos cálidos mezclados con los rojos para favorecer este ambiente. Han apostado por la decoración vintage y por mantener la propia estética del local.

¿Dónde encontrarles? En la calle Correduría, 1

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