Más de treinta años lleva con sus puertas abiertas en Triana Casa Ruperto. Un bar que derrocha sevillanía por los cuatro costados: desde su ambiente hasta sus tapas, pasando por su personal, atento y de trato agradable.
El plato estrella de Casa Ruperto son las codornices, de las que se dice, «sirven doscientas cada día». No se queda atrás en fama la otra especialidad de la casa, la «pringá».
Asimismo, en los fogones de este negocio se domina la receta clásica de las cabrillas. Tanto es así que han ascendido hasta el segundo puesto de la edición de 2015 del Concurso de Cabrillas de DeTapas.