La Flor de la SierraLa Flor de la Sierra, porcino de barrio

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Una vez presencié una tertulia guasona de bar donde unos parroquianosle preguntaban a un tipo, que daba cuenta de unos taquitos de jamón con una copa de oloroso, sobre el desgraciado accidente del Prestige. Aquellos liantes sonsacaban al del jamón sobre las brigadas de voluntarios que acudían a las tareas de limpieza de las costas gallegas. La sentencia del otro fue antológica: «Cuando el chapapote esté llegando a la Sierra de Huelva y amenace Cumbres, Galaroza, El Repilado, Aracena o Jabugo, entonces allí me presentaré con mi cubo y mi pala. No me gustan los mejillones».

Toda una declaración de cuatro señores para quitarles la calle, Sra. Medrano) tienen Juan y Antoñita una tienda bar donde despachan, literalmente, Gloria Bendita: chacina serrana, queso, y tapas de cocina tradicional.

Nada más entrar, a modo de cortina, cientos de jamones y paletillas ofrecen el mejor adorno posible a esta santa casa. Llama la atención el caos organizado de cajas de vinos y jamones que sirven de improvisadas mesas y sillas y el embriagador olor a grasa curada, a pringue. El bar es estrecho y profundo y, de frente, tiene una gran alacena de madera con miles de latas de conserva, chacinas envasadas y hasta mantecados a granel.

Juan, al que algún arrechucho le hace tomarse la vida con calma, atiende a su parroquia con parsimonia, andando sobre los pies desde una punta de la barra donde tiene el corte hasta la otra, al fondo, donde Antoñita tiene los fogones.

Así llegue la cola a la calle, prepara Juan unos primorosos y bien despachados surtidos serranos o algún papelón, para llevar, de pernil bellotero.

De sus tapas qué decir, ideales para el que tenga bajo el colesterol: Chicharrones, morcillas en todas sus versiones, cabeza de jabalí, panceta, queso de cerdo, chistorra al RioViejo, chorizo serrano, butifarra de Ronda… También guisos, como el bacalao con tomate, manitas de cerdo,menudo, carrillada, pollo de campo en salsa, arroz con conejo o el potente revuelto de escombros: restos chacineros debidamente embrollados con huevo.

Buena Cruzcampo y buena carta de vinos, tanto por la Rioja como por la Ribera, así como Manzanilla fría. Más ligero se puede uno tomar un tomate fresco con melva, o unas papas aliñadas que quitan las «tapaeras del sentío».

Una generosa tapa de queso viejo o los riñones al jerez serían la perdición de más de un enanito de esos que tienen formado el taco en abcdesevilla.es…

Ármense de paciencia y sobre todo sigan estos consejos: mejor ir en laborables que en fin de semana, ¡y no olviden hacerse un análisis de sangre de vez en cuando!

Ver los comentarios