Alimentos Ecológicos
Actualizado: GuardarHace unos 70 años, los productos químicos comenzaron a introducirse en la industria alimentaria. Rentabilizar los cultivos, además de abaratar su coste, eran algunos de los objetivos que se perseguían con ello. Tanto se abusó de esos químicos que hoy día casi la totalidad de los alimentos que consumimos son artificiales. Poco queda de su esencia natural.
El uso de abonos, herbicidas y pesticidas ha provocado la pérdida de una gran cantidad de sustancias que aportan a los seres humanos importantes defensas frente al medio o adquiriendo otras que nos vuelve vulnerables a las agresiones del medio. De ahí que, en los últimos años, distintos organismos hayan apostado por la recuperación de la producción ecológica que es más saludable, más sostenible y más respetuosa con el medioambiente y que, cada vez, gana más adeptos entre los consumidores.
Pero, ¿qué son los alimentos ecológicos?
La certificación ecológica
Las prácticas que se pueden usar para elaborar productos ecológicos certificados están reguladas por la Unión Europea y en las diversas comunidades los Consejos Reguladores son los encargados de velar para que los productos naturales que se venden bajo la etiqueta ecológica de Producto Ecológico las cumplan. En España, el control y la certificación de la producción agraria ecológica se lleva a cabo a través de Consejos o Comités de Agricultura Ecológica territoriales dependientes de las Comunidades Autónomas. No obstante, Andalucía, Castilla La Mancha y Aragón han autorizado a su vez organismos privados para la realización de estas funciones.
“Los Consejos Reguladores de las Comunidades Autónomas son los que velan por estos productos
Como distintivo de la agricultura ecológica, todas las unidades envasadas, además de su propia marca, llevan una etiqueta numerada y un logotipo o anagrama específico, con el nombre o el código de la autoridad u organismo de control y la leyenda Agricultura Ecológica. Constituye la única garantía oficial de que el producto responde a la calidad supuesta por el consumidor y cumple las normas establecidas en el Reglamento (CEE) 2092/91.
Los alimentos ecológicos, orgánicos o biológicos, son aquellos alimentos y bebidas producidos sin la utilización de productos químicos en todas las fases de su elaboración.
Por su calidad y esmerada producción, los productos ecológicos se podrían catalogar como productos gourmet o delicatessen. La parte negativa: que siguen siendo más caros que los productos convencionales.
Aunque eso sí, cada año, se reduce el precio por el aumento de la demanda. Los consumidores que apuestan por este tipo de alimentación aceptan este mayor precio de venta ya que realmente obtienen productos saludables de mejor calidad.
En los últimos años han proliferado las tiendas especializadas en estos productos tanto físicamente como virtualmente, en Internet. En Sevilla, la Asociación de consumidores de productos ecológicos La Ortiga en la calle Cristo del Buen Fin, o La Alacena, en Ciudad Jardín, ofrecen una gran variedad de alimentos y otros productos ecológicos. En Ecototal podrá encontrar un completo directorio de tiendas ecológicas.
Los productos ecológicos cubren una gama amplísima, desde las tradicionales frutas y hortalizas frescas, hasta la miel, las carnes, las conservas, los quesos y embutidos, el vino, el aceite de oliva. La variedad está asegurada.
La producción de vinos ecológicos, así como de otras bebidas es uno de los sectores que más empuje tiene dentro del sector de los productos orgánicos. Un reflejo de esto se puede apreciar en la multitud de ferias de productos orgánicos que se celebran por todo el mundo, siendo tal vez la más importante la feria Biofach.
Beneficios
-Los productos ecológicos no contienen conservantes o aditivos de origen químico, con ellos no introducimos en nuestro organismo determinados productos que pueden resultar peligrosos para nuestra salud. Al no presentar estos componentes, nuestro organismo asimila de forma óptima los nutrientes de estos alimentos. -Los alimentos ecológicos contienen entre un 40% y un 60% más de vitaminas y minerales que los productos convencionales y menos porcentaje de agua, por lo que aportan más resistencia ante las enfermedades. -No haber sido tratados con pesticidas evita, además de que nuestro organismo se convierta en un almacén de residuos tóxicos y podamos desarrollar alguna enfermedad, la incidencia de alergias relacionadas con ciertos productos químicos. Algunos pesticidas se llegan a incorporar en el alimento y no se eliminan. -A pesar de tener peor aspecto que los convencionales, los alimentos ecológicos tienen más sabor.
Medio Ambiente y desarrollo rural
Además de presentar grandes beneficios para la salud, la producción de alimentos ecológicos es más respetuosa con el medio ambiente ya que éste no se contamina, no se vierten a la tierra determinados residuos y el ahorro energético es superior al del cultivo de producción.
Indirectamente, la práctica de la agricultura ecológica permite una diversificación de las producciones y el aumento del valor añadido del producto final. Además, los análisis ponen de manifiesto que la agricultura ecológica requiere un mayor volumen de trabajo, por lo que genera empleo en las zonas rurales. Los alimentos ecológicos fomentan la sostenibilidad medioambiental y social.
La producción ecológica en España
Según las cifras de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente:
Los cultivos, prados y pastizales ecológicos ocupan un 2,48% de la Superficie Agraria Útil española, alrededor de 800.000 hectáreas.
La producción cuenta con un valor estimado de 250 millones de euros y algo más de 1.700 industrias de transformación.
Este sector emplea aproximadamente a 17.500 personas físicas y jurídicas.
Aproximadamente el 80% de la producción española de productos ecológicos se exporta. Sobre todo a Europa, y en especial a Alemania, Holanda, Francia y Reino Unido, a donde llegan, sobre todo, productos frescos.
Las comunidades autónomas más relevantes en materia de agricultura ecológica son Andalucía y Extremadura (ambas por su elevada superficie y número de operadores) y Cataluña (por la concentración relativa de industrias de elaboración de producto ecológico procesado y por el dinamismo de su mercado)
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