Los bizcochos que tan de moda se pusieron en el confinamiento vuelven de nuevo por las nuevas restricciones. Se nota porque cuando pasas por el pasillo del supermercado de las harinas, hay poca mercancía. Así que ya sabes: coge bien de harina, levadura, azúcar glass y huevos, antes de que se agote.
Como el de limón es ya un clásico, ahora te animamos a que prepares este bizcocho de mandarina. Los cítricos le dan un toque perfecto a los bizcochos. Ese olor que desprende este dulce tan tradicional te hará sentir nostalgia. ¡A mi me devuelve a la cocina de mi abuela!
Además, un bizcocho casero, con esa miga tierna y jugosa es un lujo fácil de conseguir. Y el mejor plan para tus desayunos y meriendas en familia.
Si quieres hacerlo de manera diferente, te animamos a que hagas un glaseado de cítricos para ponerlo como cobertura. Es muy sencillo y rápido de preparar.
Para el glaseado necesitarás:
200 g de azúcar glas
4 o 5 cucharada de zumo de mandarina
La ralladura de una mandarina
Coloca el azúcar glas en un cuenco, y añade hasta cuatro cucharadas grandes de zumo de mandarina. Mezcla bien. Si te gusta más fluído añádele una cucharada de zumo más.
Sirve por encima de tu bizcocho cuando aún esté caliente.
Para darle el toque de gracia, ralla la corteza de una mandarina por encima.
Deja que se enfríe y ya estaría listo para tomar.
La mandarina
Es un cítrico delicioso de la familia de las naranjas. Su consumo esta muy extendido y es una las frutas más consumidas en nuestro país. Es ideal para tomarla en otoño e invierno. Sus propiedades y beneficios son ideales para esta época del año. Tiene un gran aporte en vitamina C, que nos ayuda a prevenir gripes y resfriados.

Cómo cocinar un bizcocho de mandarina
En primer lugar dispón un bol con el azúcar y dos huevos. Bate hasta que blanquee. Añade luego el aceite de girasol.
Por otro lado, toma un rallador y obtén un poco de la piel de las mandarinas. Resérvalo para usarlo posteriormente.
Ahora quítales la piel a las mandarina y separa los gajos. Intenta quitarle el velo para conseguir solo la pulpa de la fruta. Si ves que la piel es fina puedes obviar este paso. pélalos. Pasa la fruta por la batidora. Incluye las mandarinas y la ralladura a la mezcla que has hecho anteriormente.
Tamiza la harina e Incorporala junto con la levadura. Trata de mezclarlo de forma suave.
Unta con aceite el molde, antes de rellenar con nuestra masa.
Precalienta el horno a 200 grados. El bizcocho debe cocinarse alrededor de 30 minutos. Para saber si está listo, solo tienes que pincharlo con un cuchillo. Si sale limpio, estaría perfecto.
Trucos y Consejos
Ten en cuenta que cada horno es diferente y los tiempos son orientativos. Si no tienes controlado como funciona el tuyo ve haciendo pruebas. hornea a menor temperatura pero a más tiempo.
Cuando termine la cocción, apaga el horno y deja la puerta entreabierta para que repose el bizcocho en el interior y evitar el cambio brusco de temperatura, que puede provocar que baje.