Sopa de gambas y alcachofas

La alcachofa, además de poseer fuertes propiedades diuréticas, reduce el nivel de azúcar en sangre

Guardar Imprimir
Enviar noticia por correo electrónico

Limpiamos las alcachofas. Para ello, debemos quitar las hojas externas, cortar la parte superior y lavarlas bien bajo el grifo. Pelamos, picamos y rehogamos la cebolla en una cazuela con aceite de oliva. Una vez éstas adquieran una apariencia transparente, incorporaremos a la cazuela las alcachofas previamente secadas con un trapo. Rehogar durante 2 minutos.

Así lo cocinamos

Agregamos ahora el caldo de pescado. Salpimentamos. Dejamos hervir, a fuego suave, durante 20 minutos. Incorporamos las gambas y dejamos cocer durante 5 minutos más. Servir muy caliente.

Trucos y Consejos

Para evitar que las alcachofas ennegrezcan por la oxidación, podemos sustituir el zumo de limón por una rama de perejil. Este es un truco más efectivo y, además, el sabor de las alcachofas no se verá afectado por la acidez del limón.A la hora de la compra, hay que tener en cuenta que las alcachofas de mayor calidad y frescura son las más pesadas con relación a su tamaño y con las hojas bien apretadas.

Una alcachofa fresca presenta un tacto firme y un color verde claro brillante, sin manchas negras. Es preferible consumirlas cuanto antes, pero pueden guardarse hasta tres días en el frigorífico, siempre que se conserven los tallos.

Información Nutricional

La alcachofa es una verdura de gran poder diurético y que rebaja el nivel de azúcar en sangre, por lo que están indicadas para aquellas personas que tengan diabetes o una tensión arterial elevada. Además aportan muy pocas calorías pero gran cantidad de vitaminas y minerales, lo que, unido a las proteínas de la gamba, hacen de este plato un alimento completo ideal para toda la familia. Aunque el ácido úrico y el colesterol están presentes en este marisco, la cantidad usada en esta receta no es muy elevada.

Ver los comentarios

Recetas de sopas y cremas

Sopas

Cremas

Gazpachos