Los 10 mejores restaurantes «Gurmé Córdoba»

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Nuestros críticos gastronómicos han hablado. Hemos seleccionado para vosotros los diez mejores restaurantes de Córdoba según nuestros expertos. Se puede cruzar la ciudad saltando de  homenaje en homenaje para nuestros paladares. Pero ¿qué nos vamos a encontrar en cada uno de ellos y qué platos no debemos perdernos? Ellos nos lo cuentan ¡Aviso: spoiler!

Noor

Desde el punto de vista gastronómico, Noor, reconstruye, con técnicas y elementos culturales actuales, la comida palaciega andalusí

No se trata de una recuperación de recetas sino la creación de un concepto, un mundo propio donde interactúa la comida, la decoración del espacio y la puesta en escena. Su carta cambia un par de veces al año. El cordobés Paco Morales, su creador, con un bagaje de reconocimiento profesional importante, nos ha traído a Córdoba una cocina de alta factura técnica y, sobre todo, deliciosa. Bocados exquisitos que hacen vibrar los centros cerebrales del gusto y las emociones. Opera con los productos existentes en la época histórica de referencia y desdeña, por lo tanto, los que vinieron del nuevo mundo, a partir del siglo XV.

El comino, el orégano fresco, la naranja amarga, el agua de rosas, el cilantro, el azafrán, la nuez moscada bailan sutilmente en los diferentes platos.

Choco

Kisko varía la carta con frecuencia, por lo que nunca se llega al fondo de su cocina, que se va expandiendo en el tiempo, y nos cuenta que le gusta traer platos de sus viajes, platos como un delicado taco mexicano interpretado a la andaluza. Uno de los mejores platos, tras ella una sorprendente y cremosa mantequilla de cabra, ligeramente fermentada en bodega. No crean que se van a encontrar una aburrida descripción de los platos en el menú, más bien son títulos que sugieren sin ser exhaustivos, y que por supuesto, uno jamás imagina. Y no dejen de tomar el pastel califal, es una obra de arte..

Celia Jiménez

Su restaurante gastronómico y exigente convive en una misma cocina con el bar diario de oferta más que digna, con una carta moderna e innovadora, donde trabaja con producto de primer nivel.

Algunos de sus imprescindibles son el excelente bacalao que presenta sobre un delicioso licuado de hierbas y unos ñoquis de patata y naranja, que versionan la clásica ensalada de bacalao de nuestro recetario tradicional;  los calamaritos con arroz cremoso y ortigas de mar y la merluza de pincho, huevas en ensalada con mahonesa de aceituna manzanilla.

El Envero

Magnífica la materia prima que se trabaja en este restaurante que tiene como chef a la brillante Zahira Ortega. De la carta -que tiene siempre un eficaz complemento en la pizarra con la que nos presentan platos de temporada- hay que destacar en los entrantes clásicos muy conocidos como las croquetas fluida o la mazamorra y novedades como el redondo tartar de gambas con gazpacho de cereza y helado de jengibre, auténticamente delicioso, la sorprendente ventresca de atún rojo a modo de jamón con tomate o el tiradito de presa ibérica: cualquiera de estos tres tienen un nivel de primera división. Entre los platos principales, son una apuesta segura el atún, especialmente el lomo a la plancha y la ternera gallega.

Regadera

Adrián Caballero tiene una carta no muy amplia, pero que cubre sobradamente las exigencias del comensal más estricto. Sobresaliente el picante tartar de atún y más que notable el tataki de presa ibérica, que puede competir con el mejor de los tatakis de presa de la ciudad.

Muy aconsejable también la ensalada Zaalouk, con boquerones y aceitunas negras,  Los entrantes merecen sin duda una nota muy alta. Nota no superior a la de los platos principales, entre los que son indiscutibles el fabuloso bacalao sobre crema de espárragos, absolutamente magnífico, el puntalette con risotto de boletus, champiñones y confit de patoy el fabuloso magret de pato: aquí hay estudio, técnica y el mejor producto.

Tellus

Es muy acertado el recibimiento, en forma de aperitivo, con diversas hogazas de pan (trigo duro, con pasas, etc.) que acompañan a un magnífico aceite cordobés de la almazara Hacienda Fuencubierta. Es muy sabrosa y agradable su ensaladilla de gambas, de las mejores de esta ciudad. No se pueden dejar de probar sus croquetas semilíquidas, suaves y cremosas por dentro pero crujientes por fuera. Otros platos estrella son el rosbif de presa con foie y toque de trufa, y el pincho de pan de cristal con compota de zarzamora, foie y virutas de jamón. Desde sus comienzos culinarios el chef, Antonio López, mantiene entre sus propuestas los raviolis de rabo de toro sobre cremoso de puré de patatas, que sus clientes asiduos no dejan de reclamar.

ReComiendo

Andalucía en toda su madurez, en su conjunto, no solo limitada a Córdoba y eso sí, con lo mejor de cada casa: una impresionante selección de AOVES, platos clásicos como las costillas Clint Eastwood o el cochinillo crujiente al lado de pequeñas travesuras que siempre han divertido a Periko Ortega como el Jarabe para la tos (Fino Mary) o el chupón Kojak.

El aroma de muchos de sus platos siguen esa huella de la memoria y el recuerdo. Lo bueno de Perico es que conoce muy bien el trabajo de la cocina de fondo, y eso siempre se nota.

Los Berengueles

Se trata de una cocina familiar, fresca, sin tapujos. La base está compuesta por platos tradicionales cordobeses a la que se incorporan guiños a otros países del entorno. No se puede dejar de probar la lasaña donde la delicadeza de la pasta se funde con un jugoso relleno. Es muy buena la ensaladilla de gambas. Siempre hay que preguntar por los pescados que han entrado ese día del mercado, que se ponen a la plancha en su justo punto de cocción. Los boquerones al limón cuando llegan crujientes a la mesa son una delicia. El paté de la casa, por su parte, está bien estructurado y con personalidad propia.

Arbequina

Es un restaurante a la altura del Hotel Hospes Palacio del Bailío, un cinco estrella. Su chef, Javier Moreno, tiene tres propuestas diferenciadas: la carta del Bar, la carta más tradicional y la carta gastronómica. La propuesta más personal de Moreno es la que se ofrece en el servicio de noche. Una cocina fresca, de mercado, donde se entrelazan  los sabores técnicas y productos locales y nacionales con diferentes tipos de elaboraciones de Perú, México, Vietnam, Japón y Tailandia. Un crisol de culturas y paladares que se materializa en creaciones como carabinero, nuoc cham, col guisada, kimchee y crutons; esturión en kamado, tamarillo y ajo negro y chantilly de wasabi; xantarellas y cochayuyos estofados, doncella de ternera y torreznos picantes. Y de postre, queso cremoso, vainilla, huitlacoche y maíz con helado de algarrobas.

Fusión By Sojo

El cocinero Daniel Plá capitanea una variada carta, que incluye un apartado para los pequeños de la casa, con un amplio abanico de entrantes para picoteo y ensaladas, una selección de platos merecidamente llamados estrella y diversas opciones de pescado y carne. Lo más aconsejable es pedir para compartir el plato al centro. Magníficos huevos camperos con trufa y caviar. Muy bien conseguidos la caballa a la llama con wok de verduras y el secreto ibérico con risotto de trigo y setas y salsa PX. Tiene una satisfactoria carta de vinos a precios razonables y una extensa oferta de postres, entre los que incluir la tabla de quesos enumerada entre los platos tradicionales.

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