Dónde tapear cerca de los templos más populares de Sevilla

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

En esta Cuaresma atípica nada es como nos gustaría, pero siempre nos quedará ese peregrinaje por los templos de Sevilla para contemplar las imágenes que este año no podrán procesionar. Algunas abren durante las mañanas y otros durante las tardes, pero cada día es posible acercarse a muchas iglesias y parroquias para impregnarse de ese ambiente que tanto gusta en esta ciudad. Incienso, silencio y recogimiento para postrarse unos minutos ante las tallas más insignes de la Semana Santa hispalense.

Y si después de este peregrinar apetece una parada para calmar la sed con una cerveza bien fría y algo de picoteo, GURMÉ propone dónde hacerlo cerca de los templos más populares.

El Salvador

Es este uno de los templos con mayor reclamo durante la Cuaresma, puesto que alberga tanto al Cristo del Amor como a Jesús de la Pasión, dos de las tallas más populares de Sevilla.

Encontrar un buen sitio para picar algo sin alejarse de la Basílica no es complicado, puesto que en la misma plaza se encuentra  La Alicantina -que mantiene su ensaladilla de siempre-, así como las gambas al ajillo o los champiñones a la plancha y marisco.

La Antigua Bodeguita es otra opción indispensable si se quiere tomar algo informal después de visitar este templo sevillano y  Entrecárceles espera a tan solo unos pasos con sus fríos jarrillos de cerveza y sus recetas de siempre, como su carne mechá casera, además de Rocala, la propuesta más desenfadada del Grupo La Raza.

Terraza de Tradevo en la Cuesta del Rosario

En la Cuesta del Rosario Tradevo ofrece un tapeo de altura con propuestas como su sardina marinada o su roast beef de presa de angus, mientras que su vecino Casa Juan Palomo tiene una increíble ensaladilla escabechá o unas anchoas del Cantábrico dignas de probar.

A pocos pasos de allí, Bodeguita Maridaje es un interesante espacio donde pararse un momento tras visitar El Salvador. Buenas chacinas y quesos sin descartar el cuchareo esperan al que se acerque a este joven establecimiento.

En la Plaza del Pan se enclava otra parada recomendada: Bar Europa, un clásico que siempre busca innovar, y en el 17 de la calle Herbolarios, un negocio que encanta a los enamorados de los sabores de toda la vida:  Bar Kiko y su pisto casero, sangre con tomate, pinchito, lomo a la plancha… Nada que ver con la carta de  Sal Gorda, en la Alfalfa, un restaurante de tapas modernas y cervezas artesanas.

Basílica de El Gran Poder

El Sardinero

El barrio de San Lorenzo está cuajado de bares y restaurantes donde tomar una cerveza después de ver al Señor de Sevilla. Pared con pared a la propia basílica encontramos El Sardinero, un espacio de toda la vida que ahora está en manos del grupo La Vida en tapas. Croquetas cremosas de jamón, el carbón de buñuelo de bacalao o la lubina a la plancha son algunas de sus especialidades. Imprescindible Eslava y su ampliada terraza, donde se puede tomar unas excelentes navajas a la plancha o unos boquerones bien fritos, entre otras muchas propuestas.

Nuevos veladores de Eslava junto a San Lorenzo / Foto: Tomás Muruaga

Imprescindible Casa Ricardo y sus croquetas de bacalao para adentrarse de lleno en la Cuaresma sevillana, o la Antigua Abacería de San Lorenzo, donde además de sus recetas de siempre miman la Cuaresma con los platos más típicos de estas fechas: papas aliñás” con bacalao, ensaladilla de bacalao y langostinos, “remojón” granadino o soldaítos de pavía son solo algunas de ellas.

La Tienda de la Azotea es otra opción, un punto donde disfrutar en un entorno distendido de la cocina de altura que practican en esta casa: desde un apetecible brunch a un picoteo más serio con una buena carne como principal.

Basílica de La Macarena

La oferta gastronómica entorno a la Basílica de la Macarena es amplia y variada. Justo al lado, en el número 138 de la calle San Luis, encontramos a Bar Arco, con cerveza helada y tapas de corte sevillano como huevos rellenos, boquerones o tortilla de patatas. Vidaloca con su amplia oferta de chacinas, quesos y pescaíto frito es otra opción cercana, al igual que Contenedor, que a su concepto de cocina de cercanía ha sumado una nueva línea de abacería con protagonismo de encurtidos.

Interior de Salvaje

Salvaje es una apuesta para los que quieran sentarse a disfrutar de una buena carne o tomar una cerveza con un par de platos en un ambiente amplio y relajado.

Si estamos dispuestos a andar un poco más y adentrarnos en el corazón de este barrio, el entorno de la calle Previsión nunca defrauda al paladar. Allí aguardan Casa Pepito y su marisco de las costas gallegas; además de El Tremendo y su excepcional tapeo: albóndigas de choco, parrillada al Jerez, patatas cordobesas con salmorejo y bonito, bacalao estilo El Tremendo son algunos de sus clásicos. Blanco Cerrillo de Pío XII aguarda con su clásico adobo y su pescaíto frito.

Capilla de los Marineros

El trasiego de la calle Pureza lleva semanas in crescendo y después de una visita a la Esperanza de Triana nada mejor que apagar la sed en alguno de los muchos bares que salpican esta orilla del Guadalquivir. Entre los más cercanos encontramos Casa Remesal, donde además de los caracoles en temporada son fundamentales su menudo, ensaladilla, croquetas de puchero, solomillo al whisky o el pollo frito.

Bar Santa Ana

Cerca de allí Bar Santa Ana tiene especialidades como delicia de solomillo o de pollo, según el gusto de cada uno y sus pamplinas de gambas. El Sella pone un punto asturiano a esta visita marinera, con recetas típicas de la tierra de Don Pelayo como la fabada.

Nuevos veladores de Victoria 8

Victoria 8 y su nueva terraza en plena calle son otra opción a tener en cuenta, con un recetario clásico por delante para elegir sabiendo que es difícil equivocarse. En la sevillana plazuela de Santa Ana espera Bar Bistec con una carta tradicional donde destacan sus bocaditos de mejillón, las palomas o las perdices.

Iglesia de la Anunciación

La Malvaloca

La solemnidad con que han preparado a la Virgen del Valle convierte a la iglesia de la Anunciación la convierte en una de las visitas obligadas durante esta Cuaresma. En el altar y rodeada de velas, con un manto de incienso envolviéndolo todo, una visión que hace que la espera de la cola (que suele formarse a la entrada del templo) merezca la pena.

Justo al lado se puede parar a tomar algo en La Malvaloca o en su vecina Doña Encarna, ambos establecimientos del Grupo Spala y centrados en una cocina tradicional que no renuncia a actualizarse. Platos de cuchara conviven con otras propuestas más modernas, como bastoncillos de choco fritos con mayonesa de lima en La Malvaloca o carpaccio de gamba blanca de Huelva en Doña Encarna.

Puro, lo más reciente de Javi Abascal.

Unos pasos más allá cruzando José Gestoso encontramos La Barra de Cañabota, donde darse un buen homenaje con sabor a mar. Un sandwich o una panterita dulce es una opción rápida para los que se dirijan al recién inaugurado Panther Juice Sandwich Market, ubicado en la calle Martín Villa, 2.

San Andrés

La Hermandad de Santa Marta genera una gran devoción en Sevilla y son muchos los fieles que se acercan a San Andrés para contemplar a sus titulares. Desde el Domingo de Ramos el Cristo de la Caridad, la Virgen de las Penas y Santa Marta presidirán la parroquia, aunque hasta entonces es posible admirarlos en su ubicación habitual.

Bar Santa Marta

En la misma plaza se puede tomar luego una cerveza fresquita con algunos de los platos habituales del Bar Santa Marta, donde destacan su flamenquín XXL, su tortilla de patatas o sus boquerones, entre otros. Justo al lado, en Angostillo 8, La Jaula de Papel, ofrece una cocina moderna con recetas como bastones de pollo crujiente con mostaza y curry, croquetas de salchichón, dátiles y queso azul o una selección de hamburguesas gourmet.

A pocos metros se encuentra un espacio singular donde tapear de forma diferente: La Casa del Tigre, un acogedor establecimiento donde tomar recetas como ensaladilla de merluza y encurtidos, papas bravas o taco de puchero.  La Cayetana es otra de las opciones cercanas, un acogedor espacio donde destacan su tortilla hecha al momento y su calamar de potera.

Basílica del Cachorro

El Cachorro, que estará expuesto en su paso durante toda la Semana Santa, es una de las visitas recurrentes durante los días de la Cuaresma. Muchos cofrades y devotos se acercan a este punto de Triana durante estos días para contemplarlo en su altar y una vez allí es posible hacer más de una suculenta parada para recargar las pilas.

Sol y Sombra

La mítica taberna Sol y Sombra está a tan solo unos metros, y allí es posible tomar algunos de sus clásicos, como la cazuela don José o sus gambas al ajillo. Bar El Tropiezo es otro de los típicos de la calle Castilla, un espacio donde ofrecen recetas como menudo, carne con tomate o albóndigas, además de rollito de langostinos con bacon o san jacobo de berenjenas.

Kiosco Casa Matías está en la misma calle y ofrece una amplia terraza donde sentarse a disfrutar de algunas de sus viandas: ensaladas, montaditos, hojaldre de foie con manzana o carrillada son algunas de ellas.

Fachada del Bar PuraTasca

El paseo hacia la calle Numancia seguro que merece la pena si lo que se busca es buena cocina. Allí espera Puratasca y sus sorprendentes propuestas, como salmorejo de fresa, sopa de tomate con bacalao o un delicioso bocata cubano.

Con vistas al Guadalquivir, la terraza de De la O es otra de las recomendaciones que hacemos si se visita El Cachorro. Algunas de las recetas de su nueva carta son milhoja de carrillera de añojo o tartaleta de pollo a la marroquí.

Ver los comentarios