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Cristina Hoyos aguantará el Museo de Baile «hasta que tenga la soga al cuello»

GOGO LOBATO El Ballet Flamenco de Andalucía estrenó este espectáculo el pasado verano en la Alhambra y ahora por fin llega a Sevilla

Cristina Hoyos, directora del Ballet Flamenco de Andalucía y propietaria del Museo de Baile Flamenco, dijo ayer que ya ha recibido «algunas ofertas para comprar el Museo», aunque reconoció que «no son muy seguras y las estamos estudiando para ver cuál de ellas es la más adecuada, porque tenemos la ilusión de que la persona que lo compre siga con el proyecto». La bailaora confía en que el comprador siga con el Museo de Baile Flamenco, un espacio para cuya puesta en marcha hace cuatro años recibió diversas subvenciones públicas por más de 800.000 euros que tendría que devolver si el Museo fionalmente se desmantelase.

Hoyos dijo ayer que no se plantea un plazo límite para venderlo: «Seguiremos hasta que no podamos más, y tengamos la soga al cuello, como se suele decir», comentó. Además, aseguró que vender el inmueble para instalar allí otro proyecto sería «la última opción», porque «esperamos a esa persona que venga y quiera seguir con el proyecto del Museo», un espacio que en la actualidad sigue abierto. Cristina Hoyos puso en venta el inmueble que alberga el Museo, situado en la calle Manuel Rojas Marcos y con una extensión de 1.713 metros cuadrados, el pasado mes de noviembre por un precio cercano a los 6 millones de euros.

Por fin en Sevilla

La bailaora y coreógrafa hizo estas declaraciones con motivo de la presentación en el Teatro de la Maestranza de «Poema del cante jondo en el Café de Chinitas» de Federico García Lorca, una producción del Ballet Flamenco de Andalucía (BFA) -que dirige desde 2004- con dirección escénica de José Carlos Plaza y dirección musical de Pedro Sierra. La bailaora afirmó que este montaje -que consiguió más de 50.000 espectadores en su estreno en Granada el pasado año- es un trabajo «en equipo que guarda la esencia del flamenco», porque el BFA agrupa a un conjunto de bailaores «con mucho arte, mucha disciplina y muchas ganas».

Hoyos destacó de la obra su «atrayente» coreografía, en la que ella sólo representa un número, «Zorongo». .

Por su parte, el músico Pedro Sierra dijo que «es muy sencillo hacer cosas con Lorca porque a todo el mundo le suenan sus coplillas», aunque, añadió, «a veces crear cosas nuevas sobre cosas establecidas tampoco es fácil». En este sentido, explicó que en este montaje «se han hecho flamenco todos los poemas y los más conocidos se han hecho un flamenco más actual, con un gran nexo de unión entra la música y el baile».

El contrato de Cristina Hoyos con la Junta de Andalucía, por el que percibe 90.000 euros anuales, venció el pasado 31 de marzo y aún no ha sido renovado. Sobre esta cuestión ayer se limitó a decir que «no sabe nada» y que aún no se ha reunido con el nuevo consejero de Cultura, Paulino Plata, para discutir este asunto.

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