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La economía sumergida roza el 25% del PIB andaluz

Andalucía es una de las comunidades autónomas donde más ha aumentado la economía sumergida en la última década, según un informe del sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha). En concreto, entre el año 2000 y el 2009, la también denominada economía informal se habría incrementado en 5,5 puntos al pasar de suponer un 19,4% del PIB regional a significar un 24,9%, 1,6 puntos más que el promedio nacional que Gestha cifra en un 23,3%.

En cifras absolutas, los Técnicos de Hacienda estiman que la bolsa andaluza de fraude ha sumado 6.322 millones de euros hasta alcanzar los 34.182 millones a cierre del pasado año fiscal.

En España, en el último decenio la bolsa de dinero negro aumentó en más de 25.000 millones de euro hasta los 244.918 millones de euros.

Andalucía fue la cuarta comunidad autónoma donde más creció la tasa de dinero negro en los últimos diez años, al mismo nivel que Murcia y La Rioja.

Desplome de la recaudación

El estudio pone de relieve cómo el importante crecimiento del fraude fiscal, unido a la caída de la actividad económica, motivaron un desplome de la recaudación tributaria en Andalucía del 21,7%, situándose en 8.720 millones de euros hasta noviembre del pasado año. Las partidas más perjudicadas por la crisis y el fraude en Andalucía fueron el IVA y el Impuesto de Sociedades, que cayeron un 24,7% (hasta los 1.805 millones de euros) y un 37,2% (1.218 millones de euros), respectivamente.

las comunidades autónomas que protagonizaron mayores crecimientos de su bolsa de fraude en este período fueron Navarra (+6,8%) y la Comunidad Valenciana (+5,6%), seguidas de Andalucía (+5,5%), Murcia (+5,5%) y La Rioja (+5,5%).

Madrid y el País Vasco fueron las dos únicas regiones que lograron reducir sus bolsas de fraude entre 2000 y 2009 (un 0,8% y en un 1,2% respectivamente).

Según Gestha, la «laxitud fiscal explica que el Estado dejara de recaudar más de 71.000 millones de euros en los últimos diez años, que es la cantidad que tendría que haber ingresado de acuerdo a la evolución del PIB y la recaudación impositiva por IVA en este periodo». Así, mientras que el PIB registró un crecimiento acumulado del 64% entre los años 2000 y 2009, las cuotas de IVA ingresadas por empresario en este último año retrocedieron a niveles de hace una década.

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