Preocupación en el Cerro del Águila por una oleada de robos en una decena de comercios
Los comerciantes de la calle Afán de Ribera, en la barriada del Cerro del Águila, están preocupados por una oleada de robos que se vienen produciendo desde el mes de marzo y que, en las últimas

Los ladrones intentaron romper el escaparate de la farmacia con la tapa de un husillo, pero se encontraron con que era cristal blindado. J.R.B.
Los comerciantes de la calle Afán de Ribera, en la barriada del Cerro del Águila, están preocupados por una oleada de robos que se vienen produciendo desde el mes de marzo y que, en las últimas semanas, se está incrementado de forma alarmante.
Los vecinos y comerciantes de la zona relacionan estos sucesos con el traslado, el pasado mes de marzo, de la Comisaría de la Policía Local de la avenida de los Gavilanes a Sevilla Este.
Cristales blindados
Desde hace unos meses, se viene denunciando que en la calle Afán de Ribera y en las zonas aledañas se vienen produciendo constantes robos que tienen en el punto de mira a los pequeños comercios y empresas del barrio. Esta situación se ha visto empeorada por los últimos robos o intentos fallidos de los mismos, que han dado la voz de alarma en la zona.
Ayer mismo de madrugada fue parcialmente roto el escaparate de una tienda de deportes de la céntrica calle del Cerro del Águila. Los ladrones tuvieron que desistir en su empeño tras topar con un cristal blindado. Similar hecho ocurrió la madrugada del pasado domingo en una farmacia de la calle Afán de Ribera. Su propietario, Miguel Cuesta, encontró la mañana del lunes el escaparate destrozado tras haber sido golpeado con la tapa de un husillo. «El cristal estaba blindado y eso evitó que entraran a robar, de lo contrario me hubiera encontrado la farmacia hecha un desastre», asegura el farmacéutico. Por ello, y mientras reparaban los daños, este establecimiento se ha visto obligado a contratar los servicios de un vigilante de seguridad.
A escasos metros, hace dos semanas, se producía un robo en una tienda de ropa, de la que se llevaron varios vestidos y otras prendas.
A finales de junio, también padecía esta oleada de robos la asesoría financiera Creditech, que fue asaltada durante la noche y de la que sustrajeron varios equipos informáticos. «Llevamos unos meses en el barrio padeciendo una oleada de robos que, a veces, afortunadamente, se quedan en tentativa», denuncia María José Viñolo, coordinadora de la oficina. «La semana pasada -explica- también intentaron robar aquí pero no pudieron porque hemos incrementado las medidas de seguridad».
De hecho, esta oficina se ha visto obligada a colgar varios carteles del escaparate en el que se anuncia un sistema de vigilancia mediante grabación.
Modus operandi
A pocos metros, en una oficina financiera, Capitalcasa, se produjo recientemente un robo en el que el modus operandi se repite: se rompe el cristal del escaparate y se sustrae todo aquello que puede ser vendible en el mercado negro. Tania Jiménez, empleada de esta empresa, confirma que «rompieron el cristal del escaparate y se llevaron varias pantallas de ordenador, una cámara de fotos y dos teléfonos móviles».
Pero esta oleada de robos va más allá de la popular calle Afán de Ribera. Las zonas aledañas no se libran de estos actos delictivos.
Así, en la vecina calle José María de Pereda también se contabilizan varios robos, entre ellos en uno de los bares de la zona. Lo mismo ocurrió en Eñe Inmobiliaria, una empresa que vio como era sustraído de su local abundante material informático.
Los vecinos comentan por la calle las necesidades de vigilancia policial que requiere la zona. Muchos de ellos denuncian tirones y, en especial, robos en el interior de los vehículos. Aseguran que, sobre todo en fines de semana, muchos de los coches que se dejan aparcados en la calle amanecen con las ruedas rajadas «a punta de navaja».
La gran mayoría de los consultados achacan esta oleada al traslado de la Comisaría de la Policía Local de la avenida de los Gavilanes a Sevilla Este, ya que, aunque la primera continúa abierta, sólo realiza funciones de retén policial contando con tan sólo una patrulla.
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