A vueltas con Juan María Alcedo, pulmón y puñal del filial

Se da la circunstancia de que el defensor gaditano ha visto cómo su protagonismo se ha visto incrementado en los últimos meses por diversos factores que lo han llevado en muchísimas ocasiones a formar parte de los entrenamientos que dirige Julen Lopetegui : por un lado, el crecimiento progresivo y honesto de un futbolista versátil que lleva alistado al Sevilla desde la temporada 2016-17 en la que llegó como cadete a la carretera de Utrera con visos de seguir dando saltos de gigante. Sus primeros pasos los dio en la EFI Meva , la primera escuela de miles de niños que soñaron y sueñan con ser futbolistas en la Bahía de Cádiz, y en el CD Rota con una posición mucho más adelantada de la que hoy ostenta. Posteriormente llegó el Atlético Sanluqueño , uno de esos clubes cazatalentos de la provincia para aprender, si hacía falta, a desarrollarse como delantero y a percutir como interior izquierda, profundizando en su carácter ofensivo pese a haber llegado a la élite como lateral.

Pero la camiseta del Sevilla para competir en la brillante División de Honor Andaluza esperaba a un joven de un gran espíritu competitivo que logró quemar etapas rápidamente en cuestión de pocos años donde pasó del Liga Nacional juvenil al División de Honor en lo que viene siendo un pestañeo. Todo ello de la mano de la selección española, donde llegó a ser internacional con la sub 18 . Fue con Paco Gallardo, ya en la campaña 2019-20, cuando Juan María debutó en Segunda división B frente al Real Murcia, y ya antes había podido nutrirse de la competitividad de su compañero Pablo Pérez , al que el Sevilla renovó en noviembre de 2020 hasta 2024, cuando el hispalense asomaba con fuerza por la puerta del propio Lopetegui. Pero las reiteradas lesiones han impedido que el prometedor lateral zurdo, que dejó detalles de su buen nivel en momentos puntuales de estos últimos meses, haya tenido la continuidad que deseaban todos por varias dolencias, la última, sufrida en febrero, tras una rotura parcial del tendón común de los isquiotibiales de la pierna derecha (entre 8 y 10 semanas de baja).

Ya mucho antes de aquello, Juan María y Pablo Pérez protagonizaban una de esas historias de sana rivalidad en las que a ambos sólo les interesaba que ganara el Sevilla jugase quien jugase en la liga que jugasen y ante quien se enfrentasen. Hubo un tiempo en el que Pablo Pérez tuvo más concurso de manera continuada que el zaguero roteño y antes de que se produjese esa última lesión del sevillano, ya en 2022, era Juan María quien le ganaba la partida en el once, se apunta, siempre a juicio del que hoy es su técnico. Un Alejandro Acejo que ya tuvo a los dos zurdos más talentosos de aquel División de Honor juvenil, y que llegó a colocarlos uno en el corte defensivo y otro en la liberación ofensiva que da el flanco zurdo, algo que ha hecho también esta misma temporada a los mandos del filial. Nadie mejor para conocer a estos dos jóvenes defensores franjirrojos para sacar lo mejor de ellos porque el nivel sólo lo eleva la competencia de cada una de las partes.

Abril llega con el futuro incierto del Sevilla Atlético, que luchará en la recta final del campeonato por asegurar su sitio en Primera RFEF un curso más si firma la ansiada permanencia. Pero eso no está aún del todo claro, habida cuenta del gran pulso que los pupilos de Alejandro Acejo mantienen ante rivales como el Atlético Sanluqueño, el Linares, el Cornellá, el Barcelona B, el UCAM o la Balompédica Linense, entre otros conjuntos. Este fin de semana se medirá el filial nervionense al Real Madrid Castilla, también en la lucha, y, presumiblemente, Juan María Alcedo volverá a ser de la partida al igual que lo ha sido en el empate frente al Atlético Baleares. Este fijo del Sevilla Atlético fue quien dio la asistencia del último derbi de filiales ante el Betis Deportivo y ha sido la causa de numerosas jugadas de ataque sevillista, asomándose a la diana en varias ocasiones con un excelente golpeo y con mucha valentía en la conducción vertical, además de haber conseguido sumar atrás para reducir los goles en contra de una defensa muy mermada por los tantos encajado a inicios de la campaña.

A excepción del duelo frente al Villarreal B, el futbolista de Rota ha disputado todos y cada uno de los minutos que lleva en competición el Sevilla Atlético desde el 14 de noviembre. Nadie ha jugado más desde que empezó la competición. Antes también acumuló choques al completo y su presencia continuada en los esquemas del entrenador malagueño han convertido a Alcedo en un pilar esencial del filial. Ahora quiere que esa línea de crecimiento no se agote sabiendo que todavía puede dar mucho más de sí, por más que su horizonte contractual concluya en junio del presente año. Según ha podido conocer ABC de Sevilla , el roteño tiene encima de la mesa una oferta de renovación por parte de un Sevilla en el que quiere seguir creciendo. El lateral no ha aceptado hasta ahora simplemente porque su cabeza está más que pendiente de sus compañeros, de su rendimiento en el verde a corto plazo y de su implicación con el segundo vestuario franjirrojo, pero sabe que su futuro sigue pasando por ser sevillista y su intención es cumplir, cuando se presente, el sueño que estuvo cerca de conseguir en Copa del Rey, donde fue convocado ante el Andratx, y en la Champions League, donde viajó con el equipo a Salzburgo, y no es otro que el que varios canteranos están teniendo la ocasión de hacer realidad: debutar oficialmente con el primer equipo sevillista tras aquella primera aparición en el amistoso ante el Alavés, y quién sabe si poder hacer la pretemporada con Julen Lopetegui y a partir de ahí, dejar su candidatura a honesto competidor por el lateral izquierdo del Sevilla.