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Restauración

La Carretería retira del culto al Cristo de la Salud

Comienzan seis meses de restauración en el taller de Pedro Manzano que devolverá a los orígenes a este crucificado que es joya de la Semana Santa de Sevilla

Altar de veneración en el que ha permanecido expuesto el Cristo de la Salud de la Carretería en la Semana Santa de 2021 Javier Comas
Javier Comas

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La hermandad de la Carretería ha retirado del culto al Cristo de la Salud para comenzar la restauración que acometerá el taller de Pedro Manzano Beltrán durante un periodo mínimo de seis meses. Arranca de este modo un extenso periodo hasta el mes de octubre que permitirá devolver los brillos del barroco al imponente crucificado de Ocampo.

Con el cierre de la capilla de las Tres Necesidades este lunes a las 20 horas, finalizaron cinco días en los que la hermandad expuso la imagen a sus hermanos a modo de despedida durante un amplio horario. Durante este martes 13 el templo permanecerá cerrado para las labores de desmontaje de la priostía para que finalmente, el 14 de abril, la talla parta a Triana al taller de Manzano para dar incio a estos trabajos.

Restauración

La corporación del Viernes Santo afrontará definitivamente esta intervención que los hermanos aprobaron en cabildo general en febrero de 2020 y que fue aplazada meses después con la irrupción de la pandemia del Covid-19. Este hecho provocó la inseguridad en la junta de gobierno de cara a posibles confinamientos que impidieran el avance de los trabajos.

Pedro Manzano restaurará una portentosa talla que no era intervenida desde los años 80 por José Rivero Carrera. También fue resanada de urgencia en 1991, cuando se produjo el fatídico accidente en la tarde del Viernes Santo a la altura del Teatro Coliseo. Como ya señaló Manzano a este periódico hace un año, «no había estudios previos de tax y radiografía de la imagen, por lo que se realizarán de cara a la intervención».

Con ello, el informe detalla que el crucificado presenta estructuralmente algunas fisuras «lógicas del uso de la imagen y de las condiciones medioambientales y sobre todo, a nivel de policromía, tiene pérdidas y l evantamiento, con manchas en líneas generales en la imagen», señala Manzano.

Por esto, se plantea una limpieza de la policromía de la talla « consensuada con la comisión de seguimiento », se ampliarán los estudios y se hará un análisis químico de la policromía y, «con un poco de suerte podamos datarla cronológicamente», apunta el restaurador que viene realizándole un seguimiento desde el gran aguacero que sufrió el Viernes Santo de 2004.

Atribuida por los expertos por Francisco de Ocampo , la imagen se data a caballo entre finales del siglo XVI y principios del XVII.

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