Suscríbete a
+Pasión

Roque Balduque: la Centroeuropa que llegó a Sevilla para crear devociones

De sus manos salieron iconos que crearon escuela en el mundo, así como el prototipo del crucificado o de las imágenes marianas con el niño que han llegado hasta la actualidad

Javier Comas

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La Junta de Andalucía ha firmado con la asociación de Amigos del Museo de Bellas Artes la restauración de la Virgen con el Niño de Roque Balduque, una valiosa talla realizada en 1550 y que se expone de manera permanente en la sala II de este espacio expositivo. Su recuperación devolverá a los orígenes a una talla de un escultor que trajo a la imaginería sevillana los aires de una Centroeuropa inmersa en el Concilio de Trento. Un escultor que dejó en Andalucía tallas como la Virgen del Amparo de la Magdalena, la Reina de Todos los Santos , la Virgen de la Cabeza de las Siete Palabras, imágenes en la Catedral de Lima o del retablo mayor de la Seo sevillana o incluso, quién sabe, puso sus manos en la Virgen del Rocío de Almonte.

La serenidad de sus imágenes y el virtuosismo de sus estofados son seña de identidad de este artista del segundo tercio del siglo XVI que plantea un primer enigma desde su nacimiento: ¿de dónde es Roque Balduque? Los historiadores del arte apuntan aun origen centroeuropeo o nórdico «evidente». Es el caso del profesor Jesús Ángel Porres Benavides, uno de los grandes expertos en este escultor, que señala que «por analogía con los Bolduque, activos en Medina de Rioseco, podría haber nacido en la localidad holandesa de Hertogenborsch , aunque también pudiera ser originario de Bois-le-Duc , localidad de Bravante (Bélgica) de la que derivaría su apellido Balduc, luego castellanizado».

Virgen de Roque Balduque del Museo de Bellas Artes / RAÚL DOBLADO

Balduque, que nació en 1500 , trabajará en Sevilla cerca de tres décadas desde 1534 hasta su muerte 1561 «mientras trabajaba en el relieve de la Huida a Egipto del retablo mayor de Catedral de Sevilla» , como apunta Porres. Todo en una ciudad que ya es epicentro del mundo gracias a la Carrera de Indias.

Santa Ana de Roque Balduque / M. J. RODRÍGUEZ RECHI

Pero en sus rasgos estilísticos está la clave de este escultor. Porres argumenta que «a Balduque le debemos ante todo la creación de tipos iconográficos muy marcados, con amplia repercusión en las tierras andaluzas así como en el Nuevo Mundo. Fija por ejemplo el prototipo del crucificado o de las imágenes marianas de las Vírgenes con el niño». Por su parte, el profesor José Roda Peña destaca que «solo dos crucificados documentados han llegado hasta nosotros. Ambos, pensados para los áticos de los retablos mayores de Santa María de Cáceres y Santa María de Medina Sidonia». En el campo de las atribuciones, Porres señala «las de los Cristos de la Vera Cruz de Alcalá del Río, Lebrija y Estepa, así como el del Buen Fin de la citada localidad alcalareña. De antiguo son las atribuciones del de los Martirios de Carmona y el del coro alto del convento de San Francisco de Lima». Por su parte, Roda «destaca el del Museo de Bellas Artes de Sevilla procedente de la colección González Abreu y el crucificado del extinguido convento carmelita de los Remedios de Triana, actualmente en la parroquia de Santa Ana de Sevilla».

Cristo de la Vera Cruz de Alcalá del Río / ABC

Las vírgenes de Balduque

Virgen de la Granada de San Lorenzo / ARCHISEVILLA

En este detallado estudio que realiza Porres, señala las relaciones que Hernández Díaz hizo de sus prototipos marianos como la Virgen de la Granada de la parroquia de San Lorenzo de Sevilla, «algo modificada en su rostro y cabellera, para cuya iglesia sabemos que Balduque contrato un retablo en 1554», comenta Porres. Por otro lado, el mismo año firmó el contrato para tallar a la Reina de Todos los Santos «y que a pesar de que ha sufrido algunas intervenciones conserva el carácter primigenio». Entre sus tallas destaca la Cabeza de la Sacramental de las Siete Palabras de Sevilla y la Virgen de la Misericordia (~1558). Porres comenta que «otra también tipológicamente parecida es la de Santa María de Gracia en Marchena en la iglesia de San Agustín o la Virgen que se encuentra en la iglesia de San Benito de Sevilla. También podríamos atribuirle a su círculo la Virgen del Buen Suceso, de la iglesia de la Trinidad de Jerez de la Frontera. Hacia 1555 tendríamos que adjudicar la Virgen del Amparo de la parroquia de la Magdalena de Sevilla. Otras imágenes relacionadas con Balduque desgraciadamente se perdieron en el 36 como la Virgen de la Granada de San Román. También en tierras americanas se le han adjudicado los bellísimos ejemplos de la Virgen del Rosario en la iglesia del convento de Santo Domingo de Lima y la de Nuestra Señora de la Evangelización en la Catedral de esta misma ciudad. Aparte de en Sevilla trabajó en zonas cercanas como Cáceres o el obispado de Cádiz (Medina Sidonia y Chiclana)».

Reina de Todos los Santos / M. J. RODRÍGUEZ RECHI

Sus retablos

En cuanto a su trabajo en retablística, Porres señala que «la mayor parte de sus retablos han desaparecido o se conservan mutilados a excepción de los de Santa María de Cáceres, Alcalá del Río y el mayor de Medina Sidonia , contratado en 1559 (aquí solo se hizo parte de la mazonería, el banco del retablo y el calvario cuyas imágenes reconoce en su testamento haber concluido). Balduque trabajará en este retablo con indicios de que participa tanto en su diseño como en la ejecución. Antes, en 1554 aparece en Medina contratando el retablo sacramental de dicha iglesia, del cual permanecen los cuatro doctores de la Iglesia en el actual retablo barroco y el relieve de la Cena en la capilla del Baptisterio».

Virgen de la Evangelización, Catedral de Lima / BENJAMÍN DOMÍNGUEZ

Desde Jerez, con el retablo de Santo Domingo; pasando por Chiclana con el altar mayor de su parroquia principal, pasando por el entierro de Cristo de la capilla del Panteón de la Colegiata de Nuestra Señora de la Asunción de Osuna de hacia 1550, «así como algunos de los relieves de las alas del retablo mayor de la catedral sevillana según atribución de Margarita Estella». Un artista multidisciplinar que creó un estilo y que trabajo de la mano también como el pintor trianero Antonio de Alfián «para el que hizo la mazonería de un retablo pictórico. Juan Giralte su discípulo sería el encargado de terminar algunas de las obras que dejó inacabadas Roque de Balduque tras su muerte», señala el profesor Porres.

La piedra también pudo formar parte de su producción. Ahí, Porres comenta que «el profesor Albardonedo le adjudica igualmente algunas creaciones en piedra, como un crucero procedente del Monasterio de San Isidoro del Campo en la colección del Museo Arqueológico de Sevilla así como la posible participación del escultor en la sala capitular del Ayuntamiento  de Sevilla donde le atribuye el calvario y otros relieves. Balduque usa un repertorio formal en sus esculturas que pertenece al mundo clásico revivido en las creaciones del Renacimiento».

Detalles del techo de la sala capitular del Ayuntamiento de Sevilla / ABC

¿Es la Virgen del Rocío de Roque Balduque?

Quizás sea uno de los grandes enigmas de la imaginería andaluza. La autoría de la Virgen del Rocío -al menos del aspecto estético actual de la imagen- ha formado parte siempre del imaginario de estudiosos y expertos en arte que buscan relacionar esta imagen de devoción universal con algunas manos con nombres y apellidos. Quizás, las de Roque Balduque estén entre las más cercanas al círculo de la obra que actualmente se conoce.

La Virgen del Rocío, en un plano del documental / MEDINA MEDIA

Así lo asocian muchos expertos como Fernando Aguado, licenciado en Bellas Artes, que forma parte de quienes plantean que la patrona almonteña tendría el aire del imaginero flamenco Roque Balduque, autor de la Virgen del Amparo, y habría que inscribirla en la segunda mitad del XVI. Por otro lado, otras corrientes de investigación la asocian al retablista Jorge Fernández Alemán , que participó también en el altar mayor de la Seo Hispalense y que talló una imagen con rasgos muy similares en su rostro a la Blanca Paloma: la Virgen orante del Nacimiento de Jesús, una de las cartelas talladas entre 1508 y 1529 del eje central del retablo mayor hispalense.

Virgen orante del nacimiento de Jesús, escena del retablo mayor de la Catedral de Sevilla tallada por Jorge Fernández Alemán entre 1508 y 1529 / JAVIER COMAS

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación