La estudiante de Enfermería sevillana que 'cura' con su canto a los pacientes del Virgen del Rocío

Victoria Ruiz Troncoso es estudiante de Enfermería de Arahal y la protagonista de un vídeo que se ha hecho viral en las redes sociales, tiene más de un millón de reproducciones en Facebook y casi 45.000 en Instagram.

El vídeo lo colgó la madre de la menor de 16 años atropellada por un autobús de Tussam cuando se dirigía a su centro educativo el pasado 14 de mayo. En las cuentas va explicando su evolución en la Unidad de Traumatología del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla donde permanece ingresada desde entonces. Y tiene miles de seguidores.

La estudiante de Enfermería ha terminado las prácticas de su segundo año de Enfermería en dicha Unidad. En su último día en el centro sanitario, pidió permiso para ir por las habitaciones cantando acompañada a la guitarra por su compañera Reyes Morote , otra estudiante de Enfermería. «Se lo dije a Aurora, la supervisora, y ella a su vez al director del centro, y me lo dieron», cuenta esta joven de 19 años que todavía no sale de su asombro .

Así fue como comenzó su periplo por la Unidad de Traumatología, concretamente en el ala de la planta donde había hecho sus prácticas y quiso hacerlo «a modo de despedida». Pero después de pasar por las 12 habitaciones de este ala, y ver la aceptación de los enfermos, siguió en el resto de la planta. Es en una de estas habitaciones donde está ingresada Almudena Melgarejo Álvarez , la joven atropellada por el autobús de Tussam a mediados de mayo.

«La madre que la acompaña en todo momento, grabó un vídeo mientras cantaba ‘Hoy’ de India Martínez, y lo subió a las redes donde cuenta cómo va la recuperación de su hija ». Victoria jamás pensó lo que se le venía encima. En el vídeo se puede ver como en la canción es arropada por las compañeras de la planta que se unen a ella en el estribillo y como la paciente disfruta del momento especial e inesperado cuando una de las aspirantes a enfermera que la ha cuidado durante los últimos meses, se arranca a cantar para despedirse de ella.

«Al día siguiente me despertó Reyes para contarme lo que estaba pasando, el vídeo se había hecho viral , tenía miles de reproducciones». Cuenta Victoria que en ese momento no se lo podía creer. «Llevo cantando desde los once años y he subido muchos vídeos a las redes con todo tipo de canciones pero nunca me ha pasado esto».

Desde entonces Victoria no para de atender a los medios de comunicación y las llamadas para felicitarla, especialmente en su pueblo donde ha recibido cientos de comentarios aplaudiendo su iniciativa. «Lo hice por mi satisfacción personal y por entretener a los pacientes ingresados . Intentaba cambiar un poco la dinámica normal de un hospital. Salí de allí llena de energía positiva, lo mismo que quería transmitir a todos los pacientes a través de la música», explica.

Y es que Victoria tiene deseos de cantar «todo el día» . Pero, sobre todo, su pasión es ejercer de enfermera, aunque no era su primera opción cuando hace dos años acabó la Selectividad. «Entré en esta carrera de rebote porque ese año la nota de corte para entrar en Medicina fue muy alta y no llegué. Pasé un verano horrible pero ahora he descubierto que ser enfermera es mi verdadera vocación . Las enfermeras estamos siempre al pie del cañón, nuestra atención va más allá de lo que verbaliza el paciente con sus palabras, solo con verles la cara sabemos lo que necesita en cada momento».

De sus prácticas en el centro sanitario se lleva esta gran experiencia, el valor que tiene en la Sanidad una buena enfermera, sobre todo si aplica humanidad a su trabajo .

Por eso ha querido sumar a su pasión profesional, otra que la mantiene desde pequeña pegada a las canciones más actuales. «Para esta despedida, mi compañera y yo preparamos una serie de temas», dice, y el resultado ha sido «inesperado pero nos ha ha hecho muy feliz».

Es consciente de que sus canciones aportan humanidad a la atención en los hospitales, donde, a veces, hay muchas horas tristes. Ahora espera impaciente que llegue septiembre para empezar el tercer curso de Enfermería. Aunque no sabe todavía en qué planta estará destinada, «es posible que me cambien a Pediatría o al Maternal», lo que es seguro es que volverá a cantar para ayudar a los pacientes a curarse en cuanto se lo permitan.