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Tribunales

El «loco del chándal»: «Hay un interés grande para que yo siga en la cárcel»

Manuel González, acusado de incendiar la casa de la hermana del exalcalde de Almadén de la Plata, asegura que estaba en Barcelona el día de los hechos

Manuel González González, conocido como el «loco del chándal», durante el juicio Manu Gómez

Jesús Díaz

Manuel González González, conocido como el «loco del chándal» , excarcelado en 2013 merced a la derogación de la doctrina «Parot» tras haber sido condenado a 169 años de cárcel por matar a una mujer y violar a dieciséis en Barcelona , ha manifestado este martes que «hay un interés grande para que siga en la cárcel y de momento se está consiguiendo».

González González se ha vuelto a sentar en un banquillo de los acusados, en este caso de la Audiencia de Sevilla , para ser juzgado por incendiar en marzo de 2017 la vivienda de María Dolores Vidal, la que fuera jueza de paz de Almadén de la Plata y hermana del exalcalde José Luis Vidal. Se enfrenta a quince años de prisión.

Las disputas entre la familia Vidal y el acusado eran públicas, sobre todo a raíz de las movilizaciones ciudadanas celebradas en 2013 en contra del regreso del «loco del chándal» a dicho municipio tras salir de la cárcel en noviembre de este años gracias a la doctrina Parot. Los vecinos no querían que este violador y su familia se asentasen en esta localidad de unos 1.500 habitantes, algo que sucedió en enero de 2014.

Manuel González González, acusado por un delito de incendio con peligro para la vida de las personas, ha negado durante el interrogatorio, en el que sólo ha contestado a las preguntas de su defensa, que sea el autor del incendio intencionado que calcinó completamente los accesos de la casa de María Dolores Vidal. «Estaba en Martorell» , ha asegurado.

Su abogado le ha insistido en si realizó el incendio y el acusado ha afirmado por dos veces que «para nada». «Hay un interés grande para que yo siga en prisión y de momento se esta consiguiendo. Todo está muy bien preparado para que yo siga en prisión », ha alegado el acusado, en prisión provisional desde su detención y para quien la prórroga de su situación (en la cárcel de forma provisional) es «reflejo del juicio».

El incendio

Según la Fiscalía, el acusado se personó a las 1,42 horas de la madrugada del 12 de marzo de 2017 en el domicilio de la hermana del exalcalde de Almadén, con problemas de movilidad, y «roció con gran cantidad de gasolina la puerta de madera que da acceso a la vivienda», así como las ventanas adyacentes a la misma, también de madera y con ventanas de plástico, para a continuación prender fuego al combustible y abandonar el lugar. Tal extremo desencadenó dos «focos de ignición» en la vivienda, que se tradujeron en llamas y humareda que se propagaron al interior de la casa.

Aunque la moradora de la vivienda quedó «atrapada» en el interior de la misma por el efecto del fuego, «la inmediata intervención» de unos vecinos que incluso derribaron la puerta supuso la «puesta a salvo» de la mujer. Uno de ellos ha declarado este martes en la primera sesión del juicio, que continúa mañana.

En junio de 2017, Manuel González González fue detenido por la Guardia Civil por el quebrantamiento de una orden de alejamiento que desde 2015 le prohibía acercarse al exalcalde popular del municipio, siendo arrestado en julio de ese mismo año por su presunta relación con este incendio y otro más, contra la otra hermana del exalcalde.

La Fiscalía reclama para este acusado 15 años de prisión por un delito de incendio con peligro para la vida de las personas, así como la prohibición de aproximarse a menos de 500 metros de la hermana del exalcalde, su domicilio o lugar de trabajo y la prohibición también de no comunicarse con ella en 17 años. Además, solicita que indemnice con 11.180 euros a la mujer por los daños perpetrados en

La acusación particular, en representación de la hermana del exalcalde, solicita de su lado 18 años por la misma tipificación y las mismas medidas de alejamiento, así como la misma indemnización que la Fiscalía por los daños perpetrados a la vivienda y, además, otra de 50.000 euros por las «secuelas psíquicas». Y es que la mujer, de 66 años, «viene necesitando de tratamiento médico-psiquiátrico» al serle diagnosticado un «trastorno por estrés postraumático, crónico, irreversible y permanente».

Testigos

En la sesión del juicio de este martes, ha testificado varios agentes de la Guardia Civil que han participado en la investigación de los hechos. Registraron la casa de la madre del acusado en Almadén de la Plata. Para ello tuvieron que llamarla por teléfono porque estaba en Barcelona.

Esta entrada y registro ha sido objeto de controversia esta mañana. La defensa pide la nulidad de esta actuación de la Guardia Civil porque no hubo autorización por parte de la familia del acusado. La Fiscalía y la acusación rechazan dicha petición porque hubo autorización por teléfono, como ha dicho el propio sargento de la Guardia Civil. El tribunal decidirá sobre dicha petición en la sentencia.

Según el agente del Instituto Armado, la madre de Manuel González dijo que podían entrar porque su hijo no tenía nada que ver con el incendio. En el patio trasero de la casa encontraron una garrafa de combustible , presuntamente usado como acelerante en el fuego, y varios spray, del mismo color que los usados en las pintadas realizadas días atrás en la casa del exalcalde.

La víctima

Hoy también ha sido el turno de escuchar la declaración de la víctima , quien ha entrado en la sala con ayuda de un andador. Ha relatado los ataques que sufrió en su vivienda antes del incendio. Le tiraron huevos, aceite en el acerado, le hicieron pintadas en la fachada. «¿Quién?», le ha preguntado la fiscal. «Él», ha dicho ella señalando al acusado, aunque nunca lo vio, pero «lo imagina». «Este hombre me da miedo», ha añadido.

También ha sido cuestionada por las amenazas y ataques a su hermano, el exalcalde de Almadén, que testificará este miércoles. « Te tengo que matar , tengo que acabar contigo», le dijo el «loco del chándal» a su hermano, según la víctima. Después sufrió agresiones por parte del acusado. Le rompieron las gafas de un puñetazo. Junto a su hermano, Manuel González le «pegó una paliza» al exalcalde en una gasolinera.

«Me destrozó mi casa y mi vida» , ha confesado la víctima, que se encuentra en tratamiento psiquiátrico a raíz de estos hechos. La defensa de Manuel González le ha preguntado insistentemente por las manifestaciones en el pueblo contra la llegada de su cliente y su familia, que tenía en Almadén una casa. Ella no ha recordado cuantas fueron las concentración, en las que participó junto al alcalde del pueblo. «Tenían miedo las mujeres», ha manifestado, negando que su hermano fuera el promotor de las mismas.

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