Con la mina de Aznalcóllar al ralentí, el Ayuntamiento paga la luz y el agua de varias familias por 17.500 euros

Con la mina al ralentí y la incertidumbre generada por la causa judicial abierta por las supuestas irregularidades de la Junta de Andalucía en la concesión de los derechos de explotación del yacimiento minero, el consistorio de Aznalcóllar se ha propuesto paliar los efectos de la escasez de recursos económicos derivado del parón minero y el desempleo entre sus vecinos con una línea de ayudas para costear las facturas de luz y agua a las familias que se encuentran en situación crítica.

La delegación de Asuntos Sociales del consistorio tramita esta ayuda gracias a los fondos propios y a la sociedad Aljarafesa que presta el servicio, analizando cada caso en función del nivel de ingresos, el historial laboral y los miembros que componen la unidad familiar.

«Hemos pagado en el último año 17.500 euros para evitar que corten el suministro eléctrico y el agua a muchos vecinos», explica el regidor, Juan José Fernández, a ABC Provincia que gracias a esta iniciativa evitó, sólo en noviembre, hasta tres cortes de luz.

El consistorio gestiona con el programa de suministros básicos de Aljarafesa este plan y suma fondos para hacerlo posible. «Los escasos recursos que tenemos los usamos para tapar agujeros y aunque la prioridad es buscar la manera de emplear a nuestros vecinos, hay sectores especialmente desfavorecidos a los que no podemos dejar este invierno sin agua o sin electricidad en sus hogares por ejemplo para la calefacción», abunda el alcalde de esta localidad de 6.000 habitantes del Corredor de la Plata , que ya gastó 17.500 euros en facturas.

El regidor avanza que en los próximos días en coordinación conCruz Roja se hará un reparto de 10 toneladas de alimentos entre las familias que, a juicio de los profesionales del área de Asuntos Sociales , padecen de una manera más grave la situación de crisis en su término municipal, con un nivel de desempleo del 30% de la población activa.

El consistorio destina 10.000 euros del presupuesto municipal a un fondo de emergencias destinado a situaciones excepcionales como el acceso a una vivienda o a recursos básicos para víctimas de violencia machista y otros colectivos vulnerables.