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Álvaro Aguado: «Lo que estimula de Sevilla es dar con hombres derrotados que no pierden la alegría»

Aguado es una joven promesa del audiovisual español que ya ha recibido varios reconocimientos nacionales

Álvaro Aguado: «Lo que estimula de Sevilla es dar con hombres derrotados que no pierden la alegría»

M. JIMÉNEZ

Álvaro Aguado , publicista, guionista y director cinematográfico, es con tan sólo 28 años una gran promesa del audiovisual español. Aguado estudió la doble diplomatura de Dirección Cinematográfica e Interpretación para Cine y TV en el Instituto del Cine de Madrid.

Este sevillano que comenzó a desarrollar sus habilidades hace apenas ocho años, con vídeos caseros que compartía en las redes sociales, ha visto ya reconocida su labor profesional con importantes galardones.

Los principales certámenes de publicidad del país han puesto sus ojos en los trabajos de Aguado y ha conseguido más de 12 premios por diferentes trabajos. Luis Bassat, Ricardo Pérez o Risto Mejide han figurado entre el jurado de algunos de estos festivales.

- ¿Cómo te definirías? ¿Qué es lo que te caracteriza?

- No me atrevo a entrar en la autodefinición. Soy hijo de Marta y Álvaro. Mi amigo Pol dice que la vida en su totalidad me gusta demasiado. Coincido con Hugo a la hora de apuntar mi capacidad de observación como algo bueno. Estoy enamorado del comportamiento humano y de su lucha constante por entender el caos que lo rodea. Me gusta la gente que pregunta todo lo que no sabe sin importarle parecer ignorante, y me chiflan las personas que no entienden de nada y hablan de todo porque les da igual demostrar la imaginación que tienen.

- Has sido premiado en varias ocasiones, ¿qué galardón ha sido para ti el más importante y por qué?

Procuro restarle importancia a cualquier premio para evitar la comodidad, pero si tuviese que quedarme con uno escogería el primero, otorgado por Risto Mejide. Su gran criterio excede lo habitual, empecé indagando en este extraño campo de la publi y no me esperaba el regalo. Supongo que, como cualquier niño curioso, pruebas algo por primera vez y deseas que la novedad se te haga inagotable.

- De todos tus trabajos: ¿cuál es para ti el más especial y por qué?

- «Por una vida más Sencilla», nuestra primera oportunidad de corto publicitario en el que metemos al antiguo Papa Benedicto XVI, ya abdicado, en una cervecería humilde. Jugábamos contra el tiempo, todos mis compañeros creían en el guion desde su origen hasta el polémico mensaje final, permitiéndonos enfrentar las contradicciones de la Iglesia católica con un simple gesto y en tan sólo dos minutos. Una pena que el cliente no apostase por la valentía de lanzarlo...

- ¿Qué crees que llama la atención de tus trabajos?

- Creo que dan la sensación de no querer vender nada. Ver historias donde te topas con personajes que entran en conflicto con ellos mismos o con el entorno que les rodea, siempre es más apasionante que el corporativismo vacío. Creo que las formas de vender han cambiado porque el consumidor/espectador se ha vuelto más escéptico y está cansado de la invasión. Hay que seducir desde la emoción, el objetivo es que la publicidad se comparta, no que te aparezca en un banner

- Y, ¿qué te gustaría hacer?

Poder dejar las marcas algún día, y desarrollar cortometrajes donde no tenga límites en los mensajes. Está bien porque normalmente me permiten hacer sin preguntar mucho, pero es inevitable entender que hay muchos tipos de clientes y siempre vas a estar condicionado para que su marca no caiga en desgracia. Lo mío es el cine, y la publi me está permitiendo crecer en músculo para enfrentarme el día de mañana, y si todo va bien, al largometraje.

- ¿Dónde y cómo te inspiras?

Le doy un poco la vuelta a tu pregunta si me permites, desde el respeto; a veces no es tanto el dónde o el cómo, sino con quién. Estar rodeado de curiosos, de creadores, y sobre todo, de personas que aman lo que hacen, te permite hacer una lectura de su visión y transformarla desde un punto de vista concreto. Creo que la inspiración me llega cuando observo y escucho anécdotas que me hacen sentir vulnerable, y que por lo tanto despiertan cosas en mí. Si tuviese que elegir un sitio, sin duda cerveza helada y canelones con bechamel en el porche de mi amigo Willy, ría de Punta Umbría

- Alguna anécdota relacionada con tus trabajos...

La mejor anécdota de mis trabajos se llama Antonio Blanco, director de fotografía con el que trabajo normalmente. No le deseo a nadie en este mundo lo que ha tenido que aguantar este profesional a mi lado, desde rehacer un mensaje final para gusto del cliente, pasando por dejarme pasta para poder volverme a Sevilla desde Madrid con la tiesa, hasta el tragarse mis lágrimas cuando nos censuraron lo del Papa. La anécdota es el privilegio de currar con el sabio supremo que consigue ser paciente conmigo sin tirar la toalla.

- ¿Crees que Sevilla es un espacio estimulante?

- Lo que estimula en esta ciudad es tener la suerte de dar con hombres absolutamente derrotados que no pierden la alegría. Que utilizan su humor para adornar las anécdotas más trágicas de sus propias vidas, con apariencia de personajes simples, pero profundamente reflexivos e interesantes, y que se ríen de su propia mezquindad sin careta alguna, haciéndote revisar tu suerte de valores y pasando un rato entre risas.

- ¿Cuál crees que es el secreto para triunfar en este mundo?

- Ni idea, no considero que haya encontrado todavía esa cosa a la que llaman «triunfo». Puede ser que el secreto resida en disfrutar; desde unos macarrones rellenos con queso gratinado hasta la puesta de sol más insignificante. La apreciación está en el placer de disfrutar sin pensar mucho a largo plazo. La certeza que tengo es que en el mundo de la creatividad si uno está constantemente pensando en hacerse rico, mejor no dedicarle tiempo.

- Para poner un punto y seguido: ¿cuál es tu próximo reto?

En corto plazo estamos con el vídeo muestrario de Panambi para la siguiente temporada, que se lanzará en febrero. El pasado abril cerré un interesante proyecto con un filántropo estadounidense, seducido por la manera con la que estamos ilustrando en Sevilla. Aún no puedo desvelar nada, pero es el proyecto más ambicioso al que me he enfrentado. Veremos...

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