El Ayuntamiento de Sevilla apuesta ahora por modificar el proyecto de recuperación del paseo de Torneo hasta el Alamillo

El último movimiento conocido alrededor del paseo de Torneo fue sobre la bocina electoral, cuando a finales del pasado mes de marzo presentó Antonio Muñoz la (casi) culminación del tramo licitado entre la antigua estación del telecabina de Plaza de Armas y el puente de la Barqueta. Una fase que aún sigue pendiente de que se rematen sus plazas, fuentes y elementos de ornamentación, cuyos espacios continúan acotados con vallado de obra.

Pero más allá de esos flecos, lo verdaderamente preocupante es la parálisis que de nuevo puede encontrarse un proyecto que ha rescatado del abandono un paseo de una de las principales arterias de la ciudad y que durante los últimos meses había tomado velocidad de crucero, algo que hacía pensar que próximamente continuaría para culminar con idéntico diseño urbano su último tramo entre los puentes de la Barqueta y el Alamillo.

El último Gobierno local anunció que durante este verano se iniciarían unas obras para la rehabilitación de la torre ‘La Única’, presupuestadas en 679.000 euros, al tiempo que dotarían al Paseo Juan Carlos I (paseo fluvial bajo la citada zona) de pistas polideportivas, pendientes de licitar para el arranque del nuevo mandato municipal. Misma circunstancia en la que quedó ese último tramo del paseo de Torneo, entre la Barqueta y el Alamillo, con los técnicos de la Gerencia de Urbanismo elaborando el proyecto. Sigue a la espera que la empresa adjudicataria inicie el proyecto para el nuevo equipamiento cultural de La Imperdible, que tiene espacio en concesión y licencia de obras otorgada.

El resultado de los dos primeros tramos del paseo de Torneo fue motivo de «orgullo» para el socialista Antonio Muñoz, tratándose de uno de los pocos proyectos urbanísticos de calado que llegaron a culminarse -al menos su parte proyectada- antes de clausurarse el mandato municipal, junto con la reurbanización de la avenida del Greco, la recuperación de la fábrica de Artillería y las peatonalizaciones de la calle Baños y de la avenida de la Cruz Roja, quedando pendientes otros tantos proyectos de gran envergadura -la ampliación de tranvía como gran ejemplo-, que no llegaron a tiempo. .

Ufano por la culminación de este proyecto, Antonio Muñoz le preguntó directamente al por entonces candidato del PP a la Alcaldía sobre qué le parecía el resultado final de este paseo de Torneo. Fue en el cara a cara que ambos libraron ante los micrófonos de Radio Sevilla, escena que dio pie a uno de los mayores lapsus de José Luis Sanz, reprochándole al socialista que hubiera «aprovechado una obra de la Junta de Andalucía para su reurbanización, con una tuneladora que estuvo un año y pico...». Sanz confundía el paseo peatonal de Torneo con las obras del colector de aguas residuales, a su paso por la avenida de Alberto Jiménez Becerril, situación que aprovechaba Antonio Muñoz para reprocharle que le «preocupaba» su «desconocimiento de la ciudad», «notándose que no ha vivido en la ciudad».