sevilla
La fecha límite para comprar el 'San Pedro penitente' de los Venerables será el 24 de febrero
La Consejería de Cultura aún tiene pendiente de resolver el recurso de Abengoa contra el expediente que declaró BIC el cuadro de Murillo
El Ministerio de Cultura no vio inconvenientes a la declaración de Bien de Interés Cultural, que se decretó en mayo de 2022
La Junta estudia si la propuesta de la Fundación Focus para vincular el cuadro y el hospital, ambos BIC, incurre en posible fraude de ley

El viernes 24 de febrero será la fecha límite para poder adquirir el 'San Pedro penitente' del hospital de los Venerables de Sevilla, obra del pintor Bartolomé Esteban Murillo. La administración concursal fijó esa fecha para pujar por los bienes o derechos ... de la matriz de Abengoa. El cuadro, el activo más valioso, se encuentra pignorado a favor de la Tesorería General de la Seguridad Social por una deuda de8 millones de euros de principal y hasta un 35% de dicho principal para posibles recargos, costas y gastos. La administración concursal ha mantenido su valor de liquidación en 8 millones de euros.
La obra fue adquirida por Abengoa S. A. por 6 millones de euros en 2014 y, según el plan de liquidación, en 2015 la multinacional firmó un contrato con la Fundación Focus por el cuál ésta se comprometía «al mantenimiento, custodia y vigilancia del mismo, cesando éste de manera automática cuando la concursada solicite la devolución del activo».
Las ofertas por el murillo y por otros bienes se podrán dirigir hasta el 24 de febrero de 2022 a las 14:00 horas a la administración concursal a través del e mail 'concursoabengoa@es.ey.com', especificando el bien o derecho y el importe ofertado, con las condiciones (asunción en su caso de cargas, impuestos y forma de pago). Los bienes o derechos sobre los que sólo haya una oferta serán adjudicados si supera el 75% del valor asignado. Si hay más ofertas o la única presentada no alcanza dicho porcentaje, se convocará a una subasta presencial a los postores. Si no se vende algún activo mediante subasta, se procederá a la venta a través de una unidad especializada durante un máximo de cuatro meses. Si aún así no se vende, dará comienza a la venta al mejor postor, proceso que finalizará en un año desde la aprobación del plan de liquidación. Si existe una oferta por la unidad productiva, se paralizará de manera automática la adjudicación de bienes que se estén liquidando.
El derecho de tanteo
Sobre el propio cuadro, derivado de su declaración como BIC, existe un derecho de tanteo y retracto a favor de la Consejería competente, en este caso, de la Consejería de Cultura, y al municipio en el que radique el bien, Sevilla. No obstante, tendrá carácter preferente en el ejercicio de tales derechos, la Consejería de Cultura.
La declaración de Bien de Interés Cultural por parte de la Junta, cuyo decreto se aprobó el 24 de mayo de 2022, fue recurrida por la multinacional, que se oponía a que la obra se declarase BIC, lo que provocaría «una lesión patrimonial grave, injusta y evaluable económicamente», sobre todo en un momento en el que la compañía ya estaba en quiebra.
Este recurso de reposición, según han confirmado a este periódico fuentes de la Consejería, no ha sido resuelto todavía. En el mismo se recogen los argumentos de la compañía frente a la decisión de la Junta de Andalucía, que fue respaldada por el Ministerio de Cultura, que no vio inconvenientes en que la Administración andaluza continuase con dicho procedimiento.
Los efectos en Abengoa
La declaración de BIC adoptada por la Junta impedía que la obra, incluida dentro de los bienes de Abengoa que han salido a liquidación en el proceso concursal, pudiese ser vendido fuera el mercado artístico nacional. Además, otorgaba al Gobierno andaluz el derecho de tanteo sobre el cuadro en caso de venta.
Para Abengoa, según se expone en el recurso interpuesto y al que ha tenido acceso este periódico, la declaración del lienzo como BIC produce «una grave limitación de las facultades inherentes al derecho de propiedad». Así, añade que la Ley del Patrimonio Histórico de Andalucía limitan el dominio de tal modo que la transmisibilidad del bien, incluso en el mercado nacional, resulta «prácticamente imposible afectando de forma superlativa» al patrimonio de una sociedad que se halla en estado legal de concurso, así como a sus obligaciones con terceros acreedores como es la Tesorería General de la Seguridad Social, titular de un derecho real de prenda sobre el cuadro (derecho real de garantía constituido sobre determinados bienes del deudor o de un tercero para asegurar el cumplimiento de una obligación y que otorga a su titular el poder sobre la cosa mueble permitiéndole su posesión, y de incumplirse la obligación principal, realizarla).
«La declaración BIC provocaría una lesión patrimonial grave, injusta y evaluable económicamente, y por ende, indemnizable, para Abengoa», añade dicho recurso.
Los argumentos de Abengoa
La adquisición de la obra por Abengoa se produjo el 14 de marzo de 2014. En un ejemplo de restitución histórica, recuperándose una obra capital de la producción artística del pintor sevillano Bartolomé Esteban Murillo, que fue saqueada en 1810 por el mariscal Soult del hospital de los Venerables, para el que fue creado por encargo de Justino de Neve. En noviembre de 2015 se firmaba un contrato de comodato por el que Abengoa cedía el cuadro a la Fundación Focus, que la propia compañía impulso años antes y de la que ahora se encuentra totalmente desligada. La Fundación se comprometía al mantenimiento, custodia y vigilancia de la pintura. Dicho contrato contempla la libre revocabilidad de mismo y la recuperación del lienzo por Abengoa en cualquier momento.
Así, lo recuerda la multinacional en el recurso de reposición, donde además expone la falta de interés legítimo de Felipe Benjumea para instar a la incoación del expediente de la declaración de BIC. Aunque Benjumea es presidente de la Fundación.
Uno de los principales argumentos de Abengoa es el incumplimiento del artículo 32.1 de la Ley de Patrimonio Histórico Español, que señala que los bienes muebles cuya importación haya sido realizada legalmente y esté debidamente documentada, de modo que el bien importado quede plenamente identificado, no podrán ser declarados de interés cultural en un plazo de diez años a contar desde la fecha de su importación. Según la compañía, no podía declararse BIC hasta 2024.
En el caso del 'San Pedro penitente' no existió comunicación formal ni licencia de la Administración, aunque según el recurso la ley no exige la comunicación de la importación, sólo que sea legal, documentada y el bien esté identificado. En este caso la importación de la obra fue «notoria y pública», pues fue exhibida en el Museo del Prado.
Otro de los asuntos gira en torno al artículo 32.2 de dicha ley y la exportación de bienes. Aunque el Gobierno, en una consulta hecha por la Junta durante el proceso de la declaración de BIC, dejaba claro que al cuadro de Murillo no le era aplicable lo establecido en dicho artículo, y no existía inconveniente para seguir adelante con el expediente de protección.
En este sentido, hace dos semanas la directora de la Fundación, Anabel Morillo, en respuesta a los administradores concursales de Abengoa en una consulta sobre si la entrada en España del cuadro se registró en el organismo correspondiente para su reexportación, aclara que no se hizo, pues la obra se compró para que fuese una restitución histórica y no fuera nunca reexportado.
«Dicha falta de registro no es debida a un olvido o error, sino a una voluntad y determinación clara desde que se inician los primeros pasos para su adquisición», señala Morillo. La directora general de la Fundación le insiste a los administradores concursales que la intención de la compra de la pintura nunca fue la de permitir su reexportación. Quedó vinculada a la colección de Focus, como se hizo con otras obras, como 'Santa Rufina', de Velázquez, según Morillo, que el pasado mes de diciembre, como ha adelantado este periódico, registró una petición a la Consejería de Cultura para que vincule la obra, declarada BIC, con el hospital de los Venerables, también BIC. Así se evitaría que el cuadro de Murillo puede salir de Sevilla, aunque la Junta, a la espera de un informe jurídico, tiene serias dudas de si es viable legalmente. Las presiones de Abengoa para desproteger el cuadro y poder venderlo continúan mientras la intención de la Fundación es que siga en Sevilla.
Así también se han pronunciado desde el equipo del consejero de Cultura, Arturo Bernal, quien mientras estudian la petición de Focus, quiere arrancar un compromiso del Ministerio de Cultura para poner en marcha una estrategia común con el Ayuntamiento también, que podría pasar por la adquisición del cuadro, que en una tasación de 2016 se valoró en ocho millones de euros.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete