El Ayuntamiento de Sevilla tendrá un edificio de 3.000 metros junto al estadio del Betis

Una de las cuestiones fundamentales para el Ayuntamiento es cómo se resolverá el suelo que debe quedarse el propio Consistorio, tal y como está planteado en el convenio de 2004, que sigue vigente. La administración local, entre otros beneficios, obtendrá como mínimo un edificio de 3.000 metros cuadrados para destinarlo a equipamientos públicos. Se situará, casi con seguridad, en el anexo que los arquitectos han diseñado en la zona de la explanada de Preferencia y que tendrá la forma de un edificio abalconado, dentro del cual habrá dependencias que el gobierno municipal podrá utilizar bien para un centro cívico, una biblioteca o incluso tendrá la posibilidad de cederlo como concesión a un tercero para una explotación distinta o venderlo directamente, si así lo estima, y sacar un rendimiento económico.

Otro de los requisitos que se estipulan en el convenio de 2004 y el PGOU de 2006 es que se destine una zona de 2.500 metros cuadrados de espacios libres, verdes. Así se contempla en el proyecto de De la Hoz y Gensler: una zona arbolada que se pondrá al servicio del barrio de Heliópolis.

La Gerencia, junto al club, abrirá un proceso urbanístico participativo en el que se escuchará a todos los agentes, entre ellos los propios vecinos. Fuentes del Ayuntamiento aseguran que el principal reto es dar solución a la inseguridad jurídica existente hasta ahora y dar viabilidad al proyecto tras años de espera. De esta forma, supondrá la integración del barrio para que éste se beneficie de los equipamientos que resulten del nuevo Benito Villamarín.

El gobierno de José Luis Sanz tiene como línea maestra agilizar las trabas urbanísticas de forma que no se pierda un solo euro que se pretenda invertir en la ciudad. Esto incluye los proyectos de actualización de los estadios, tanto del Betis como del Sevilla, al considerar que son enclaves que deben servir de motores de atracción, incluso para deslocalizar el turismo que viene a la ciudad, unos espacios emblemáticos, iconos de Sevilla y con una oferta de servicios, ocio y deportiva.

Para ello, la Gerencia ha diseñado una nueva fórmula urbanística que pasa por descartar las anteriores propuestas que no daban seguridad jurídica ni garantizaban la financiación. La nueva ley de ordenación urbanística de Andalucía, la conocida LISTA, permite dar solución de ordenación y gestión al proyecto, facilitando el otorgamiento de la licencia de obras.

Lo primero que tendrá que hacer el Betis es redactar el estudio de ordenación, que salve las cuatro trabas que históricamente han lastrado el proyecto: la viabilidad de la permuta directa de terrenos, la incorporación de 8.308 metros de suelo del Ayuntamiento, la previsión de una gran superficie minorista y el derecho de reversión de la propiedad de los suelos, que fueron cedidos por el Ayuntamiento a la entidad mediante cesión modal, con la condición de que fueran «siempre, destinados a campo de deportes, no siendo autorizado ningún uso distinto». Se añadía también que «no podrán levantarse edificios que no sean destinados para deporte y sus anexos».

Este estudio de ordenación deberá incorporar un mecanismo de gestión de compensación, constituyendo una junta entre los propietarios -el Betis y el Ayuntamiento-, que acabará resolviéndose con un convenio donde quedarán fijadas las ordenaciones y el aprovechamiento de los espacios libres y equipamientos que le corresponden al Consistorio.

Después, deberá redactarse un proyecto de reparcelación para localizar las edificaciones que le corresponderán a cada uno y, tras ello, se podrá conceder la licencia de obras. Esto conlleva determinar, asimismo, las obras complementarias en el entorno del estadio, repartiendo las cargas entre los propietarios, como es el estudio de movilidad.

El trámite deberá iniciarse tras la redacción del documento de 'avance' que, acompañado del estudio medioambiental, deberá ser aprobado por la Junta de Gobierno local. A partir de ahí, saldrá a exposición pública.

Luego, ambos documentos deberán ser remitidos a la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, para que los vise y, una vez obtenida la evaluación ambiental, deberá ser aprobado inicialmente en el Pleno municipal. La Junta deberá visar también el informe sobre 'Gran superficie minorista'.

Una vez garantizada también la viabilidad económica del proyecto y quede salvada la cesión modal del año 1969 que suponía un freno hasta ahora, se le dará luz verde al proyecto. Todo esto debe ocurrir de aquí a mayo del año que viene, de forma que el Betis pueda comenzar las obras.

Esta misma solución es la que le propone Urbanismo al Sevilla F. C. para cuando afronte su proyecto para el Ramón Sánchez-Pizjuán. Por otro lado, se trabaja ya para mejorar los accesos al estadio de La Cartuja, donde se trasladarán ambos equipos.