Balance de una Feria que hoy será historia

Juan J. Borrero

Sevilla

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29/04/2023
Actualizado a las 10:54h.

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La Feria de 2023 ha tenido un protagonista principal, el calor. No hay duda. Pero también ha marcado luces y sombras que habrá que analizar desde el momento que este sábado los fuegos artificiales la lleven hasta los campos de la nostalgia.

Sin incidentes

A falta del balance de la noche del viernes y el sábado, la Feria ha transcurrido sin incidentes graves. Como ocurrió con la Semana Santa, los sistemas de seguridad han funcionado. Amén de las asistencias sanitarias e intervenciones policiales habituales, lo más destacable fue el fuego en las cuadras de la noche del miércoles. La rápida intervención de los bomberos evitó la catástrofe. A falta del atestado final, todo apunta a que fue fortuito. El suceso de todas formas alerta de que hay que extremar la atención en esta trastienda del recinto ferial.

Servicios Municipales 

Lo primero no sería posible sin un buen balance en general de los servicios públicos. Además de la labor de los Cuerpos de Seguridad, hay que destacar el trabajo de Lipasam, sobre todo porque este año la afluencia de público ha sido masiva durante las madrugadas. La fiesta se ha alargado hasta las primeras horas de la mañana, lo que reduce el tiempo para acometer la limpieza y adecentamiento. Bien la medida de instalar puntos de agua fresca por parte de Emasesa. También mejoró con respecto a otros años el espectáculo previo al encendido de la portada. En lo negativo, hubo calles a las que no llegó la reposición de farolillos.

Registros históricos

Las estadísticas apuntan a una Feria de máximos históricos en afluencia, uso de los medios de transportes públicos e incluso en consumo en las casetas a pesar de la inflación de ser una Feria de final de mes y del calor (otro registro histórico) o precisamente por eso. Hubo que hidratarse constantemente.

Paseo de caballos

Ni las altísimas temperaturas restaron lucimiento al paseo de caballos, sin el que no se entendería la Feria de Abril. El nivel de los enganches y de las caballerías, el vestir de amazonas y caballistas es un lujo. Gloria de la Feria. Curiosamente hubo días con mayor afluencia de coches y caballistas y más fluidez (martes) y otros que con menos densidad sufrieron retenciones puntuales, debido a la cantidad de coches parados en las aceras.

Estética clásica

Ya pueden caer lenguas de fuego del cielo que los sevillanos cumplen de forma exquisita con la etiqueta de la Feria. Los hombres mayoritariamente no sucumbieron a la tentación (más que justificada) de despojarse de la corbata y la chaqueta y, como se esperaba a tenor de los registros históricos de ventas de los establecimientos especializados, se ha visto renovación y diversidad en la moda flamenca. El visitante nacional viene prevenido sobre los usos y costumbres de la Feria en este aspecto. En cuanto a detalles de la estética de la Feria, cabe destacar la monumentalidad de la portada encendida.

La feria Taurina

Histórico es lo ocurrido en la plaza de toros de la Maestranza, que es como un apéndice del real otra parte de la fiesta. Más allá de la apoteosis morantista, la sucesión de triunfos de toreros y ganaderías hace que hasta el momento sea una feria inolvidable.

Infraestructura

La Feria de 2023 ha puesto en evidencia la necesidad de mejorar la infraestructura básica del real. La renovación de la red eléctrica que data de 1972 es urgente, tras el susto del apagón de la noche del pescaíto. Falta por acometer dos fases, con un coste de 2,9 millones de euros, para lo que el Ayuntamiento pide cofinanciación a Endesa. El real necesita de red que asegure la demanda energética suficiente y que permita a las casetas, por ejemplo, incorporar aire acondicionado, algo que se va a debatir mucho entre los socios de casetas a tenor de lo ocurrido este año. El calor las convirtió en hornos.

Horario y modelo

Esta circunstancia ha cambiado este año los horarios de la Feria. Si antes de la pandemia la noche había bajado en intensidad. Las altas temperaturas han devuelto al real un público que aguanta hasta altas horas de la madrugada. La noche del martes había casetas llenas a las seis de la mañana. Estos cambios se dan por ciclos. Otra cuestión muy debatida este año es el modelo de Feria. Los detractores de celebrar la noche del alumbrado en sábado insisten en que se desvirtúa la celebración del pescaíto al llegar mucha gente de fuera, y que con este modelo las últimas jornadas cae mucho el ambiente en el real. De una u otra forma, sábado o lunes, nada impide que las jornadas previas en las casetas se disfrute de la 'preferia'.

Ampliación

Este debate sí debe afrontarlos desde el primer día la nueva Corporación. Ya no hay más excusas. Hay que rescatar el proyecto de ampliar el real hacia la calle del Infierno, creando dos calles de casetas. Y cuanto antes se haga mejor. De paso se acometerían esas mejoras en infraestructuras antes reseñadas. Demorarlo con quiméricos (por costosos) traslados al Charco de la Pava es una patada hacia adelante que puede dañar más la imagen de la feria en un futuro inmediato por su incomodidad. De paso podría reconsiderarse el sistema de accesos.

Comer en el real 

Lo del calor ha sido la excusa de muchos para renunciar a comer en la Feria a partir del miércoles. Los restaurantes del entorno (Porvenir, Triana y Los Remedios) han hecho pleno de reservas. Los servicios de comidas de las casetas deben prever esta competencia real y mejorar la relación calidad precio de su oferta. No todo vale con la excusa de que estamos en feria.

Botellón

Es evidente, por los residuos que quedan, que sigue localizado en varios sectores de la Feria. Este año se vieron en la calle Antonio Bienvenida entre las casetas del PSOE y la del Distrito Casco Antiguo y en la trasera de Ignacio Sánchez Mejías.

La portada 'fotocall'

Se esperaba en una Feria preelectroral, pero se está convirtiendo en costumbre el posado y la declaración política en la portada entre la una y las dos de la tarde. Es menester que deje de usarse como 'fotocall', Es un símbolo universal tan singular que ha conseguido en siglos no llevar publicidad.

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