El Prado de San Sebastián, la parcela maldita para las sedes administrativas en Sevilla
La petición municipal para el uso de las sedes judiciales llega veinte años después de abortarse el proyecto de Moneo en la parcela conjunta, previo al escándalo de la Biblioteca universitaria de Zaha Hadid
El alcalde pide la cesión de los edificios judiciales del Prado para convertirlos en sede municipal

Proyectos en el
entorno del Prado
de San Sebastián
Biblioteca Central de la Universidad de Sevilla: Obra de la arquitecta anglo-iraquí Zaha Hadid
Edificio de oficinas: Obra del arquitecto Rafael Moneo
Futura sede
administrativa
del Ayuntamiento (actuales Juzgados)
Avda. de Menéndez Pelayo
Diego de Riaño
Avda. de Carlos V
Avda. de Portugal
Avda. del Cid
Aparcamiento suberráneo junto a los Jardines del Prado
Soterramiento del tráfico por el Prado de San Sebastián
Fuente: Elaboración propia / Gráfico: A. Montes

Proyectos en el entorno del Prado de San Sebastián
1
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1
Futura sede administrativa
del Ayuntamiento
(actuales Juzgados)
2
Aparcamiento suberráneo
junto a los Jardines del Prado
3
Edificio de oficinas
Obra del arquitecto Rafael Moneo
4
Soterramiento del tráfico
por el Prado de San Sebastián
5
Biblioteca Central de la
Universidad de Sevilla
Obra de la arquitecta
anglo-iraquí Zaha Hadid
Fuente: Elaboración propia / Gráfico: A. Montes
La petición realizada por el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, a la Junta de Andalucía para tramitar una cesión de uso de los edificios judiciales cuando queden vacíos por el traslado a la Ciudad de la Justicia de Palmas Altas vuelve ... a señalar al Prado de San Sebastián como el punto de la ciudad elegido para desarrollar un proyecto administrativo a pesar de haber cosechado dos décadas de decepciones urbanísticas.
La idea del alcalde recupera la que ya impulsó en su mandato Soledad de Becerril, concentrar en un edificio las sedes municipales dispersas. Para ello la alcaldesa solicitó el diseño de un edificio singular que desarrollaría Rafael Moneo y cuyas obras se iniciaron en 1999. El edificio ubicado en la pastilla de terreno situada junto a los edificios del Prado delante de la estación de autobuses, tenía cinco plantas y una superficie de 23.000 metros cuadrados, así como un aparcamiento subterráneo con 590 plazas.
Contaba con un pórtico con acceso a la estación de autobuses. Su coste se estimó entonces en 5.000 millones de pesetas, unos 30 millones de euros se financiaría con la venta de seis sedes municipales en distintas zonas de la ciudad y un crédito a bajo interés en 25 años. El proyectofue desechado por la nueva Corporación de PSOE y PA, en la que fue primera decisión urbanística del exalcalde Sánchez Monteseirín La parcela, que se planteó en el PGOU de 2006 como un intercambiador de Transporte y de nuevo como ubicación de una gran edificio administrativo sigue sin edificar y está asignada a Tussam.
El edificio de Moneo no ha sido el único en caer en el Prado antes de ser edificado. En junio de 2009, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía obligó a la Universidad de Sevilla a derribar los cimientos construidos del proyecto que, con la firma de la arquitecta iraní Zaha Hadid, pretendía levantar en la parcela trasera de los jardines del Prado. Se trataba de un edificio singular suspendido cuyas obras se iniciaron en 2008, una vez construido el aparcamiento y buena parte de los cimientos se ordenó la demolición judicial en 2012.
La justicia determinó que los cambios de planeamiento que convirtieron una parcela calificada comozona verde en educativa no se adecuaban a la norma. El revés judicial fue mayúsculo contra el Ayuntamiento, que no atendió a las denuncias ciudadanas y de los juristas y a la Universidad que tuvo que pagar indemnizaciones -el coste del fallido proyecto se calculó en 9 millones de euros- y la devolución de la parcela a su primitivo estado en un proceso judicial que se alargó durante más de una década.
Bajo tierra
Otras ideas vinculadas al Prado de San Sebastián, antaño real de la Feria de la ciudad, no pasaron del papel del planeamiento o la promesa política. Así ocurrió con el que pretendía hacer un paso deprimido para el tráfico que cruza la Glorieta del Cid para dejarla expedita como plaza pública y unir así los jardines con el foso de la Universidad, en el que también se proyectaban galerías comerciales.

Tampoco salió adelante el aparcamiento de vehículos 'robotizado'proyectado bajo la Glorieta del Cid en la acera que ocupa el pabellón de Portugal que presentó al Ayuntamiento en 2019 la empresa Dibein con una inversión de 15,3 millones de euros y del que nunca más se supo.
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