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POLÉMICA

Denuncias cruzadas de lesiones tras el desalojo de los ediles de Podemos e IU del Ayuntamiento de Sevilla

Tres policías locales resultaron heridos tras una protesta que acabó con la portavoz de Participa en un centro sanitario

S. L.

El gobierno socialista del Ayuntamiento de Sevilla ha defendido la polémica actuación de la Policía Local, a la hora de desalojar del Consistorio a los trabajadores contratados intermitentemente entre 2013 y 2016 por la sociedad municipal Limpieza Pública y Protección Ambiental (Lipasam), quienes denuncian su «exclusión» de la solución adoptada para las contrataciones temporales, y concejales y asesores de Participa –marca blanca de Podemos en el Ayuntamiento– e Izquierda Unida , ante la protesta sorpresa del colectivo y su intención de iniciar un «encierro ilegal».

Durante los hechos resultaron heridos tres de los numerosos agentes de Policía que se encargaron de expulsar de las dependencias municipales tanto a miembros de la protesta que viene llevándose a cabo a las puertas del Ayuntamiento y que este miércoles se trasladó al interior del edificio de la Plaza Nueva como a los concejales de Participa e IU que apoyaron su entrada en dependencias consistoriales.

Según informaron fuentes municipales a EP, tres agentes de la Policía Local han resultado lesionados, como reflejan los partes médicos, en el desalojo. En concreto, se trata de dos oficiales y un agente . Uno de los oficiales tiene «arañazos y una herida en el brazo», mientras el otro oficial presenta «torcedura de muñeca».

Por su parte, el agente presenta «arañazos en brazo y una contusión en la espinilla izquierda». Los partes han sido remitidos al juzgado y este jueves los aportarán los agentes a las diligencias, que ya instruye la Policía Local sobre lo sucedido.

La portavoz de Participa Sevilla, Susana Serrano, junto a su compañera Cristina Honorato, en su visita a un centro sanitario tras el desalojo. A la derecha, lesiones de un extrabajador de Lipasam

Por su parte, los expulsados también denunciaron haber sufrido lesiones durante el desalojo. Es el caso de la portavoz de Participa Sevilla, Susana Serrano, quien en declaraciones a Europa Press tras el desalojo se quejó de que «me han roto la uña de un dedo del pie ». Minutos más tarde, ella misma difundió a través de su perfil en Twitter una imagen suya en la que aparece con un collarín y sobre una silla de ruedas en la sala de espera de un centro sanitario. También se difundieron por redes sociales imágenes de las lesiones de uno de los exempleados de Lipasam, con sangre en las espinillas de ambas piernas.

Entre los representantes públicos expulsados del Ayuntamiento por la Policía Local se encuentran los ediles vinculados a Podemos Susana Serrano y Julián Moreno, el portavoz de IU Daniel González Rojas y su compañera la concejal Eva Oliva también fueron expulsados del interior del Consistorio junto a varios de sus asesores, como el coordinador de IU en Sevilla capital, Ismael Sánchez o la asesora de Participa en la Diputación Provincial y miembro de la CUT y el SAT, Sofía González .

El conflicto laboral irá a arbitraje

El Sercla mandó a arbitraje el conflicto de Lipasam, al que no se suma el comité de empresa

La situación se produjo justo después de que el Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla) cerrara «sin avenencia» la demanda de los exempleados de Lipasam contra el Ayuntamiento por un caso en el que además no cuentan con el respaldo del propio comité de empresa.

Además, el desalojo tuvo lugar apenas días después de que se produjera otro incidente similiar también protagonizado por los ediles próximos a Podemos y al Partido Comunista con motivo del encierro ilegal en sus oficinas en el Ayuntamiento de profesores interinos de los conservatorios sevillanos, a los que apoyaron permitiendo la entrada de enseres a través de las ventanas con objeto de evitar el control de seguridad exigido a todo aquel que ingresa en la Casa Consistorial.

Cabrera ve «inadmisible» el «encierro ilegal»

Mientras los partidos de izquierda han vuelto a exigir la dimisión del concejal delegado de Seguridad y Movilidad, Juan Carlos Cabrera , o su cese por parte del alcalde, Juan Espadas , desde el gobierno local socialista se calificó como «inadmisible» el «intento de encierro ilegal», por la «alteración del orden público y del normal funcionamiento de los servicios públicos que se prestan en el edificio».

«Defendemos, como no puede ser de otra forma, la libre decisión de protesta por las causas personales que crean haberse visto afectadas, pero como gobierno e institución estamos obligados a velar por el interés general. Hay fórmulas de protesta establecidas y aceptadas , que cuentan con las autorizaciones pertinentes que no pueden ser bordeadas por la puerta de atrás en lo que se refiere a la seguridad de la propia sede del Ayuntamiento que tiene normas muy claras», explica Cabrera.

Al respecto, el edil socialista recuerda que este mismo grupo de personas lleva semanas protestando en la puerta del Ayuntamiento y «ejerciendo su libre derecho con la autorizaciones y permisos».

Cabrera ha respaldado el trabajo de los agentes de la Policía Local en el desalojo, toda vez que estos extrabajadores de Lipasam accedieron al Ayuntamiento con el argumento de mantener citas con IU y Participa , como así fue, «para sortear el control de entrada y pasar después a ocupar los pasillos, bloquear las escaleras y los accesos a la planta superior», y apostarse «vociferando insultos e intercediendo y dificultando el normal funcionamiento municipal».

Según el gobierno local, los manifestantes ocuparon los pasillos, bloquearon las escaleras y los accesos a la planta superior

«Se les pidió en reiteradas ocasiones que desistieran de la actitud hostil y que desalojaran voluntariamente el Ayuntamiento; se les pidió que volvieran a las oficinas de los grupos municipales de IU y Participa que habían autorizado su entrada; recibiendo negativas por respuesta y obligando al desalojo por parte de la Policía Local», defiende el edil.

Desde el gobierno municipal, así, se hace un llamamiento a la responsabilidad de los portavoces y concejales de IU y de Participa «por el uso adecuado y dentro de las normas del Ayuntamiento. No puede valer todo en la sede de la institución. No pueden violarse las normas de seguridad ni los controles de acceso, no puede alterarse el funcionamiento porque los concejales y las concejales nos debemos al conjunto de los sevillanos».

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