Educación investiga el aprobado de ocho asignaturas a un alumno de un instituto de Sevilla sin ir a clase

Un alumno de 2º de ESO del instituto Félix Rodríguez de la Fuente situado en Pino Montano de Sevilla ha sido aprobado pese a que había suspendido ocho asignaturas y no ha ido a clase prácticamente en todo el curso. El caso ya está siendo investigado por la Consejería de Educación según han confirmado fuentes del departamento que dirige Javier Imbroda .

Según el sindicato Csif que ha denunciado el caso, el joven, que tiene abierto un expediente por absentismo escolar , no acudió al instituto en todo el curso, por lo que el equipo de profesores decidió suspenderle las ocho asignaturas. Sin embargo, la directora del centro comunicó al claustro que había que aprobarlo porque le habían comunicado que «podían tener problemas» si el chico era suspendido.

Por ello, ante la reclamación de la madre del menor, que alegaba que s u hijo no iba a clase porque tenía asma , decidieron cambiar las calificaciones y aprobarle todas las asignaturas. Según han explicado desde Csif, cuando un niño tiene una enfermedad reconocida que le imposibilita ir a clase el médico puede extenderle un certificado que le exima de asistir al colegio . Pero, al parecer, el asma no es motivo para que se deje de asistir a clase.

Por ello, según las fuentes sindicales los profesores le enviaban las tareas y todo el material a través de la plataforma digital que utilizan para ello. Sin embargo, el chico no respondía ni hacía las tareas por lo que existen correos de profesores pidiéndole que hiciera los deberes, unos mensajes a los que el alumno no contestó.

Por ello, el aprobado, que ha provocado un gran malestar entre otros padres del centro cuyos hijos sí tienen asignaturas pendientes, se hizo pese a que el chico no tenía justificación para no asistir a clase y menos aún para no hacer los deberes. «El claustro decidió aprobarlo por miedo», dice la portavoz de Educación de Csif, Manuela Tagua.

Al parecer lo ocurrido está siendo investigado por la Consejería de Educación mientras que ni los profesores ni la directora quieren pronunciarse sobre el tema . Se trata, en cualquier caso, de algo que llega en pleno debate sobre la Ley Celaá que pretende que no haya estudiantes que repitan curso. Desde la Asociación de Profesores de Instituto, APIA, también han criticado lo ocurrido asegurando que los profesores «temerosos de las reclamaciones se avienen a aprobar antes las amenazas de la madre».