Hazte premium Hazte premium

La Fiscalía de Sevilla pide ocho años de cárcel para el empresario Gil Silgado

Será juzgado este mes en la Audiencia acusado de los delitos de alzamiento de bienes y contrato simulado; la vista oral ya ha sido suspendida en varias ocasiones, la última por el coronavirus.

El empresario sevillano José María Gil Silgado junto a la que fue su pareja, la miss España María Jesús Ruiz ABC

S.L.

La Fiscalía de Sevilla pide ocho años de cárcel para el empresario sevillano José María Gil Silgado por los delitos de alzamiento de bienes y contrato simulado , un caso que la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Sevilla tiene previsto juzgar a finales de enero tras varias suspensiones, la última por el coronavirus.

Además del expresidente del Xerez CD , también conocido por ser procesado y absuelto en el caso Malaya , están acusados su hermana F. C. G. S. y su socio F. B. R. En su escrito de calificación, al que ha tenido acceso Efe, el Ministerio Público pide para cada uno de ellos cuatro años de prisión más una multa de 3.600 euros por un delito de alzamiento de bienes y otros cuatro años de cárcel y una multa de 7.200 euros por contrato simulado.

Los hechos datan de hace 18 años, en concreto de mayo del 2003 , cuando Gil Silgado, como apoderado de Sevilla Business, compró a Construcciones y Promociones Herrera&Martín e Hijos una finca rústica en Gelves por 3.703.030,30 euros que debía satisfacer en seis pagarés más otro por valor de 502.145,14 euros para una parte del IVA.

Los Gil Silgado no abonaron esos pagarés y el Juzgado de Primera Instancia 22 de Sevilla dictó el 10 de noviembre del mismo año una diligencia de embargo preventivo , aunque el acusado ya había vendido la finca a Gestión Urbanística del Aljarafe dos meses antes y había conseguido un beneficio de 3.509.115 euros.

De hecho, con el juicio ya en marcha, Gil Silgado compró otra finca en Cádiz y la vendió «de forma simulada y con la única finalidad de evitar el embargo». El dinero de esas ventas «no se integró en el patrimonio de la sociedad», advierte el fiscal.

El 2 de febrero del 2004, el banco informó de que no había saldo en las cuentas de Gil Silgado , quien fue requerido en dos ocasiones para que «designara bienes», pero no lo hizo.

El 5 de septiembre del 2005, Herrera&Martín e Hijos interpuso una querella contra los Gil Silgado que fue sobreseída en marzo del 2006 tras « una maniobra que logró engañar al juzgado », consistente en «aparentar solvencia mediante la aportación de dos documentos».

El Ministerio Público cita un pagaré por más de dos millones a favor de Sevilla Business por el inmueble de Cádiz a través de Inversiones Puerta Tierra, cuyo administrador era F. B. R., y una escritura por la que otra empresa, Andepro, vendía a la sociedad una finca rústica en Bormujos gravada con hipoteca.

Las actuaciones se reabrieron el 15 de diciembre del 2010, cuando los querellantes informaron al juzgado de que esos bienes no pertenecían a Sevilla Business.

Sin pagar deudas

Según la Fiscalía, el pagaré por el edificio de Cádiz «nunca se pagó porque era mera cobertura formal» de su transmisión y la finca de Bormujos fue tasada en 1.326.090,90 euros, muy por debajo de la hipoteca que Gil Silgado concertó con el banco, por lo que el encausado «sabía que era insuficiente para el pago».

El Ministerio Público defiende que las operaciones de los Gil Silgado «iban encaminadas a impedir el cobro de deuda alguna» y que aportasen otros bienes en la vía penal sólo fue «otro engaño» en el que cayeron sus acreedores y el propio juzgado, ya que el pagaré «no obedecía a ninguna operación real, nunca se reclamó y además la finca volvió a poder del acusado».

De hecho, ese inmueble de Cádiz apareció como traspasado a Calles Céntricas de Sevilla, administrada por F. B. R., quien primero otorgó poderes a otra hermana de Gil Silgado, luego al empresario y después a su madre.

«Todas las operaciones se encaminaban» a que Gil Silgado «recuperase la propiedad del edificio a través de otra sociedad que no respondería de las deudas», señala el fiscal. En cuanto a la finca de Bormujos, «fue gravada deliberadamente» por Gil Silgado, de modo que «gracias a sus conscientes impagos ya no valía nada».

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación