Economía circular
Investigadores sevillanos convierten residuos mineros en materias primas para la fabricación de baterías y otros dispositivos
El proyecto Rawmina, con financiación europea, elimina el potencial contaminante y le transforma en elementos cruciales para el desarrollo

Extraer materias primas de los residuos mineros. Eso es lo que están haciendo un grupo de investigadores en la facultad de Química de la Universidad de Sevilla que participan en el proyecto Rawmina, en el que colaboran 19 entidades relacionadas con la investigación (Empresas, Centros ... Tecnológicos y Universidades) de 9 países.
Según Alfonso Mazuelos, profesor de Ingeniería Química en la Universidad de Sevilla e investigador principal del proyecto, lo que pretenden es demostrar a una escala piloto que a partir de residuos mineros pueden extraer y separar lo que se conoce como materias primas críticas que son necesarias para el avance y de las que se depende.
Se trata de las denominadas CRM (critical raw materials), necesarias para el desarrollo tecnológico actual como son antimonio, cobalto, wolframio y germanio y que se consideran «cruciales» para la fabricación de baterías, herramientas de construcción, sensores, dispositivos electrónicos y médicos.
Y esto lo están haciendo en zonas muy cercanas como la cuenca minera de los ríos Tinto y Odiel de donde extraen los residuos, le eliminan el potencial contaminante y se pone en valor las materias primas para su posterior venta.
Con este proyecto se elimina el potencial contaminante de los residuos mineros que pueden ser reutilizados
Según explican, en el proceso Rawmina, mediante consorcios microbianos «se generan condiciones químicas adecuadas para convertir los minerales sulfuros metálicos (principal componente de estos residuos mineros) en sulfatos de metales solubles, que posteriormente pueden ser separados y acondicionados para cumplir con las exigencias de pureza necesarias para su comercialización«.
Así, con la disolución controlada de los sulfuros metálicos se elimina paralelamente la mayor parte del potencial contaminante de los residuos mineros (generación de drenajes ácidos), se libera espacio destinado a su almacenaje, siendo el consumo de agua mínimo. Además de usar tecnologías limpias, el proyecto se desarrolla en un entorno de economía circular, con lo que el balance de sostenibilidad uno de los objetivos del proyecto.
El rol de la Universidad de Sevilla en este proyecto es coordinar un grupo de trabajo destinado al diseño de reactores químicos y biorreactores para llevar a cabo los procesos de extracción de las materias primas críticas. Las tareas asignadas a la Universidad de Sevilla se desarrollan en la Facultad de Química , en el departamento de Ingeniería Química, por el grupo de Investigación Biohidrometalurgia (TEP 186).
Inversión europea
«Lo importante es que estamos limpiando un residuo sin tener que contaminar más», explica Mazuelos insistiendo en la importancia de este proyecto que cuenta con financiación de fondos europeos dentro de un paquete global de 12 millones de euros en el que colaboran 19 entidades relacionadas con la investigación de 9 países.De hecho han recibido financiación del programa de investigación e innovación Horizonte 2020 de la Unión Europea.
En el proyecto participan Sudáfrica, Portugal y Turquía. Desde la Unión Europea : República Checa, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Irlanda, Italia, España; fuera de la UE Chile y Reino Unido junto a tres universidades, cuatro grandes empresas y siete pymes.
Este proyecto ha incorporado recientemente a tres becarios predoctorales (dos graduados en Bioquímica y una graduada en Química), los cuales tienen la oportunidad de iniciar sus carreras investigadoras y desarrollar su tesis doctoral en la Universidad de Sevilla en una temática tan atractiva y actual como es la valorización y gestión de los residuos generados en una actividad de tanto impacto económico y extendida en Andalucía como es la minería.
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