La recuperación de la minera reactiva el negocio de los explosivos en Sevilla

Las subastas de armas es la parte más conocida del trabajo que desarrolla esta unidad especializada de la Guardia Civil. Pero hay otras competencias que están generando cada vez más trabajo porque detrás hay una actividad en auge. Es el caso de la fabricación y venta de explosivos para el uso civil. Desde la Intervención de Armas están detectando un aumento del negocio vinculado al resurgir de la minería ligada a la Faja Pirítica. «Hay una fábrica muy potente en Gerena y otra proyectada en Morón. La minería está demandando ese tipo de productos que exigen una vigilancia especial», señala el jefe de la Intervención de Armas.Los agentes de esta unidad tienen encomendado el control de todo el proceso, desde la fabricación del explosivo, pasando por su almacenamiento y venta final. El año pasado realizaron 368 inspecciones que se saldaron con la detección de 61 infracciones, la mayoría relacionadas con deficiencias en el registro o exceso de cupo (por seguridad hay establecidos unos límites de almacenaje). España, a través de la Guardia Civil, lidera un proyecto europeo sobre el tráfico de explosivos en el territorio comunitario. Scepylt (Sistema de Control de los Explosivos para la Prevención y Lucha contra el Terrorismo) es una iniciativa aprobada por los ministros del Interior del G-5 (Alemania, Francia, Reino Unido, Italia y España) en julio 2004, poco después de los atentados del 11-M. A través de este proyecto se persigue mejorar el control de estos materiales de uso civil que se mueven por Europa.En la labor inspectora que realizan los agentes de la Intervención de Armas se incluyen los establecimientos que venden pirotecnia, y que suelen ser el foco de atención de campañas específicas cuando llegan las temporadas de mayor venta: navidades y fiestas patronales. «Aquí hay una cultura de la pólvora importante, en pueblos donde se celebran romerías con mucha aceptación social. Pero en este último año, la pandemia ha golpeado con fuerza las ventas de productos pirotécnicos con la suspensión de eventos»; lo que se ha notado en una menor presencia de este tipo de productos en comercios.La unidad de la Comandancia de Sevilla, que es la cuarta intervención de España en volumen de trabajo, está inmersa en un proceso de digitalización para adaptarse a los nuevos tiempos. En 2020 se atendieron 17.000 citas que se tramitaron a través de internet. Un salto organizativo importante al que ha tenido que acostumbrarse, no con pocas dificultades, los titulares de licencias de edades más avanzadas. «Es cierto que hay personas a las que les cuesta algo más. Pero ha sido un avance importante porque la gente puede ser atendida de manera ágil sin tener que esperar en la oficina».

La recuperación de la minera reactiva el negocio de los explosivos en Sevilla

La provincia de Sevilla va a ser de las pocas que cuenten con dos fábricas: la que ya está operando en Gerena y la que se proyecta en Morón

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