Santa Justa cumple treinta años conectando Sevilla con Europa a alta velocidad
En este tiempo ha recibido 208 millones de viajeros y ha evolucionado adaptando sus espacios a las nuevas necesidades
La madrugada del 2 de mayo de 1991 entraba en Santa Justa los primeros trenes que pararon en los modernísimos andenes de la estación diseñados por los arquitectos Antonio Cruz y Antonio Ortiz para la llegada de la Alta Velocidad. Pero aquel trayecto inaugural no lo hicieron los AVE, sino los regionales de la serie 592 pintados de azul y amarillo que provocaban un ruido ensordecedor cuando frenaban en los apeaderos.
Con ese sonido se dio por inaugurada la estación que cambió para siempre la historia ferroviaria de Sevilla y que hoy cumple su trigésimo aniversario . Aquel hito, que formaba parte de toda la transformación de la ciudad para la celebración de la Expo 92, permitió unificar las dos terminales ubicadas en la Plaza de Armas y San Bernardo , más conocidas como la estación de Córdoba y de Cádiz, en una sola, y que han terminado convertidas en espacios comerciales.
Pronto la innovadora Santa Justa, que tuvo una inversión de casi 60 millones de euros, comenzó a llamar la atención por su diseño, que alternaba perfectamente la estética con la funcionalidad. En los primeros años acaparó premios como el Helios , que concede la Comunidad Económica Europea (CEE) por la eliminación de barreras arquitectónicas o el Brunel de Arquitectura , que otorga la Unión Internacional de Ferrocarriles. En 1993 le llegó el galardón más importante, el Primer Premio de Arquitectura Española del Consejo Superior de colegios de Arquitectos de España. Ya para entonces la estación estaba a pleno rendimiento con los trenes AVE circulando con regularidad en las seis vías adaptadas para los mismos y con la amplia zona comercial totalmente ocupada.
En todo este tiempo han pasado por su diáfano vestíbulo 208 millones de personas y ha sido un equipamiento fundamental para eventos de relevancia internacional como la Exposición Universal de 1992, el Mundial de Atletismo de 1999 o las sucesivas cumbres de líderes iberoamericanos, de la ONU o de grandes grupos empresariales como la del Consejo Mundial del Turismo en 2019.
También ha sido el modelo para la modernización del resto de las estaciones de Adif de toda España, con el abandono de los pequeños apeaderos que impedían crecer e incorporar nuevos servicios y la construcción de recintos más funcionales. Precisamente ese diseño diáfano y convertible es lo que ha permitido que Santa Justa se adapte a las nuevas necesidades sin tener que acometer nuevas reformas de envergadura que hubieran desvirtuado su diseño original.
Fue en 2001 cuando se inició una nueva etapa con la creación del Centro de Viajes , un nuevo espacio que alberga todos los servicios ferroviarios. Apenas un año después la estación sevillana se convierte en una de las primeras en recibir la certificación ISO9001/2000 , al disponer de nuevos elementos de medición como la satisfacción del cliente y de los trabajadores del recinto.
Esa misma década y cuando Santa Justa cumplía su decimocuarto aniversario, s e licita la mayor transformación que se ha hecho desde su inauguración, con una reubicación de los espacios comerciales, que queda configurada como una galería acristalada, más al estilo de los aeropuertos que de las viejas estaciones ferroviarias y llegando a contar con 26 negocios.
La última actuación contundente fue en 2011 cuando se realizaron obras complementarias para la modificación de la altura de los andenes de parada de trenes de Cercanías a fin de adaptarlos a las nuevas unidades que permiten un acceso total sin barreras. Otra de las obras de envergadura fue la instalación del último sistema de climatización en el vestíbulo con el que se eliminaban las máquinas interiores y los elementos innecesarios.
Además de las anteriores, dentro de este mismo contrato se ejecutaron obras de la ampliación de las marquesinas bajas y de los elementos de cubierta de las bóvedas, así como la mejora de las prestaciones de climatización e iluminación. Con ello se logró que los andenes estuviesen cubiertos al completo. Además, se prolongó la longitud de las marquesinas en más de treinta metros. Esta solución se realizó respetando la tipología y el cromatismo existentes y para ello el proyecto ha contado con la participación de los arquitectos autores del proyecto.
En los últimos años las principales inversiones se han destinado a la ampliación de la capacidad de la infraestructura ferroviaria con vistas al previsible aumento de viajeros derivado de la liberación del mercado ferroviario desde el pasado 14 de diciembre. A la espera están los viajeros habituales de la llegada del AVE de bajo coste, e l llamado AVLO, que conectará la capital andaluza con Madrid a lo largo de 2022 , como confirmó hace un mes el presidente de Renfe, Isaías Táboas. Ese hito marcará una nueva etapa en la estación sevillana que cumple tres décadas ya.
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