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Sevilla

Aumentan las personas que piden alimentos en el comedor social, que empieza a ofrecer desayunos

Más de ciento cincuenta familias, muchas de ellas con trabajos precarios, se llevan comida a casa dos veces por semana

Un voluntario del comedor de San Juan de Dios de Sevilla con bandejas de comida ABC

Jesús Álvarez

El comedor social de la Orden de San Juan de Dios, situado en la céntrica calle de la Misericordia , muy cerca de Las Setas, recibe cada vez más solicitudes de recogida de alimentos y las familias que van a sus instalaciones a recogerlos superan ya las ciento cincuenta.

«Hemos notado que ha disminuido la asistencia al comedor y aumentado la de recogida de alimentos. L os alquileres han subido y la mayoría de estas personas tienen un trabajo precario que no les permite llegar a final de mes», cuenta a ABC Pino Díaz , técnica en desarrollo solidario de los Servicios Sociales de San Juan de Dios.

Hay una alta representación de población inmigrante en estas familias que no tienen recursos suficientes para alimentarse. «Estamos observando en los últimos tiempos tenemos el crecimiento de una po blación empobrecida, cronificada, de pobreza severa -dice Pino Díaz-. Y vemos a gente que ya ha cumplido 60 años que no puede aceder al mercado laboral, no tiene ninguna prestación y carece de cobertura familiar. La po breza aumenta y se está cronificando».

Por este motivo, el comedor social ha abierto un nuevo servicio de desayuno que dura entre media hora y cuarenta y cinco minutos. « Servimos una bebida caliente, café o cola-cao, con su tostada con mantequilla, aceite de oliva y tomate », cuenta la técnica en desarrollo solidario.

San Juan de Dios ya ofrecía una bebida caliente en la recepción de sus instalaciones, antes de las duchas, que se abren a las diez de la mañana. Este servicio se amplió de dos a cinco días por semana. « En invierno hacía mucho frío y les poníamos un cola-cao o un café antes de la ducha. Ante la gran demanda, decidimos hacerlo diario».

Muchos de sus beneficiarios viven en la calle o en infraviviendas sin condiciones mínimas de habitabilidad . Aunque su perfil es variado, predominan los hombres de 50 a 60 años con alguna adicción. El comedor social atiende a unas 120 personas diarias.

El comedor de San Juan de Dios se abrió en mitad de la crisis económica y llegó a atender durante varios años a unas 180 personas diarias. Más tarde, la Orden decidió poner en marcha su programa de recogida de alimentos. Casi seiscientas personas se benefician de estas ayudas, de las cuales casi trescientas son niños o menores de edad.

De enero a septiembre de este año, el comedor repartió casi cuatro mil prendas de ropa, ofreció más de dos mil servicios de duchas y más de cien de peluquería.

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